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La iglesia en Colombia

Mar 15 Oct 2019

Iglesia invita a jornada por la vida y la paz en el pacífico y suroccidente del país

Ante la compleja situación humanitaria, social y ambiental que afrontan las comunidades del pacífico y suroccidente de Colombia, distintas fuerzas vivas de la región, entre las que se encuentra la Iglesia Católica, convocan a la Jornada por la vida y por la paz: ¡Los pueblos buscan unidad!, que se llevará a cabo el próximo miércoles 16 de octubre. La iniciativa, han explicado sus promotores, busca: - Exigir la inclusión territorial con enfoque social y ambiental, a partir del cumplimiento de los derechos constitucionales y los acuerdos con sectores cívicos de la región. - Expresar el rechazo a las economías ilegales y a la corrupción administrativa. - Manifestar un NO contundente a la presencia de los actores armados ilegales y a la violación del DIH por parte de miembros de la Fuerza Pública. - Demandar la efectiva implementación del acuerdo de paz y la búsqueda de la transformación del conflicto armado a través de mecanismos de negociación. Según lo manifestó el arzobispo de Popayán, monseñor Luis José Rueda Aparicio, desde la región del pacífico y suroccidente de Colombia, la Iglesia se unirá con diferentes signos que “nos ayudarán a reforzarnos en la esperanza y en el compromiso de defender la vida, la reconciliación y la paz". Dentro de principales problemáticas que afronta esta zona y son objeto de denuncia por parte de sus habitantes, quienes reclaman acompañamiento y soluciones estructurales se encuentran: Abandono estatal, pobreza monetaria, desigualdad social, corrupción administrativa, narcotráfico, minería irresponsable, control territorial por parte de los grupos armados ilegales, violación del DIH por miembros de la fuerza pública, confinamiento, desplazamiento, asesinato de líderes sociales, reclutamiento de menores, secuestro. La jornada por la vida y la paz es convocada por: Organizaciones sociales, campesinas, indígenas y afrodescendientes; la Iglesia Católica presenta en la zona: Arquidiócesis de Cali y Popayán, Diócesis de Apartadó, Istmina, Quibdó, Palmira, Buenaventura, Guapi, Tumaco, Ipiales, Pasto y Mocoa-Sibundoy; sectores académicos; medios de comunicación; otras iglesias y confesiones religiosas. Acciones de la Iglesia durante la Jornada Estas son las Jurisdicciones que se harán presentes en esta Jornada por la vida y por la paz: Popayán: Catedral Basílica de Nuestra Señora de la Asunción (Eucaristía y lucernario - Hora: 6:00 p.m.) Cali: Concentración en la Plazoleta de la Gobernación (9:30 a.m. a 12 m.) Quibdó: Concentración y marcha - Parque Manuel Mosquera Garcés (8:00 a.m.) Istmina: Marcha homenaje a líderes y lideresas desde el colegio diocesano San José (3:00 p.m.) Mocoa-Sibundoy: Marchas y eucaristía en Parroquias y centros misionales. Palmira: Jornada de Oración - Lucernarios en las parroquias - Acto simbólico parque Simón Bolívar (5:00 p.m.) Buenaventura: Catedral de San Buenaventura - Procesión, acto penitencial y eucaristía. (7:00 p.m.) Ipiales: Concentraciones y eucaristías en las parroquias. Congreso por la vida y la paz Pasto: Santo Rosario al parque (jueves 17 de octubre plaza de Nariño) y eucaristías Santuario Nuestra Señora de La Merced (5:00 p.m); procesión con la imagen de Nuestra Señora de La Merced (6:30 p.m.). Tumaco: Concentración en el Puente del Morro (30 de octubre)

Jue 10 Oct 2019

Aclaración de la CRC

La Conferencia de Religiosos de Colombia (CRC) ha emitido un comunicado informando sobre la comunidad de las Carmelitas Misioneras en este país. En el mismo comunicado se aclara que "la persona identificada durante estos días en los medios de comunicación como "misionera carmelita", no es miembro de la Congregación de Carmelitas Misioneras y nunca lo ha sido". [icon class='fa fa-download' link='']VER COMUNICADO COMPLETO[/icon]

Mié 9 Oct 2019

Conozca la acción social de la Iglesia Católica en la región nororiental

En un esfuerzo por articular la acción pastoral y evangelizadora de la Iglesia en el nororiente colombiano, el periódico diocesano La Verdad, de Cúcuta, presentó, en su edición número 849, un especial sobre el servicio y acompañamiento de la Iglesia Católica a las comunidades de la zona. Acompañamiento comunitario, formación en la fe, pastoral, cuidado de la Casa Común, defensa de la vida y promoción de la dignidad humana, son algunas de los aspectos destacados en la publicación que revela cómo, desde la Doctrina Social de la Iglesia, la Arquidiócesis de Nueva Pamplona, las Diócesis de Cúcuta, Ocaña, Arauca y Tibú, mitigan la crisis que afecta al nororiente colombiano. Los pastores de estas Iglesias Particulares: Mons. Víctor Ochoa (Obispo de Cúcuta); Mons. Jaime Cristóbal Abril (Administrador diocesano de Pamplona); Mons. Gabriel Villa Vahos (Obispo de Ocaña); pbro. José María Bolívar (Administrador diocesano de Arauca) y Mons. Omar Sánchez (Obispo de Tibú), junto a sus respectivas Pastorales Sociales, colaboraron atentamente con el contenido de esta edición especial. Descargue edición 849 Fuente: Centro de Comunicaciones Diócesis de Cúcuta

Lun 7 Oct 2019

Iglesia facilita diálogo entre excombatientes y líderes del Urabá

En el marco de la novena sesión del diplomado en memoria para la construcción de una cultura de reconciliación y paz, que desarrolla la Comisión de Conciliación Nacional (CCN) con miembros de la comunidad en el municipio de Apartadó (Antioquia), los participantes, acompañados del equipo facilitador, visitaron el Punto de Agrupamiento de San José de León, ubicado en el municipio de Mutatá. Se trata de un lugar habitado por personas en proceso de reincorporación a la vida civil que, junto a sus familias, le apuestan a una nueva vida y desarrollan diferentes proyectos productivos de forma asociativa. Dicho espacio de encuentro, desarrollado el 3 de octubre, posibilitó la sensibilización y el establecimiento de un diálogo horizontal sobre de temas como reconciliación, memoria histórica y los retos locales de la implementación del Acuerdo de Paz, tópicos que se han venido abordando de forma reflexiva y conceptual con los agentes comunitarios durante el diplomado en lo corrido del año. Este proceso también ha sido posible gracias al apoyo de la Diócesis de Apartadó y el Programa de Desarrollo y Paz de Córdoba y Urabá (Cordupaz). De acuerdo con Rogence Veloza, psicólogo de la CCN encargado de coordinar el trabajo que se adelanta en la actualidad con los grupos de esa región (Apartadó y Unguía), esta actividad sirvió para hacer posible “un encuentro humano entre excombatientes que están comprometidos con el cumplimiento de los acuerdos y líderes, lideresas sociales y agentes de pastoral de la región de Urabá que, desde otra orilla, le trabajan a una misma causa: la construcción de paz territorial.” Esta acción hace parte de una serie de estrategias de pedagogía social apoyadas por la Embajada de Alemania y diferentes diócesis del país, a través de las cuales la Comisión de Conciliación, atendiendo al llamado del Papa Francisco, busca seguir incentivando la cultura del encuentro en las regiones, donde se pueda construir a partir del diálogo, del encuentro con el otro y del compartir; espacios en los que las personas identifican diferencias constructivas pero también puntos de unión, convergencia y reconocimiento mutuo que les permite avanzar en la reconstrucción del tejido social que se ha roto durante el conflicto armado que ha vivido el país.

