La diócesis de Engativá (en latín: Dioecesis Engativensis) es una circunscripción eclesiástica de la Iglesia católica en Colombia, con sede en la localidad bogotana del mismo nombre, y hace parte de la provincia eclesiástica de Bogotá.

La diócesis fue erigida el 6 de agosto de 2003 por el papa Juan Pablo II por medio de la Constitución Apostólica Ad Efficacius Providendum, su jurisdicción comprende el municipio de Cota, el territorio completo de la localidad bogotana de Engativá (donde se encuentra la sede) y de la localidad de Suba, solo corresponden a la Diócesis las Unidades de Planeamiento Zonal -UPZ- de: Suba, Tibabuyes y El Rincón, el resto le corresponde a la Arquidiócesis de Bogotá. Tiene una extensión de 133 kilómetros cuadrados, en los que viven aproximadamente 1,5 millones de habitantes.

Cuenta con 3 Vicarias Episcopales Territoriales, 10 Arciprestazgos, 68 Parroquias, 4 Proyectos Parroquiales y 1 Santuario. ​

En 1970, Mons. Aníbal Muñoz Duque siendo arzobispo coadjutor de la arquidiócesis de Bogotá y administrador apostólico de la misma, promovió la creación de "vicarias pastorales" dentro de su populosa jurisdicción, buscando una mejor organización de la Arquidiócesis; Muñoz Duque tenía en la mira la posibilidad de que estas zonas pastorales se convirtieran en un futuro en diócesis independientes, para así procurar una mejor atención pastoral y administrativa en las áreas donde el aumento de la población y el desarrollo urbano lo requería, para lo cual, presentó un proyecto a la Santa Sede para tal fin.

En ese mismo año, el Cardenal Muñoz creó en el noroccidente de la ciudad de Bogotá la vicaría de la Sagrada Eucaristía, en ese entonces con 21 parroquias, y como su primer vicario nombró al presbítero Carlos Sánchez Torres.

En 1992 dado el crecimiento demográfico de la capital, el cardenal y arzobispo de Bogotá Mario Revollo Bravo, estableció la Vicaria de San Pedro, al frente de la cual continuo Mons. Sánchez Torres y en la vicaría de la Sagrada Eucaristía fue nombrado el presbítero Carlos Julio López. El 3 de mayo de 1996, el cardenal y arzobispo de Bogotá Pedro Rubiano Sáenz establece las vicarias pastorales en Zonas Pastorales Episcopales colocando al frente de ellas a sus obispos auxiliares.

Ya para el 2002 la arquidiócesis de Bogotá llegó a tener más de 6.500.000 feligreses y más 340 parroquias, aumentado la complejidad pastoral.

Finalmente, el 6 de agosto de 2003 el papa Juan Pablo II erige las llamadas diócesis urbanas de Fontibón, Engativá, y Soacha, con territorio desmembrado de la arquidiócesis de Bogotá y que corresponden a antiguas zonas pastorales de Bogotá.

Es exactamente la bula Ad efficacius providendum dada en esa misma fecha por el papa Juan Pablo II que erige la diócesis de Engativá, inicialmente con 48 parroquias. Además, según bula Cum primus praeficiendus expedida en esa misma fecha, se nombra como obispo de la nueva jurisdicción a monseñor Héctor Gutiérrez Pabón, quien tomó posesión el 21 de septiembre de 2003. Durante el mes de junio de 2015 el hasta entonces obispo de la diócesis renunció a su cargo a causa de su edad siendo esta aceptada.

El 26 de junio de 2015, Su Santidad el Papa Francisco, nombró a Mons. Francisco Nieto Súa obispo de Engativá. El 27 de julio de este mismo año tomó posesión canónica de la sede.

El 29 de junio de 2024 el papa Francisco aceptó la renuncia a la sede episcopal, por límite de edad, a Mons. Francisco Nieto Súa y nombró a Mons. Germán Medina Acosta, hasta ese momento obispo auxiliar de Bogotá, como nuevo obispo de la Diócesis, quien tomó posesión de la sede asignada el 23 de agosto del mismo año.