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dia de la mujer

Vie 8 Mar 2024

Thalitha Qum: una década salvando a niñas y adolescentes de la violencia sexual desde la Arquidiócesis de Cartagena

“Niña, levántate”. Esta la traducción de ‘Thalitha Qum’, una expresión escrita en arameo, tomada del evangelio de Marcos 5:41, cuando Jesús le dice a una niña de 12 años que había muerto: “A ti te lo digo, niña, levántate”.Como en aquel tiempo, desde hace diez años, en la Arquidiócesis de Cartagena, es Jesús quien, con su amor y misericordia, a través de la hermana Blanca Nubia López y de los agentes pastorales de esta Iglesia particular, continúa salvando a niñas y adolescentes de la violencia, explotación sexual y del flagelo de la trata de personas. Una misión que se desarrolla, especialmente, en San Francisco, La María y La Candelaria, tres barrios de la capital del departamento de Bolívar, ubicados alrededor de la Ciénaga de la Virgen.A propósito de este Día de la Mujer, fecha en la que el mundo entero reflexiona y destacada la lucha legítima de las mujeres por el respeto de sus derechos, dignidad e igualdad, la Iglesia Católica colombiana reconoce y destacada, de manera especial, obras como esta que propenden por la cultura del cuidado hacia las mujeres, especialmente de las más vulnerables.“La obra Talitha Qum, es una zarza ardiente que simboliza lo sagrado de cada vida humana, un lugar del corazón de Dios mismo en ella, por eso merece nuestro respeto y abnegación en todo lo que ha realizado durante estos 10 años”, así la describió monseñor Luis Manuel Alí, obispo auxiliar de Bogotá y secretario general de la Conferencia Episcopal de Colombia, quien acompañó la reciente celebración de la primera década del programa.A través esta iniciativa, de la que hacen parte muchas mujeres con diferentes roles pastorales y psicosociales, se brinda protección y acompañamiento en la formación y empoderamiento de las niñas y adolescentes que viven en estas zonas periféricas. Además, se extiende a instituciones educativas y líderes comunitarios para que sean multiplicadores de las estrategias de prevención y sepan activar rutas de atención efectivas ante este tipo de situaciones que tanto dolor causan.El programa cuenta con un enfoque pedagógico que acude de manera particular a la cultura del teatro y la danza. Desarrollan actividades lúdicas enfocadas en el reconocimiento de sus derechos. También organizan salidas de campo para realizar ollas comunitarias, a través de las cuales buscan sensibilizar a las comunidades sobre estas problemáticas.'Talitha Qum' cuenta con una política de protección, seguridad, cuidado y salvaguarda que, aunque son cuatro palabras que parecen significar lo mismo, permiten “insistir a tiempo y a destiempo que los niños, niñas no se tocan y que tenemos que empoderarnos para que sean capaces de protegerse y de ayudar a otros niños, niñas, adolescentes y familias”, así lo expresa la hermana Blanca López, fundadora y directora de la obra.Diez años transformando vidas: la conmemoración.En medio de un significativo evento público en la Plaza de los Coches, junto a la emblemática Torre del Reloj de “La Heórica”, la Arquidiócesis de Cartagena conmemoró esta década de existencia de ‘Talitha Qum’. Contó con la presencia de autoridades eclesiales y locales, pero las beneficiarias del programa fueron las protagonistas.El evento, presidido por monseñor Francisco Javier Múnera Correa, arzobispo de Cartagena, estuvo acompañado por el cardenal Jorge Enrique Jiménez Carvajal, arzobispo emérito y de monseñor Luis Manuel Alí Herrera, obispo auxiliar de Bogotá y secretario del episcopado quien también agradeció por los años de servicio abnegado por la protección de los más vulnerables."Las niñas nos han regalado conciencia, nos han ampliado conciencias en las muestras que hemos evidenciado en este escenario. Esto sugiere nuestro compromiso, un compromiso que es de todos los que estamos acá. Crecemos en conciencia y adquirimos un compromiso. La tercera palabra que resume esta gran celebración es cooperación porque esta conciencia adquirida, que motiva un compromiso nos involucra a todos y todas”, así se expresó monseñor Múnera, a propósito de lo vivido durante la conmemoración.Tanto la fundadora del programa, así como el cardenal Jiménez, manifestaron la necesidad de llevar esta obra a otras comunidades:"Talitha Qum lleva 10 años transformando vidas, ha sido un camino muy esperanzador. En estos 10 años llegamos a 3 barrios de nuestra ciudad, pero la idea es seguir creciendo, llegando a otros rincones y siendo referentes en otros territorios. Nuestro sueño es extender la atención a niños, y adolescentes, una comunidad también afectada por este flagelo en la ciudad y esperamos que con nuestros aliados podamos hacer crecer esta misión", así lo expresó la hermana Blanca López.Conozca más detalles a través de las producciones audiovisuales realizadas por la Oficina de Comunicaciones de la Arquidiócesis de Cartagena:

Lun 8 Mar 2021

Las mujeres desde Fratelli Tutti

Por: Mons. Fernando Chica Arellano - Aprovechando la ocasión que nos brinda el Día Internacional de la Mujer, vamos a acercarnos en estas páginas a algunas reflexiones que, al respecto, realiza la encíclica Fratelli Tutti. Se inscribe así en la consistente aportación de la Iglesia, que siempre ha afirmado, en su doctrina, la dignidad inviolable de la mujer y siempre ha apostado, en su práctica, por la promoción de las mujeres. Efectivamente, el Papa Francisco recuerda que “así como es inaceptable que alguien tenga menos derechos por ser mujer, es igualmente inaceptable que el lugar de nacimiento o de residencia ya de por sí determine menores posibilidades de vida digna y de desarrollo” (FT 121). Por eso, “si toda persona tiene una dignidad inalienable, si todo ser humano es mi hermano o mi hermana, y si en realidad el mundo es de todos, no importa si alguien ha nacido aquí o si vive fuera de los límites del propio país” (FT 125). El análisis de la realidad nos muestra que “la organización de las sociedades en todo el mundo todavía está lejos de reflejar con claridad que las mujeres tienen exactamente la misma dignidad e idénticos derechos que los varones. Se afirma algo con las palabras, pero las decisiones y la realidad gritan otro mensaje. Es un hecho que doblemente pobres son las mujeres que sufren situaciones de exclusión, maltrato y violencia, porque frecuentemente se encuentran con menores posibilidades de defender sus derechos” (FT 23). En ese sentido, destaca de manera particular la situación de las mujeres rurales, que tantísimo sufrimiento acumulan en sus quehaceres, y que, al mismo tiempo, tantísima energía, esfuerzo, creatividad y audacia encarnan en sus vidas. Logran, de esta manera, abatir el pesimismo, hacer germinar por doquier la fraternidad y abrir horizontes de novedad en nuestros pueblos. Sobre sus hombros de jóvenes, madres, esposas, viudas o abuelas, alentadas por el entusiasmo o revestidas de sabiduría y experiencia, consiguen derrotar el egoísmo, no arredrarse ante las contrariedades y sostener a quienes vacilan, beneficiando de ese modo a sus comunidades, sacando adelante a sus familias e infundiendo en las nuevas generaciones la esperanza en un futuro mejor. Junto a ellas camina y a ellas sirve la Iglesia, la mayoría de las veces de una manera tan silenciosa como eficiente. Como señala la encíclica, “la afirmación de que todos los seres humanos somos hermanos y hermanas, si no es solo una abstracción, sino que toma carne y se vuelve concreta, nos plantea una serie de retos que nos descolocan, nos obligan a asumir nuevas perspectivas y a desarrollar nuevas reacciones” (FT 128). Porque, lamentablemente, “mientras muchas veces nos enfrascamos en discusiones semánticas o ideológicas, permitimos que todavía hoy haya hermanas y hermanos que mueran de hambre o de sed, sin un techo o sin acceso al cuidado de su salud” (FT 189). Para evitar la abstracción necesitamos acercarnos a las personas concretas, con sus historias y sus sufrimientos. “Preguntemos a las víctimas. Prestemos atención […] a las mujeres que perdieron sus hijos, a los niños mutilados o privados de su infancia. Prestemos atención a la verdad de esas víctimas de la violencia, miremos la realidad desde sus ojos y escuchemos sus relatos con el corazón abierto” (FT 261). Esta actitud nos abrirá a la verdad, de la mano de la justicia y la misericordia. “Verdad es contar a las familias desgarradas por el dolor lo que ha ocurrido con sus parientes desaparecidos. Verdad es confesar qué pasó con los menores de edad reclutados por los actores violentos. Verdad es reconocer el dolor de las mujeres víctimas de violencia y de abusos” (FT 227). En esa verdad encontramos no solo sufrimiento y desgarro, sino también espíritu de superación y un creativo anhelo por la vida, que en numerosas ocasiones y de mil formas diversas logran plasmar tantas mujeres en el mundo, y muy especialmente las que se encuentran en contextos de pobreza y marginación. Muchas de ellas simbolizan la actitud y las acciones del Buen Samaritano; en medio del dolor y de la herida “la parábola nos muestra con qué iniciativas se puede rehacer una comunidad a partir de hombres y mujeres que hacen propia la fragilidad de los demás, que no dejan que se erija una sociedad de exclusión, sino que se hacen prójimos y levantan y rehabilitan al caído, para que el bien sea común” (FT 128). Así pues, “cuidemos la fragilidad de cada hombre, de cada mujer, de cada niño y de cada anciano, con esa actitud solidaria y atenta, la actitud de proximidad del buen samaritano” (FT 79). Por ello los cristianos necesitamos volver una y otra vez a “la música del Evangelio” y permitir que suene “en nuestras casas, en nuestras plazas, en los trabajos, en la política y en la economía”. De lo contrario, “habremos apagado la melodía que nos desafiaba a luchar por la dignidad de todo hombre y mujer” (FT 277). Esta música del Evangelio renueva “la convicción de que cada mujer, cada hombre y cada generación encierran en sí mismos una promesa que puede liberar nuevas energías relacionales, intelectuales, culturales y espirituales” (FT 196). Al comienzo de su encíclica, el Papa recuerda que la expresión “Fratelli Tutti” fue empleada por San Francisco de Asís “para dirigirse a todos los hermanos y las hermanas, y proponerles una forma de vida con sabor a Evangelio” (FT 1). Con esa música y ese sabor a Evangelio la verdadera caridad cristiana se expresa “en el encuentro persona a persona” y, a la vez, “es capaz de llegar a una hermana o a un hermano lejano e incluso ignorado, a través de los diversos recursos que las instituciones de una sociedad organizada, libre y creativa son capaces de generar” (FT 165). “Reconocer a cada ser humano como un hermano o una hermana y buscar una amistad social que integre a todos no son meras utopías. Exigen la decisión y la capacidad para encontrar los caminos eficaces que las hagan realmente posibles. Cualquier empeño en esta línea se convierte en un ejercicio supremo de la caridad” (FT 180). También en esto son modélicas muchas mujeres empobrecidas, que saben combinar la ternura y la política, la cercanía y la firmeza, con una imaginación y tenacidad admirables. “Es el amor que se hace cercano y concreto. Es un movimiento que procede del corazón y llega a los ojos, a los oídos, a las manos. […] La ternura es el camino que han recorrido los hombres y las mujeres más valientes y fuertes” (FT 194). Que el Señor nos conceda avanzar en esta dirección. Y que la Virgen María, Mujer fuerte y Consuelo de los afligidos, interceda por nosotros. Fernando Chica Arellano Observador Permanente de la Santa Sede ante la FAO, El FIDA y el PMA

Lun 8 Mar 2021

El Presidente del CELAM reconoce la labor de las mujeres

Este 8 de marzo, en el marco del Día Internacional de la Mujer, el presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), monseñor Miguel Cabrejos Vidarte, ha expresado su reconocimiento y gratitud “a todas las mujeres de nuestros pueblos latinoamericanos y caribeños, especialmente por su singular don de ser fuente de vida y su coraje para defenderla”. No es solo un día, es toda una existencia “En la Iglesia consideramos que este homenaje no es solo de un día, sino de toda una existencia”, ha dicho Cabrejos Vidarte, sin ahorrar elogios para agradecer a Dios por cada una de las mujeres del continente, “por ser mujeres que tejen una Iglesia sinodal y en salida misionera en los más variados escenarios donde ‘primerean’ llevando la buena nueva del Evangelio”. Ya desde la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y Caribeño, en Aparecida, los obispos del continente han manifestado que “urge que todas las mujeres puedan participar plenamente en la vida eclesial, familiar, cultural, social y económica, creando espacios y estructuras que favorezcan una mayor inclusión”, como recuerda el Presidente del CELAM en su mensaje. El liderazgo de la mujer en la Iglesia En este sentido, siguiendo el ejemplo del Papa Francisco, que en múltiples oportunidades ha subrayado el papel fundamental de la mujer en la Iglesia, el CELAM, en su actual proceso de renovación y reestructuración, está dando “pasos decisivos para reconocer y promover el liderazgo de la mujer en la Iglesia”. Así lo expresan las instancias de participación del camino sinodal de la reforma del CELAM, lo mismo que el logo de la próxima Asamblea General en el cual, como asevera Mons. Cabrejos, “sobresale la presencia de la mujer en nuestro propósito de continuar tejiendo sueños, renovando compromisos”. El agradecimiento de los obispos “Queridas hermanas, los obispos de este continente les agradecemos su entrega y compromiso con las comunidades. Ustedes también son el rostro materno de Dios en la Iglesia, que es Madre y Maestra”, destaca el Presidente del CELAM, al final de su mensaje, alentándolas a continuar caminando bajo la inspiración de Santa María, “mujer llena de sabiduría” y “Estrella de la evangelización”. “Imploramos la bendición de Dios sobre sus vidas y la intercesión de Santa María de Guadalupe, patrona de nuestro continente, para que sigan siendo fieles a su vocación de tejer sinodalidad, en salida misionera”, concluye Mons. Cabrejos, con una cálida felicitación en el Día de la Mujer. Fuente: Departamento de Comunicaciones del CELAM [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon]

Vie 8 Mar 2019

Obispos saludan y exaltan labor de la mujer colombiana

En el Día Internacional de la Mujer, que se conmemora cada 8 de marzo, el presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, monseñor Oscar Urbina Ortega, envió un saludo en nombre de los obispos a todas las mujeres del país, pidiéndoles no perder el don de la ternura. “Hoy quiero hacerles un homenaje de reconocimiento, especialmente a las mamás, a las abuelas, a todas las profesionales que van llevando espacios de la vida nacional y pedirle a Dios que nunca la mujer renuncie a su vocación, su misión y a algo especial que Dios les dio en abundancia, su ternura”, aseveró. Resaltó la gran misión que tienen en el hogar y en la sociedad y las instó a continuar viviendo su vocación de mujer . Sumado a este saludo, monseñor Misael Vacca Ramírez, obispo de Duitama, saludó y felicitó también de manera especial a todas las mujeres, reconociéndoles su importante labor en la familia y en la sociedad. Pedimos a la Santísima Virgen, que sea para ella su modelo, porque también ella fue hija, modelo de madre, esposa y cumplió esa labor tan grande de ser la madre del Salvador. Que gande la vocación de la mujer, por eso le agradecemos hoy a Dios por ellas”, afirmó el prelado. Al final de su saludo, pidió para que cada día la mujer sea reconocida en su labor, su vocación, su dignidad y por su puesto en sus derechos por los que tanto han luchado. A este saludo se sumó igualmente el obispo de la diócesis de Florencia, monseñor Omar Mejía Giraldo, quien recordó el pasaje bíblico del libro de los proverbios en el Antiguo Testamento (Capítulo 10 versículos 10-31), al que el prelado dijo se podría llamar: “El elogio de la mujer perfecta” “A todas ustedes queridas mujeres, felicitaciones siempre y que Dios guarde ese corazón maternal de amigas, de mujeres líderes y que cada vez las llene de abundantes gracias y bendiciones, a todas ustedes que Dios las bendiga”, puntualizó. Por su parte, el obispo de Armenia, monseñor Carlos Arturo Quintero Gómez, agradeció por el don de la mujer y afirmó que es un regalo de Dios. Pidió por todas aquellas madres cabeza de hogar, por las abuelas, por las profesionales, por las mujeres consagradas y por las nuevas generaciones de niñas que empiezan a crecer. Además, extendió su oración a todas aquellas mujeres privadas de la libertad; por las mujeres gestantes, por las jóvenes desorientadas y por las mujeres ancianas abandonadas. Finalmente, expresó “Hoy quiero decir con humildad: hay una mujer que tiene algo de Dios por la inmensidad de su amor y el cuidado esmerado para con los suyos. Todo esto te lo pedimos por intercesión de María, mujer de esperanza y de paz. Amén”

Mié 9 Mar 2016

"Virgen María es ejemplo de madre y mujer": Obispo Cúcuta

En el marco de la celebración del Día Internacional de la Mujer, el obispo de Cúcuta, Mons. Víctor Ochoa Cadavid, envió un saludo especial por este día y puso a la Santísima Virgen María como ejemplo de madre y mujer. “Mujer que escuchó, puso en su corazón y vivió con hechos y situaciones concretas su vida y su entrega a Dios”, dijo el Obispo. En el mensaje difundido por la diócesis de Cúcuta, el Prelado invitó a las mujeres a reflexionar sobre su condición de mujer y “sobre la gran tarea que tienen en la sociedad”. Así mismo reconoció con gratitud “el trabajo, esfuerzo, sacrificio y abnegación. Especialmente a nuestras madres quienes han dedicado lo mejor de su vida y su esfuerzo a nosotros”. Además envió una palabra de aliento a las mujeres para que “en medio del esfuerzo y el sufrimiento reconozcan y fortalezcan sus valores”. Finalmente, antes de dar su bendición, el Prelado agregó que esta fecha debe ser “un día de profunda espiritualidad, entrega y reconocimiento al Señor por la vida, dones y el trabajo”. En 1972 la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró que el año 1975 se celebre por primera vez Día Internacional de la Mujer, y dos años más tarde, invitó a todos los estados a sumarse.