Vie 4 Oct 2019

Representando una persona en situación de calle, obispo insiste en respetar la dignidad humana

Con la complicidad de un equipo de personas de su confianza, el obispo de Armenia, monseñor Carlos Arturo Quintero Gómez, tomó la apariencia de habitante en situación de calle para realizar un “experimento social”, como él mismo lo llamó. Monseñor Quintero Gómez, era el encargado de abrir el primer Congreso de Pastoral Diocesana, que se desarrollaba en esta ciudad, con la ponencia: "Doctrina Social de la Iglesia desde el Papa San Juan Pablo II hasta el Papa Francisco", pero quiso realizar un ejercicio para registrar la reacción de los asistentes al ver un habitante en situación de calle, dentro del auditorio. El prelado llegó a la asamblea representado como el obispo de Armenia, saludo amablemente a las personas que encontraba a su paso, luego salió sigilosamente para dar inicio a la transformación de su papel como habitante en situación de calle, una vez personificado, interactuó con los presentes que se encontraban en el auditorio. La reacción por parte de algunos fue de indiferencia, otros lo evitaban o lo miraban con cierto temor, al fingir una caída ninguno de los participantes le prestó ayuda. Así mismo, una cámara escondida ubicada en el auditorio, mostró como algunos de los organizadores se mostraron prevenidos frente al personaje que visitaba de incognito el auditorio, señalando: "Hay que estar pendientes, pero no lo saquemos (...) debe estar pidiendo", susurraban en voz baja. Una vez finalizado el ejercicio el obispo explicó el significado de esta acción, señalando que más allá de ser un experimento social, fue más “un homenaje a tantos hermanos nuestros que viven en la calle”. Igualmente, recordó el mensaje del Papa Francisco en la Carta Encíclica «Laudato si» donde señala que se debe escuchar tanto el clamor de la tierra como el clamor los pobres”. “Con este experimento social deseaba mirar la reacción y actitud de las personas cuando ven un habitante en situación de calle, sobre todo en el contexto de un congreso de Pastoral Social (…) Cuando uno vive este tipo de experiencias como ahora, tratando de personificar a un habitante de calle, el corazón se ablanda”, afirmó el prelado. Además, -continuó – “Yo pienso que este homenaje implica la búsqueda de una sensibilización en la sociedad, despertando el sentido de solidaridad y superando todo asomo de indiferencia e intolerancia frente al habitante en situación de calle”. Finalmente, en su ponencia destacó la importancia de respetar la dignidad de la persona humana, cualquiera que fuere su condición, pidiendo de manera especial por todas aquellas personas que viven esta dura realidad.

Jue 3 Oct 2019

Grupo de Cáritas Internationalis socializa en Cúcuta la crisis venezolana

Desde el 30 de septiembre hasta el de 2 de octubre, se reunió en Cúcuta el grupo de trabajo conformado por Cáritas de Europa y Latinoamérica, encargado de dar respuesta solidaria a la crisis venezolana. Durante la primera jornada se presentó una resonancia de la realidad de los venezolanos en la frontera y se socializó la atención que ha prestado América Latina. Los Obispos de Cúcuta, Monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, y de San Cristóbal (Venezuela), Monseñor Mario del Valle Moronta, revelaron un análisis de la crisis desde el inicio y destacaron las obras que adelantan sus respectivas Diócesis para mitigar las problemáticas que se desencadenan de la masiva migración. También se analizó la respuesta solidaria de Perú, Brasil y Ecuador, cuyos representantes realizaron una ponencia desde su perspectiva nacional y, por último, se hizo un resumen de lo acordado en la reunión “Encuentro/Taller Inter-fronteras Pro Venezuela”, que habían tenido anteriormente en la ciudad de Bogotá en el mes de abril, para evaluar qué acciones se han cumplido. En el hotel Casablanca de Cúcuta, cumplieron su agenda la directora humanitaria de Cáritas Internationalis, el referente regional en el Secretariado General, la representante de Catholic Relief Services (CRS – Servicios de Auxilio Católico), el coordinador regional del Secretariado Latinoamericano y del Caribe de Cáritas (SELACC), los representantes de: Cáritas Brasil y Cáritas Venezuela, además de los representantes de las pastorales sociales: Cáritas Chile, Cáritas Colombiana, Cáritas Ecuador y Cáritas Perú; asimismo, dos representantes de la comunidad Hermanas Scalabrinianas en Ecuador. El padre Enán Humánez, subdirector del Secretariado Nacional de Pastoral Social – Cáritas Colombiana (SNPS/CC), contextualizó la situación migratoria en Colombia, explicando que aunque el país ha sido un sitio de acogida, también tiene problemas de inestabilidad económica, desastres naturales, corrupción y crisis en la democracia de otros países de la región que también afectan el propio. De esta manera, afirma que el Secretariado Nacional de Pastoral Social propone construir un “Sistema de Política Migratoria Integral con enfoque en Derechos Humanos y de construcción de paz”. Por su parte, el Obispo de Cúcuta confirmó la necesidad de repensar las políticas migratorias “desde una visión humana y de desarrollo integral”. La Iglesia católica en Colombia es consciente de la creciente cultura del descarte y la cosificación; la pauperización e indigencia de migrantes; la naturalización de la discriminación; xenofobia y racismo; y los riesgos en salud pública. También se evaluó la creación de estrategias conjuntas para seguir apoyando a la población migrante vulnerable. Una de ellas es el funcionamiento de un banco de medicamentos para atender la población colombo-venezolana. Monseñor Mario Moronta especificó que no sólo necesitan alimentos en su país, sino medicina, por lo que se habilitará este sitio en San Antonio del Táchira (Venezuela). “Incluso este servicio estará disponible hasta para los mismos colombianos que lo requieran, no vamos a tener ninguna limitación ni tampoco ninguna exclusión”, afirmó Monseñor Moronta. Estos medicamentos serán donaciones que recoge la Iglesia Católica, a través de Caritas de Venezuela, y serán apoyados por Cáritas Colombiana. En este grupo de trabajo se conoció la realidad social y política que se vive en el interior de Venezuela y la crisis humanitaria que ha desatado en distintos países; así como los proyectos que ha desplegado la Iglesia católica en estas regiones, para atender humanitariamente a la población vulnerable migrante, protegiendo los derechos humanos y afianzando la cultura que propone el Papa Francisco de acoger, proteger, promover e integrar al migrante y el refugiado. El primero de octubre, presentaron sus desafíos, logros y programas, Cáritas Alemania, Cáritas Francia, CRS, Cáritas Suiza (Luxemburgo), CORDAID (Organización Católica para la Ayuda de Ayuda y Desarrollo) y Cáritas España, además plantearon establecer más alianzas para seguir realizando acciones concretas en favor de la población vulnerable venezolana que ha emigrado. En el último día del encuentro de Cáritas Internationalis, los visitantes se trasladaron al corregimiento La Parada, Villa del Rosario, con el objetivo de palpar la realidad migratoria, conociendo este paso fronterizo y la cantidad del flujo peatonal. En la Casa de Paso ‘Divina Providencia’, compartieron con los migrantes venezolanos y colombianos retornados que allí reciben atención humanitaria por parte de la Diócesis de Cúcuta. Se celebró la Sagrada Eucaristía y participaron como voluntarios, sirviendo los alimentos. Fuente: Oficina de comunicaciones Diócesis de Cúcuta

Jue 3 Oct 2019

Misioneras Lauritas con rostro indígena y ahora con rostro amazónico

Donde están los indígenas, están las hermanas Lauritas. Bajo este carisma es conocida la Congregación de las Misioneras de María Inmaculada y de Santa Catalina de Siena, que se insertó hace 105 años en la selva de la mano de Laura Montoya, su fundadora y quien actualmente ostenta el título de ser la primera santa colombiana. Por esta misma razón desde este 6 de octubre ocuparán un sitial en el Sínodo de la Amazonía. Vida Nueva ha conversado con la religiosa Inés Zambrano, coordinadora general de la congregación, para conocer los aportes de las misioneras en el marco de este evento sinodal que partirá en dos la historia del trabajo pastoral y el modo de ser Iglesia tanto de la vida consagrada, laicos y comunidades amazónicas. De algo sí está segura: “No defraudemos a los indígenas y que respondamos a su realidad a sus sueños y a sus proyectos”. En el corazón de la selva “Nacimos en la selva hace 105 años y desde entonces ya hemos estado involucradas en esta dinámica del sínodo”, relata la hermana Zambrano, quien también ha asegurado que en el camino presinodal las hermanas se han involucrado plenamente desde sus jurisdicciones eclesiásticas. Inclusive “desde el último capítulo general asumieron el compromiso de orar, acompañar y comprometernos en consonancia con lo que el Sínodo está proponiendo, en especial, con los pueblos amenazados en su espiritualidad, en sus valores y en sus territorios” como por supuesto también con “el cuidado de la casa común”. “Les he pedido que como hermanas Lauritas tuviéramos algo desde nuestro carisma para llevar a Roma y con eso ya contamos”, añade. Ratificar su carisma Para la coordinadora general de las Lauritas el primer aporte de la congregación “es desde la vida, experiencia y del compromiso” que desde su fundación han tenido con todos los pueblos originarios sean andinos, amazónicos o costeños. Además esta oportunidad de representar a su congregación en el Sínodo de la Amazonía es “una gran bendición”. Por ello su rol en el Sínodo la ha asumido como “una ratificación de nuestro carisma, ahora cuando están en un proceso de reestructuración y este espacio del sínodo es como ratificar estas búsquedas que tenemos como congregación, estamos juntos, como iglesia, buscando respuestas a los pueblos amazónicos y como Lauritas buscamos una vida consagrada con rostro indígena y ahora también con rostro amazónico”, ha acotado. “No sé si hable de diaconado” En cuanto al rol de las mujeres en un periodo postsinodal se siente esperanzada, porque todo este proceso es “como ratificar el compromiso de la mujer, ya que no es una novedad el aporte que hemos venido haciendo desde hace siglos dentro de los territorios”. En este sentido puntualiza que “tenemos abuelas desde su sabiduría, catequistas, dirigentes en las comunidades. Ya hay un compromiso en las comunidades por parte de las mujeres, tan solo con esto [del Sínodo] es un trámite para reconocernos oficialmente”. “No sé si hable de diaconado, de eso no tengo certeza, pero pienso que a nivel del pueblo indígena hay muchos ministerios y eso de pronto para la Iglesia es lo que no conoce, conoce solo lo que está dentro de la estructura eclesiástica, pero hay muchos roles de la mujer en la vida de la de las comunidades”, ha dicho. Fuente información y foto: Portal virtual Vida Nueva

Mié 2 Oct 2019

A propósito de los niños del basurero, Iglesia de Puerto Carreño se pronuncia

El Vicario Apostólico de Puerto Carreño, Monseñor Francisco Ceballos Escobar, se refirió al drama que están viviendo las comunidades indígenas del Vichada, de manera especial la comunidad indígena Amorúa que sobrevive comiendo lo que encuentran en el vertedero de basura de este municipio. “Esto es solo una pequeña muestra de lo que está pasando con los indígenas en el departamento del Vichada, a quienes sólo se les tiene en cuenta en tiempo de elecciones. Los ilusionan con miles de promesas, los llevan a votar, les compran el voto por algunas bagatelas, y, después, los abandonan a su propia suerte”, expresó el prelado. Monseñor Ceballos Escobar denunció que los derechos fundamentales de esta población son violados constantemente y esto es conocido por las instituciones de esta zona del país, sin que nada se haga al respecto. “Ha habido alertas tempranas por parte de la defensoría y la personería, pero no hay respuesta para solucionar el problema. Me pregunto: qué está haciendo el ICBF ante las niñas y niños desescolarizados, los drogadictos que deambulan por las calles, los niños del basurero, etc. A decir verdad, muy poco. Con seguridad hay programas de atención, pero la realidad supera a las acciones paliativas que se realizan”, aseveró. Por su parte, recordó que la Iglesia siempre ha estado presente acompañando no solamente a las comunidades indígenas, sino también ofreciendo atención a la población migrante. “Estamos nutriendo a más de 250 niñas y niños en los tres comedores con que cuenta el Vicariato. Gracias a la Providencia de Dios, a la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, a la Pastoral Social, quienes con generosidad dan desde su pobreza, en tiempo, dinero o especie para mantener estas obras. Del gobierno no hemos recibido un peso”. El jerarca calificó esta situación como vergonzosa y expresó que “como Iglesia, queremos trabajar con más fuerza en favor de las niñas y niños con el fin de mitigar la prostitución, el alcoholismo, la drogadicción, el maltrato, el hambre, el analfabetismo, y un sin número de aspectos que ensombrecen la dignidad humana, pero es necesario que nos unamos como sociedad para extirpar los tumores que desdicen de nuestra condición de seres humanos”. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon]