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monseñor Mauricio velez garcia

Vie 21 Feb 2025

Teología y doctrina al servicio de la realidad: Obispos promueven reflexiones sobre los desafíos sociales y pastorales que vive Colombia

Desde este mes de febrero, la Comisión Episcopal y el Departamento de Doctrina de la Conferencia Episcopal de Colombia, con el apoyo de algunas universidades católicas del país, desarrollarán y publicarán, un subsidio o documento de reflexión mensual, cuyos contenidos abordarán desafíos pastorales y sociales presentes en Colombia y en el mundo, a la luz del pensamiento teológico de la Iglesia Católica. Esto, bajo el propósito de aportar a la construcción de una visión crítica y esperanzadora que permita a la comunidad eclesial discernir los signos de los tiempos y responder con eficacia y caridad a dichos desafíos.“Convencidos de que la teología no solo interpreta la realidad, sino que también la transforma a la luz del Evangelio, hemos decidido emprender la publicación mensual de un documento que aborde, desde una perspectiva teológica, las realidades que atraviesan nuestro país y nuestra Iglesia”, expresa al respecto monseñor José Mauricio Vélez García, obispo auxiliar de Medellín y presidente de esta Comisión Episcopal.De acuerdo con monseñor Vélez, el aporte que harán a esta iniciativa expertos y miembros de las facultades de Teología de diversas instituciones colombianas, permitirá profundizar, aún más, en el análisis de los fenómenos sociales, culturales y espirituales que configuran el presente.“El momento histórico que vivimos nos exige una lectura atenta y serena de los acontecimientos, capaz de identificar las causas estructurales de nuestras crisis y de ofrecer propuestas concretas y sostenibles para su superación. Este esfuerzo, que pretende ser un aporte al bien común, también es una invitación a todos los sectores de la Iglesia a participar activa y constructivamente en el discernimiento colectivo”, agrega el presidente de la Comisión de Doctrina.“El ministerio episcopal: signo de esperanza en Colombia”, es el título del primero de estos documentos de reflexión. Está inspirado en la CXVIIIAsamblea Plenaria del Episcopado Colombiano celebrada entre el 3 y el 7 de febrero; los obispos recurrieron a él para la preparación del encuentro, ahora la Comisión de Doctrina y los miembros del Comité Teológico que la apoyan, lo ponen a disposición de los demás miembros de la Iglesia colombiana.A partir de este subsidio se podrá discernir sobre aspectos como: la esperanza en la misión del obispo, el obispo como promotor de la sinodalidad, el ministerio episcopal como signo de reconciliación y el obispo como testigo de martirio. Además, se plantean allí algunas acciones concretas a través de la cuales los pastores, acompañados por los demás miembros del pueblo fiel de Dios, pueden ser signo de esperanza en medio de los múltiples retos que enfrenta Colombia. En el contexto del Año Santo 2025, estas reflexiones podrán convertirse en una guía práctica para profundizar en la “vocación de ser sal y luz en el mundo”, facilitando la renovación de la identidad y misión de la Iglesia.“Que este espacio de pensamiento crítico y espiritualidad activa se traduzca en acciones concretas que edifiquen el Reino de Dios en medio de nuestra historia”, exhorta monseñor José Mauricio Vélez García.En contexto:¿Quiénes integran la Comisión Episcopal de Doctrina?Monseñor José Mauricio Vélez García, obispo auxiliar de Medellín, presidente.Monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, Obispo Castrense, integrante.Monseñor Hency Martínez Vargas, Obispo de la Dorada-Guaduas, integrante.

Lun 26 Ago 2024

El XIV Congreso SINE en la Arquidiócesis de Medellín renovó las fuerzas de la Nueva Evangelización para Colombia

Entre el 16 al 19 de agosto se vivió el XIV Congreso del Sistema Integral de Nueva Evangelización (SINE) en la capital de Antioquia. Fueron tres días en donde, según indicó monseñor Ricardo Tobón Restrepo, arzobispo de Medellín, el pueblo de Dios vivió la fe, la fraternidad y la esperanza, respondiendo a los llamados del Señor.En el encuentro participaron cerca de mil personas, entre ellas, laicos, sacerdotes, diáconos, seminaristas y obispos, representantes de 36 jurisdicciones eclesiásticas del país. Como signo de acogida y unión, cerca de 650 personas que llegaron de otras ciudades, fueron alojadas en casas de fieles medellinenses. El congreso tuvo lugar en la Pontificia Universidad Bolivariana.Eucaristía inaugural: “Al mundo le hace falta Evangelio”La jornada inició con la Eucaristía inaugural celebrada en la Catedral Metropolitana de Medellín el día viernes 16. Fue presidida por monseñor Ricardo Tobón. En su homilía, el prelado hizo énfasis en el acontecimiento que menciona Mateo 19, 3-12 donde Jesús deja Galilea, cuna del Evangelio, y se encamina a Jerusalén. Allí comparte sus enseñanzas sobre el matrimonio y el divorcio, donde también están implícitas las exigencias que implica para sus discípulos seguirlo.El Arzobispo de Medellín destacó este hecho porque la respuesta de Jesús, frente a la prueba que le hacen los fariseos es ir al principio, donde está el acto creador de Dios; ir a la fuente, es la proclamación del Reino de Dios que viene con poder. Por eso, según explicó monseñor Tobón, este Evangelio es un alegre anuncio de que, siguiendo a Cristo aquí y ahora, es posible actualizar el proyecto original de Dios.“Jesús quiere llevar hasta el fondo las posibilidades de la libertad humana, esto es una llamada profética que tiene un alcance profundo, el hombre solo debe ser lo que es, si busca primero el reino de Dios y su justicia”.Subrayó que Jesús mismo ha sido el más grande evangelizador y el primero de todos.; "lo ha sido hasta el final, hasta la perfección, hasta el sacrificio de su existencia terrena". A partir de su evangelización, de su vida, y sobre todo de su muerte y resurrección, Jesús convoca una comunidad para tenga vida en abundancia y para que vaya también a evangelizar, así lo explicó el prelado.“Solo Cristo es el camino, la verdad y la vida, solo Él tiene palabras de vida eterna, solo él es la esperanza y el futuro de la humanidad. No podemos despreciar la invitación de entregarnos con pasión por Dios y los hermanos, tenemos el mandato de ir hasta los confines del mundo para anunciar su nombre y su Evangelio. Por tanto, nos toca a nosotros ir al principio, nos toca entender”.Monseñor Ricardo Tocón también hizo referencia a la miseria que margina grandes grupos humanos, el subdesarrollo como realidad promotora de tensiones contra la paz, la violencia institucionalizada, las injustas desigualdades y diversas formas de opresión, narcotráfico, drogadicción que daña a las jóvenes generaciones, la mentira y la corrupción en todas sus formas, el vacío y la angustia en la que viven tantos hijos de Dios.“Sentir el dolor de tantos que viven sin fe y sin esperanza, descubrir la belleza y la grandeza de la misión, estamos llamados a entender, lo que le falta al mundo es Evangelio y por eso debemos ser discípulos misioneros”.El Arzobispo destacó que se deben percibir grandes cambios en la sociedad, en la vida, en la cultura, en la organización social del mundo y del país. También mencionó que debe haber una conciencia en cuanto al debilitamiento de la fe debido al secularismo, al hedonismo y al egoísmo. Recalcó que no se puede ignorar que la familia, que es uno de los tesoros más grandes de la sociedad, sufre situaciones adversas por el relativismo ético, la pobreza, la inestabilidad social, la ideología de género y la acción de ciertas fuerzas políticas.De acuerdo con monseñor Ricardo Tobón, en estos momentos la Iglesia está siendo invitada a purificarse y a ir a lo esencial. A construir una profunda unidad, a acrecentar el fuego misionero, a vivir sus opciones preferenciales por los pobres, las familias y los jóvenes, por lo cual no se puede ignorar los llamados del Espíritu.Mencionó también, que, en una época de cambios sin precedentes como esta, hay una única oportunidad para aportar los valores del Evangelio en la construcción de una nueva cultura.“Nunca es más fértil la evangelización que cuando hay necesidad de ella. Por lo que, no debe haber espacio para la división dentro de la Iglesia”.Monseñor Ricardo enfatizó que al mundo le falta Evangelio, razón por la que hay urgencia de ser discípulos misioneros. Para ello, hay que volver al principio, al proyecto de Dios, permitir que reine, lanzarse con audacia a una vida auténticamente cristiana y a la evangelización de todos los hermanos.Finalmente recordó que, a pesar de todas las apariencias, este es un tiempo de gracia, por lo que hay que renovar las fuerzas para centrarse en lo esencial y así desarrollar la misión a la que está llamada cada persona en particular dentro de la Iglesia.“Continuar por el camino sin caer en las tentaciones todavía presentes en la ideologización del mensaje evangélico del funcionalismo eclesial y del clericalismo, porque está siempre en juego la salvación que Cristo nos trajo”.Desarrollo de XIV Congreso SINE: “El Evangelio está en camino”Entre el sábado 17 y el lunes 19 de agosto, se desarrolló la agenda académica y celebrativa del congreso. Allí se presentaron diversas conferencias y charlas que tenían como objetivo fortalecer el llamado misionero con espíritu de sinodalidad, buscando guiar la pastoral de conservación, como modelo de evangelización, a una pastoral misionera. Así mismo, se buscó abordar los retos principales del Sistema Integral de Nueva Evangelización (SINE) para con los jóvenes. También, se plantearon espacios de trabajo como capacitaciones y talleres que permitieron reforzar etapas y conceptos esenciales para abordar la nueva evangelización.Al cierre del congreso monseñor Ricardo mencionó que ha sido un espacio donde se ha experimentado realmente la alegría de ser Iglesia del Señor y de responder a lo que Él le pide a su pueblo.“No podemos sino decir: el Evangelio está en camino, está en marcha y son muchas las personas que le quieren responder al Señor”.De igual forma, monseñor José Mauricio Vélez García, Obispo Auxiliar de Medellín, expresó que personas de distintas latitudes, de distintos lugares, comparten que este Sistema Integral de Nueva Evangelización necesita fuerza, empeño y más tenacidad, también afirmó que es necesario apostarle a las pequeñas comunidades. Si quiere saber más, vea las transmisiones de las jornadas del Congreso SINE a través del canal de Youtube de la Arquidiócesis de Medellín, haga clic AQUÍ.

Vie 17 Mayo 2024

¡La Arquidiócesis de Medellín está lista para vivir Pentecostés! 6 mil personas se congregaron para clamar “¡Abbá! ¡Padre!” y preparar la venida del Espíritu Santo

El pasado 13 de mayo, la Arquidiócesis de Medellín vivió su tradicional jornada de preparación para Pentecostés. En esta oportunidad, durante cinco horas, cerca de 6.000 personas se congregaron en el Polideportivo de la Universidad Pontificia Bolivariana para preparar, entre alabanzas, Hora Santa y Eucaristía, la venida del Espíritu Santo. Esto, en el marco de la importante fiesta litúrgica que la Iglesia Universal vivirá el próximo domingo, 19 de mayo.“El Espíritu Clama: ¡Abbá!”, fue el lema elegido este año para la celebración, tomado de la Carta de San Pablo a los Gálatas 4, 6. Con él, la arquidiócesis buscó motivar a los fieles para asumir esta fiesta como un acontecimiento de gracia que sigue vigente y que se hace realidad por la capacidad de cada uno para clamar en la intimidad de la oración: “¡Abbá! ¡Padre!”Monseñor Ricardo Tobón Restrepo y monseñor Mauricio Vélez García, arzobispo y obispo auxiliar de esta jurisdicción, respectivamente, acompañaron y motivaron los momentos de oración y adoración celebrados durante la jornada. Monseñor Mauricio, en su oración inicial, destacó la oración como la principal forma de relación con Dios. Por su parte, monseñor Ricardo, durante su homilía en la Eucaristía, expresó: “No hay grito que el padre no escuche, no hay ningún clamor que le sea indiferente. Somos hijos de Dios situados en su plan divino”. El arzobispo de Medellín también dirigió el culto eucarístico, que se convirtió en un espacio de silencio para abrir los sentidos y estar atentos a la respuesta de Dios ante el grito ¡Abbá!En este encuentro también hubo espacio para la catequesis. Estuvo a cargo del padre Gerardo Díaz, vicario episcopal del sur, quien presentó al Espíritu Santo como la mejor forma que tiene Dios de manifestar el amor hacia sus hijos.Como era de esperarse en este mes mariano, la jornada de oración y adoración finalizó con un encuentro especial con María a través del rezo del Santo Rosario, dirigido por el equipo de la Pastoral Vocacional. Desde allí, lograron acercar las intenciones más profundas de la Arquidiócesis de Medellín a la Madre de las Madres para seguir contando con su intercesión bondadosa.Todos los momentos de esta jornada fueron acompañados por los jóvenes del ministerio musical “Son de Dios”.El evento fue transmitido a través de las redes sociales de la Arquidiócesis de Medellín, véalo a continuación: