Pasar al contenido principal

arquidiócesis de cartagena

Vie 8 Mar 2024

Thalitha Qum: una década salvando a niñas y adolescentes de la violencia sexual desde la Arquidiócesis de Cartagena

“Niña, levántate”. Esta la traducción de ‘Thalitha Qum’, una expresión escrita en arameo, tomada del evangelio de Marcos 5:41, cuando Jesús le dice a una niña de 12 años que había muerto: “A ti te lo digo, niña, levántate”.Como en aquel tiempo, desde hace diez años, en la Arquidiócesis de Cartagena, es Jesús quien, con su amor y misericordia, a través de la hermana Blanca Nubia López y de los agentes pastorales de esta Iglesia particular, continúa salvando a niñas y adolescentes de la violencia, explotación sexual y del flagelo de la trata de personas. Una misión que se desarrolla, especialmente, en San Francisco, La María y La Candelaria, tres barrios de la capital del departamento de Bolívar, ubicados alrededor de la Ciénaga de la Virgen.A propósito de este Día de la Mujer, fecha en la que el mundo entero reflexiona y destacada la lucha legítima de las mujeres por el respeto de sus derechos, dignidad e igualdad, la Iglesia Católica colombiana reconoce y destacada, de manera especial, obras como esta que propenden por la cultura del cuidado hacia las mujeres, especialmente de las más vulnerables.“La obra Talitha Qum, es una zarza ardiente que simboliza lo sagrado de cada vida humana, un lugar del corazón de Dios mismo en ella, por eso merece nuestro respeto y abnegación en todo lo que ha realizado durante estos 10 años”, así la describió monseñor Luis Manuel Alí, obispo auxiliar de Bogotá y secretario general de la Conferencia Episcopal de Colombia, quien acompañó la reciente celebración de la primera década del programa.A través esta iniciativa, de la que hacen parte muchas mujeres con diferentes roles pastorales y psicosociales, se brinda protección y acompañamiento en la formación y empoderamiento de las niñas y adolescentes que viven en estas zonas periféricas. Además, se extiende a instituciones educativas y líderes comunitarios para que sean multiplicadores de las estrategias de prevención y sepan activar rutas de atención efectivas ante este tipo de situaciones que tanto dolor causan.El programa cuenta con un enfoque pedagógico que acude de manera particular a la cultura del teatro y la danza. Desarrollan actividades lúdicas enfocadas en el reconocimiento de sus derechos. También organizan salidas de campo para realizar ollas comunitarias, a través de las cuales buscan sensibilizar a las comunidades sobre estas problemáticas.'Talitha Qum' cuenta con una política de protección, seguridad, cuidado y salvaguarda que, aunque son cuatro palabras que parecen significar lo mismo, permiten “insistir a tiempo y a destiempo que los niños, niñas no se tocan y que tenemos que empoderarnos para que sean capaces de protegerse y de ayudar a otros niños, niñas, adolescentes y familias”, así lo expresa la hermana Blanca López, fundadora y directora de la obra.Diez años transformando vidas: la conmemoración.En medio de un significativo evento público en la Plaza de los Coches, junto a la emblemática Torre del Reloj de “La Heórica”, la Arquidiócesis de Cartagena conmemoró esta década de existencia de ‘Talitha Qum’. Contó con la presencia de autoridades eclesiales y locales, pero las beneficiarias del programa fueron las protagonistas.El evento, presidido por monseñor Francisco Javier Múnera Correa, arzobispo de Cartagena, estuvo acompañado por el cardenal Jorge Enrique Jiménez Carvajal, arzobispo emérito y de monseñor Luis Manuel Alí Herrera, obispo auxiliar de Bogotá y secretario del episcopado quien también agradeció por los años de servicio abnegado por la protección de los más vulnerables."Las niñas nos han regalado conciencia, nos han ampliado conciencias en las muestras que hemos evidenciado en este escenario. Esto sugiere nuestro compromiso, un compromiso que es de todos los que estamos acá. Crecemos en conciencia y adquirimos un compromiso. La tercera palabra que resume esta gran celebración es cooperación porque esta conciencia adquirida, que motiva un compromiso nos involucra a todos y todas”, así se expresó monseñor Múnera, a propósito de lo vivido durante la conmemoración.Tanto la fundadora del programa, así como el cardenal Jiménez, manifestaron la necesidad de llevar esta obra a otras comunidades:"Talitha Qum lleva 10 años transformando vidas, ha sido un camino muy esperanzador. En estos 10 años llegamos a 3 barrios de nuestra ciudad, pero la idea es seguir creciendo, llegando a otros rincones y siendo referentes en otros territorios. Nuestro sueño es extender la atención a niños, y adolescentes, una comunidad también afectada por este flagelo en la ciudad y esperamos que con nuestros aliados podamos hacer crecer esta misión", así lo expresó la hermana Blanca López.Conozca más detalles a través de las producciones audiovisuales realizadas por la Oficina de Comunicaciones de la Arquidiócesis de Cartagena:

Vie 16 Feb 2024

Semana Santa 2024 en Cartagena: el plan piloto que lanzará la Iglesia, en articulación con entidades del Distrito

Este año, la Arquidiócesis de Cartagena, en articulación con la Fundación Centro Histórico, la Corporación de Turismo de Cartagena y otras entidades del Distrito, buscará ofrecer a los visitantes de ‘La Heroica’ una experiencia turística única en Colombia, que combine la riqueza cultural e histórica de la ciudad, con el valor de la fe y la espiritualidad. Esta iniciativa arrancará con un plan piloto que será implementado durante la Semana Santa que se aproxima.Monseñor Francisco Múnera Correa, arzobispo de Cartagena, ha estado liderando esta importante apuesta por hacer de la ciudad un escenario de consagración, pero también de experiencias de encuentro. Iniciar con la Semana Mayor ayudará a reafirmar el verdadero sentido que debe tener para los fieles católicos una época tan importante del Año Litúrgico, epicentro de la vida cristiana en que se conmemora la Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo, e invita a la oración y a la conversión. .“La Cartagena que conocemos y debemos reconocer va más allá de la playa (…) Que se muestre como es: sin excluir a nadie, amable y acogedora. Que nos sintamos anfitriones de nuestra casa, una casa preciosa que Dios nos ha regalado a todos para cuidarla y protegerla, pero también para recibir a otros”, expresó al respecto monseñor Múnera.Según lo ha informado la Oficina Arquidiocesana de Comunicaciones, el pasado 12 de febrero se llevó a cabo un espacio de cocreación de este proyecto, que concluyó con la firma de un memorando de entendimiento por parte de las entidades participantes. En los próximos días se llevarán a cabo nuevas mesas de trabajo con cada entidad para el desarrollo de las actividades concretas que permitirán ofrecer una experiencia única de Semana Santa en Cartagena.Se espera que se trata de un proyecto duradero en el tiempo, pues “busca que Cartagena sea una ciudad acogedora, solidaria y que en ese ejercicio también incremente el sentido de pertenencia por la ciudad, por la gran riqueza que ofrece. Que intensifique la relación con Dios, con los demás y con los más vulnerables”, así lo indicó esta oficina.

Lun 4 Dic 2023

Los padres Eudistas en el Caribe colombiano

El pasado 1 de diciembre, en el claustro de Santo Domingo, en la ciudad de Cartagena de Indias, la congregación de Jesús y María, padres Eudistas, juntamente con las provincias eclesiásticas de Barranquilla y Cartagena celebraron sus 140 años de presencia misionera en Colombia, conmemorando la llegada de ese primer heraldo del Evangelio, como fue el sacerdote francés, padre Teodoro Hamón.Presencia misionera que se inició justamente en el caribe colombiano y con un doble propósito: Asumir la formación de los sacerdotes de la Diócesis de Cartagena y acompañar la cura pastoral de una Iglesia que distaba mucho de poder mantener la integridad de su fe, la piedad sincera, las buenas costumbres y el ejercicio de la misericordia. Recordemos cómo a finales del siglo XIX, esta diócesis comprendía lo que son hoy las arquidiócesis Cartagena y Barranquilla, así como las jurisdicciones eclesiásticas de Magangué, Sincelejo, Montelíbano y Montería. Llegaron a Cartagena por petición expresa de monseñor Eugenio Biffi, obispo de Cartagena y envío misionero del Papa León XII. Monseñor Biffi, durante su paso misionero por esta ciudad (1856 – 1862) antes de ser expulsado y confinado por un gobierno anticlerical, supo conocer, con su corazón de pastor, las más grandes y urgentes necesidades de esta Iglesia que ahora se le había confiado.Ya como obispo y viendo su clero, llegó a escribir: “El obispo de Cartagena es como un pobre carpintero obligado a trabajar con hierros viejos, oxidados y dañados ¿Qué hace el pobrecito? Imposibilitado para cambiarlos o reemplazarlos por otros nuevos, los limpia lo mejor posible, los hace afilar y continúa sirviéndose de ellos. Así tengo yo que hacer con mis sacerdotes que son casi todos viejos y cubiertos de óxido moral. No puedo mandarlos inmediatamente al cielo; el Señor se los llevará a su tiempo; yo procuro sacudirlos un tanto, quitarles el óxido moral, darles una limpieza general y sacarles el provecho que puedo. Así tengo siquiera quienes administren el bautismo a los niños y asistan a los moribundos.”Como evangelizador incansable que recorrió toda su diócesis y solícito por la realidad que palpaba, monseñor Biffi, quien por cierto era un muy buen fotógrafo, tomaría una foto que nos recuerda el modo cómo se organizaban y celebraban las fiestas patronales: “No basta santificar las fiestas, es menester santificarlas de un modo que no desagrade a la Majestad de Dios. Trátese por ejemplo de festejar al Santo Patrono, o a la Santísima Virgen, etc.; el pueblo se pone en movimiento, se elige una junta, se hace una cerca para toros, se buscan juegos de ruletas, no faltan sus gallos de pelea, se consideran imprescindibles los bailes públicos, y de preferencia, la censurabilísima cumbiamba (...) Dicen que van a la fiesta del santo o de la santa, pero en realidad van a divertirse al baile, a lucir vestidos, a consumir sus ahorros en la ruleta, o en el aguardiente, o en otros desórdenes más graves todavía”.A estos desafíos concretos llega la espiritualidad de los padres Eudistas, quienes desde el Seminario San Carlos Borromeo irradiarán todo un quehacer pastoral como formadores y misioneros según la voluntad de su fundador y lo harán con un llamado permanente a la conversión; viviendo en comunión íntima con Cristo; dejándose guiar por el Espíritu de Dios; manteniendo su conciencia de que han sido enviados por la Iglesia para santificar el pueblo de Dios; viviendo en comunión con la Iglesia en la persona de monseñor Biffi; manteniendo una valentía profética; amando a los hombres y mujeres como Jesús los amó y dando a todos esperanza en la hora que les tocaba vivir.Valoremos y agradezcamos a Dios este testimonio valiente de los padres Eudistas en nuestra región caribe. Ellos han sido para nuestras Iglesias testigos de oración y fraternidad; y han procurado que los corazones de Jesús y María, siempre abiertos a Dios, ardan en todos nosotros.

Mar 3 Oct 2023

Iglesia en Cartagena dio un paso adelante en la prevención de abusos

La Arquidiócesis de Cartagena dio un paso adelante en su compromiso con la protección y el bienestar de los niños, niñas, adolescentes y personas vulnerables en la Iglesia Católica.“Cuidar es Amar”: este el lema que inspira la importante misión que desarrollará dicha jurisdicción eclesiástica desde esta nueva área. Más que un espacio físico, se convierte en un eje prioritario de su trabajo, desde el cual se buscará fomentar entre todos sus miembros una Iglesia que cuida, custodia, protege, acompaña a su comunidad y que trabaja por formar apóstoles del cuidado.Implementar estrategias para prevenir los abusos y brindar apoyo psicosocial a niños, niñas, adolescentes y personas vulnerables en cualquier entorno relacionado con la Iglesia en Cartagena: estos serán dos de las principales dimensiones de este trabajo. Para ello, según han expresado, buscarán implementar políticas, protocolos y procedimientos alineados con las directrices de la Conferencia Episcopal de Colombia en el marco de un Sistema para la Cultura del Cuidado.De manera concreta, Mirma Cerra De La Cruz, la psicóloga que estará directamente encargada de la oficina para la Cultura del Cuidado, destaca que el trabajo desde allí se proyectará en cuatro dimensiones: prevención a través de formación en las instituciones educativas y eclesiásticas, detección de los casos que pueden ser reportados por la comunidad a través de diversos canales, atención terapéutica y reparación integral.La Arquidiócesis de Cartagena, como provincia eclesiástica, buscará también trabajar en articulación con otras diócesis de la región para garantizar la seguridad y el bienestar de todas las comunidades. Esto, inspirado en la iniciativa de la Conferencia Episcopal de Colombia denominada “Iglesias Particulares Seguras y Protectoras” entre los meses de mayo y junio, que permitió realizar varias jornadas de formación en algunas de las jurisdicciones que la confirman.El Vicario General de la Arquidiócesis de Cartagena, padre Richard Nieto, dio a conocer que el próximo mes “se llevarán a cabo encuentros formativos en diferentes ambientes eclesiales de la Arquidiócesis de Cartagena y asesorías a unidades de servicio, contextualizando a toda la comunidad arquidiocesana y trazando rutas para identificar y trabajar en estrategias de cuidado y el autocuidado”.El padre Nieto subraya también la importancia de esta Cultura del Cuidado para proteger a todas las personas que trabajan en la Arquidiócesis de Cartagena “cuidarnos los unos a los otros y caminar en esperanza”.La Oficina para la cultura del cuidado ofrece atención telefónica, presencial, virtual y anónima.Vía telefónica o WhatsApp: 315-3380 337Vía electrónica: [email protected]ón de quejas o denuncias escritas: en información de la curia arzobispal de Cartagena de lunes a viernes de 8-1pm y de 2 a 4 pm.La atención presencial se realiza de lunes a viernes desde las 8:00 a.m. hasta las 4:00 p. m en la oficina ubicada en el segundo piso de la Curia Arquidiocesana, Centro Histórico (carrera 5#34-55).

Jue 22 Jun 2023

Arquidiócesis de Cartagena será sede del último congreso de preparación al gran centenario misionero

Bajo el lema “Con María misionera más allá de las fronteras”, del 23 al 25 de junio, la Arquidiócesis de Cartagena acogerá el Cuarto Congreso Regional Misionero organizado por la Iglesia Católica colombiana como parte del camino de preparación para la celebración de los 100 años del Primer Congreso Nacional Misionero, conmemoración que se llevará a cabo en octubre del 2024. El espacio es impulsado por la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), a través del Centro Nacional Misionero, y por Obras Misionales Pontificias (OMP). Este nuevo congreso reunirá en la capital del departamento de Bolívar a más de 250 personas, entre obispos, sacerdotes, religiosos, religiosas y laicos, integrantes de las comunidades que conforman los COREMI’s (Comité Regional de Misiones) de la costa caribe y del nororiente del país, correspondientes a las provincias eclesiásticas de Cartagena, Barranquilla, Bucaramanga y Nueva Pamplona. Entre marzo de 2022 y enero de 2023 se llevaron a cabo otros tres congresos regionales en las diócesis de Pereira y Chiquinquirá y en la Arquidiócesis de Popayán. Durante este encuentro se llevarán a cabo diferentes ponencias, talleres y espacios de reflexión que, de acuerdo con el padre Samir García Valencia, director del Centro Misionero y encargado de las OMP de Colombia, permitirán reforzar el compromiso de los participantes con la naturaleza propia de la Iglesia: ser misionera, con una nueva prospectiva, especialmente de cara al gran acontecimiento centenario. Monseñor Mario de Jesús Álvarez Gómez, obispo de la Diócesis de Istmina-Tadó, administrador apostólico de la Diócesis de Quibdó y presidente de la Comisión Episcopal de Misiones, quien ha estado liderando este proceso, presidirá la Eucaristía de apertura en Cartagena durante la tarde del día viernes 23. En este caso, monseñor Francisco Múnera Correa, arzobispo de Cartagena, será el anfitrión del encuentro. Asimismo, realizando diferentes ponencias sobre aspectos relacionados con la misión estarán monseñor José Clavijo Méndez, obispo de la Diócesis de Sincelejo, monseñor Jorge Ossa Soto, arzobispo de Nueva Pamplona y monseñor Francisco Ceballos Escobar, obispo de la Diócesis de Riohacha. Al cierre, el señor Cardenal Jorge Enrique Jiménez Carvajal, celebrará la Eucaristía de clausura y envío misionero. Según lo ha indicado el padre Samir García, este último congreso regional representa “el culmen de estos cuatro momentos que han reunido a toda la Iglesia misionera en Colombia y, al mismo tiempo, será también el punto de partida para el lanzamiento oficial del XIII Congreso Nacional Misionero”, con el que se conmemora el centenario del Primer Congreso Nacional celebrado en 1924 y que será inspirado por el lema “En la Iglesia misionera, Colombia de primera”.

Mié 7 Jun 2023

Iglesia capacitó en prevención de abusos a 1.200 personas de la Provincia de Cartagena

Entre entre el 31 de mayo y el 3 de junio, tres ciudades y cerca de 1.200 personas acogieron el nuevo llamado hecho por la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) a través de su iniciativa de formación en prevención de abusos denominada ‘Iglesias Particulares Seguras y Protectoras’. En esta oportunidad, el turno fue para la Provincia Eclesiástica de Cartagena integrada por la Arquidiócesis de Cartagena, las diócesis de Montería, Sincelejo, Magangué y Montelíbano, así como por el Vicariato Apostólico de San Andrés y Providencia. Esas seis jurisdicciones eclesiásticas del país fueron las encargadas de convocar, a través de sus obispos y equipos diocesanos, a sacerdotes, religiosas, seminaristas, catequistas, agentes de pastoral, representantes de colegios católicos y miembros de movimientos apostólicos, quienes participaron de manera activa en las diferentes jornadas de capacitación realizadas en las ciudades de Cartagena, Sincelejo y Montería. Los talleres y charlas desarrolladas en esta quinta versión de la estrategia pedagógica estuvieron a cargo de monseñor Luis Manuel Alí Herrera, obispo auxiliar de Bogotá y secretario general de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), junto a tres miembros del Consejo Nacional para la Cultura del Cuidado y profesionales del equipo de trabajo del Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano (SPEC). Durante las capacitaciones se abordaron aspectos de tipo canónico, procesos integrales de prevención, líneas operativas y buenas prácticas para el cuidado, y comunicación con enfoque preventivo. Así mismo, se socializaron las líneas guía para la cultura del cuidado de la CEC, documento que orienta el trabajo que adelanta actualmente la Iglesia colombiana en este sentido. Mientras avanza la construcción de la cultura del cuidado, la evangelización continúa Por su parte, monseñor Farly Yovani Gil Betancourt, obispo de la Diócesis de Montelíbano, ha indicado que en este proceso preventivo es fundamental apostarle inicialmente al cuidado de las vocaciones y de la identidad sacerdotal y laical en Iglesia colombiana. Esto, de acuerdo con el prelado, ayuda a brindar mayores garantías para el cuidado de los destinatarios de la acción pastoral, de manera especial, de niños, jóvenes y adolescentes. Monseñor Gil agregó también que estos desafíos no pueden detener la misión propia de la Iglesia: “ante todas esas realidades, de manera especial, no podemos dejar de evangelizar. Al contrario, nuestra tarea es seguir evangelizando, buscando esos entornos seguros que nos ayuden a seguir construyendo el reino de Dios”. Una misión sinodal por la cultura del cuidado en la Iglesia colombiana De acuerdo con el monseñor Luis Manuel Alí, hacer de todos los lugares y contextos de la Iglesia colombiana lugares seguros, es tarea de todos sus miembros, consagrados y laicos. “Este es un signo de sinodalidad, porque la sinodalidad es caminar juntos y saber que todos necesitamos comprometernos en estas iniciativas”, puntualizó el obispo. Al respecto, monseñor Ramón Alberto Rolón Güepsa, Obispo Diócesis de Montería agregó que esta cultura del cuidado debe ayudar a mirarnos “como verdaderos hermanos, a cuidarnos los unos a los otros y a caminar en esperanza; el Señor nos ha llamado a que seamos corresponsables cada uno de nuestra salvación y de la salvación del otro, y en este camino sinodal esta corresponsabilidad se hace más necesaria y exigente”. Por su parte, el padre José David Osorio, delegado de la Oficina del Buen Trato de la Diócesis de Montería, agregó que este proceso de formación debe despertar “en cada líder, en cada catequista, en cada sacerdote, en la conciencia de mostrar a Cristo”, a través de acciones transparentes, verdaderas y auténticas, “que lleven a construir y a mejorar un ser humano que es un proyecto de Dios”. Lo que sigue para las Iglesias particulares de la provincia Más allá de estas primeras capacitaciones regionales, esta iniciativa de la Conferencia Episcopal de Colombia busca ayudar consolidar los equipos diocesanos de protección de menores, equipos de atención a víctimas, equipos que apoyen la implementación de protocolos de prevención, y a los que son responsables de adelantar los procesos canónicos. Por esto, en términos de proyección, el Secretario General de la CEC enfatizó en que “la idea es que cada una de las personas en las diócesis, en las iglesias particulares de esta provincia, sigan trabajando las líneas guías y aplicándolas ahora en los protocolos, en los códigos de conducta, en la ruta de atención”. Al respecto, monseñor Francisco Múnera Correa, arzobispo de Cartagena, afirmó que es necesario abrir los espacios y canales necesarios para que todas las personas que requieren ser escuchadas en estos casos, se sientan acogidas y apoyadas. Por esto, el padre Richard Nieto, Vicario General de esta arquidiócesis puntualizó que “el primer desafío es poder responder de manera concreta con una oficina de la cultura del cuidado, pero no oficina como lugar, sino la oficina como realmente todo un sistema que nos va a permitir articularlo con todos los desafíos que tenemos a nivel de la Arquidiócesis. Ahí están los desafíos pastorales, los desafíos que tenemos con los colegios arquidiocesanos, con Talita Kum”. Esto último, se refiere a un programa enfocado en atender la problemática de explotación sexual presente en Cartagena. Por su parte, el obispo de Montería afirmó: “ahora nos corresponde a nosotros seguir caminando. Ciertamente necesitamos mayor organización, mayor promoción y conocimiento de todos los protocolos que hemos diseñado, que hemos trabajado. Nos hace falta crecer más con la comunidad”. El siguiente turno será para la Provincia Eclesiástica de Popayán Para finalizar la primera etapa de este proceso de formación que inició en octubre del 2022 en la Arquidiócesis de Florencia gracias al apoyo solidario de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, los días 14 y 15 de junio se estará desarrollando la sexta versión de estas capacitaciones en la ciudad de Pasto, donde se reunirán los obispos y representantes de las seis iglesias particulares que integran la Provincia Eclesiástica de Popayán. Monseñor Alí ha dicho que, se espera, poder iniciar en el próximo mes de septiembre la segunda etapa de formación en las provincias restantes para que, de esta manera, en un año se pueda culminar el primer recorrido de las jornadas en la totalidad del país. Para conocer más sobre el trabajo de la Iglesia colombiana por una cultura del cuidado, ingrese AQUÍ.

Mié 5 Mayo 2021

En Cartagena: Encuentro provincial de seguimiento vocacional

Como parte de las celebraciones del Día del Buen Pastor que viene animando la Provincia Eclesiástica de Cartagena, se realizó el pasado 1 de mayo un encuentro vocacional con 30 jóvenes que están en proceso de discernimiento vocacional en el Seminario Provincial de Cartagena. La reflexión, que se realizó de manera virtual a través de la plataforma Zoom, fue iluminada con la cita bíblica: ‘‘Llamó a los que él quiso’’ (Cf. Mc 3,13). Dentro de este espacio, monseñor Jorge Enrique Jiménez Carvajal, administrador apostólico de la Arquidiócesis de Cartagena, hizo su intervención recordándoles a los jóvenes que Jesús es el mejor maestro y les advirtió lo necesario que son los sacerdotes en el mundo actual. Igualmente, se adelantó el conversatorio vocacional: ¿Por qué no tú?, que permitió discernir y despejar dudas sobre la vocación sacerdotal en esto tiempos; además de visibilizar cómo los distintos llamados que Dios hace al sacerdocio juegan hoy día un papel importante. Aportaron a este conversatorio: La Familia Bello Quintana, de la Arquidiócesis de Cartagena; la hermana Flor Enid Cerón, de la Congregación de Hermanas Franciscanas Misioneras de María Auxiliadora; el sacerdote delegado de pastoral vocacional de la Diócesis de Magangué, Luis Hernández; y el seminarista Nelson Correa, de la Diócesis de Montería. La jornada finalizó con un momento de adoración al Santísimo a cargo del padre Víctor Bustamante, de la Arquidiócesis de Cartagena y formador del seminario, recogiendo así todo lo vivido y colocando en manos de Jesús Sacramentado la vida de todos los vocacionados de la Provincia Eclesiástica de Cartagena, para que escuchen la voz de Dios en este mundo tan ruidoso. En este encuentro, que estuvo organizado y dirigido por la Pastoral Vocacional de la Arquidiócesis de Cartagena y la Diócesis de Magangué, participaron aspirantes al sacerdocio del Vicariato Apostólico de San Andrés y Providencia, de las Diócesis de Sincelejo, Montería, Montelíbano, Magangué y, por su puesto, de Cartagena.

Lun 29 Abr 2019

Desde el Cerro La Popa, jóvenes cartageneros envían mensaje de reconciliación

Con un mensaje de esperanza y reconciliación, de parte del Sumo Pontífice: ¡Vive Cristo, nuestra Esperanza!, más de 3 mil jóvenes cartageneros peregrinaron al Cerro de La Papa, uno de los sitios que presenta una visión panorámica perfecta de esta ciudad y del mar caribe. La Pastoral Juvenil Arquidiocesana, presidida por monseñor Jorge Enrique Jiménez Carvajal, y con la coordinación del presbítero Leonel Henao, dispuso a lo largo de las tradicionales cruces que se encuentran en el trayecto del cerro, reflexiones del Papa Francisco tomadas de la Exhortación Apostólica "Vive Cristo". Con el lema “VIVE CRISTO, NUESTRA ESPERANZA”, estas meditaciones llevaronun eje transversal, como un mensaje claro hacia el papel de los jóvenes en las comunidades cristianas, tomando como modelo a personajes ilustres del Antiguo y Nuevo Testamento. Los asistentes a esta celebración avanzaban en pequeñas comunidades, para poder vivir esta experiencia, no solamente junto a la comunidad a la que pertenecen, sino también para conocer y relacionarse con personas de otras parroquias, zonas e incluso municipios. Esto con el fin de responder satisfactoriamente a la llamada que se realiza desde el Vaticano, a congregarse de manera masiva, toda la juventud católica del mundo cada 3 años en un país diferente; pero sin dejar de congregarse en sus respectivas diócesis cada año. El encuentro que se realizó en la parte baja de La Popa, fue ambientado por los músicos del ministerioPa’ Dios, quienes al ritmo de la batería, lograron disponer los ánimos para la jornada que se avecinaba.Finalizado el recorrido, desde lacima de la heroica se dispuso otro momento de alabanzadonde la alegría de Cristo Vivo, contagió de Esperanza a los miembros de las comunidades. Con la animación del Ministerio Musical Jesucristo Sello de Garantía y de La Santa Banda, grandes y pequeños cantaron y bailaron para unirse como Pastoral Juvenil Arquidiocesana, porque Todos Somos PJ. Por: Julio César Berdugo Rivera Consejo Juvenil Zona 2 – Arquidiócesis de Cartagena