Pasar al contenido principal

covid

Mar 1 Feb 2022

Primer aniversario de la pascua del padre Constantino Gutiérrez

A un año de la pascua de nuestro hermano en el Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano (SPEC), padre Constantino Gutiérrez, MXY, (n. 9 dic. 1956 – +7 febrero 2021), responsable del área de ETNIAS del Centro Pastoral de Animación Misionera y director del Instituto Misionero de Antropología –IMA- durante los últimos 11 años, desde la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) elevamos al Señor nuestra oración por su eterno descanso. El padre Constantino falleció el 7 de febrero de 2021, después de una lucha intensiva, en los últimos 20 días de su vida, por vencer las consecuencias de su afectación con el virus COVID 19, en una UCI en la ciudad de Medellín. Junto al padre Constantino hacemos memoria, además, de la señora Estela Restrepo, su secretaria en el IMA, fallecida 5 días después. El padre Constantino se distinguió por su profundo amor e incansable trabajo apostólico por las diversas étnias minoritarias de nuestro país, trabajo que realizó desde el área de ETNIAS de la CEC, en coordinación con la Comisión Episcopal de Misiones. Desde ETNIAS el padre Constantino lideró proyectos para apoyar el trabajo apostólico de diócesis del país con Indígenas, Comunidades Negras (Afros, Palenqueros y Raizales), así como de pueblos Rromi (gitanos) dispersos en varias regiones, especialmente en Boyacá, Cundinamarca y Antioquia. Una prolongación de su trabajo en ETNIAS fue la dirección del IMA, instituto de la Conferencia Episcopal, que tiene como objetivo central apoyar la educación superior de personal de las diversas étnias minoritarias del país. Desde el año de 1989 el IMA realiza su objetivo a través del convenio con la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín, avalado por el Ministerio de Educación Nacional. Estos estudios en ETNOEDUCACIÒN están orientados al conocimiento adecuado de los pueblos, culturas y religiones, a cuyo servicio trabajan los estudiantes, líderes de las étnias y misioneros/as, que viven en sus regiones. El padre Constantino realizó una encomiable labor en el IMA, implementando diversos programas educativos de licenciatura en etno-educación, Especialización en Gestión Humana y Maestría en Administración pública. A través de estos programas, más de 5.000 miembros de estas étnias están en la actualidad prestando sus servicios profesionales en sus lugares de origen. A un año de su partida, desde la CEC, nos unimos a su familia, al Instituto de Misiones Extranjeras de Yarumal, Congregación a la que pertenecía, y a la familia IMA que deploran su ausencia. Desde la Casa de nuestro buen Padre Dios, el padre Constantino y Estelita nos siguen animando en nuestra caminada sinodal con nuestros hermanos y hermanas de la diversidad de étnias minoritarias de Colombia. GRACIAS PADRE CONSTANTINO. Padre Omer Giraldo,MXY Área de ETNIAS, Centro Pastoral de Animación Misionera - CEC

Mar 13 Jul 2021

La prudencia hace verdaderos sabios

Por: Mons. Luis Fernando Rodríguez Velásquez Seguimos inmersos en un tiempo difícil para la sociedad y la Iglesia. La pandemia sigue arreciando dejando a su paso muertes y enfermos en número creciente. Por otra parte, hemos vivido también un periodo de tiempo plagado de incertidumbre, peticiones y de sueños por el paro nacional que, igualmente, trajo consigo en algunos lugares, dolor, muerte y destrucción. En ambos casos se hace común la palabra crisis. Crisis por el covid-19, crisis por el paro, las marchas y los bloqueos. Esto me lleva a pensar que desde la fe, estamos llamados a dar a la crisis el significado que lleva también implícito y es el de la oportunidad. Toda crisis implica un movimiento, un desacomodamiento. Me viene a la mente el bebé a punto de nacer. Nadie le ayuda. Acomodado como estaba a los nueve meses en el vientre materno, entra en crisis porque le llega la hora de nacer. Comienza su movimiento. Siente dolor, al igual que su madre, que como bien dice el texto evangélico, “cuando va a dar a luz está triste, porque le ha llegado su hora; pero cuando ha dado a luz al niño, ya no se acuerda del aprieto por el gozo de que ha nacido un hombre en el mundo” (Juan 16, 21). Es el caso igual del pollito, que para salir del huevo, debe él mismo romper el cascarón. Escribo esto porque estas crisis desde la fe, son una oportunidad sin igual para varias cosas, que a manera de tips planteo. Estas crisis nos servirán: Para revisar nuestra vida y descubrir lo vulnerables que somos. Para identificar lo bueno que hemos hecho, el bien que dejamos de hacer y el mal que hemos hecho o no hemos evitado. Para medir nuestra fe en Dios, en los demás y en sí mismos. Para ser creativos y buscar juntos las acciones que debemos y podemos realizar para superar las crisis y encontrar soluciones efectivas a los problemas reales que nos agobian. Para mirar el futuro con optimismo. No se puede dejar que el pesimismo y las malas energías sean las que dominen. El Señor está con nosotros, y más en estos momentos de prueba. Para incrementar la globalización de la caridad y de la solidaridad. Para volver la mirada al Dios de la vida que repite una vez más sus palabras: ¡no tengan miedo! Para ratificar que la auténtica crisis lleva a la vida y no a la muerte. Así como el niño y el pollito y toda criatura que vive superaron la crisis del parto, así nosotros vamos a superar las crisis del covid-19 y del paro nacional con sus secuelas. Es la crisis la que nos tiene que llevar a salir mejores. Pero tenemos que ser prudentes con el auto cuidado que exige el covid-19 esparcido por todas partes, y para discernir los acontecimientos que hemos vivido con el paro nacional. Hacer este ejercicio con prudencia, nos permitirá llegar lejos. + Luis Fernando Rodríguez Velásquez Obispo auxiliar de Cali

Mar 15 Jun 2021

“Semana Arquidiocesana” en Cali

A partir del 13 y hasta el 20 de junio, la Arquidiócesis de Cali celebrará la “Semana Arquidiocesana”, centrada en el compromiso con los enfermos y en la pastoral de la salud humana. Esta celebración se vivirá en un momento coyuntural generado, no solo por la pandemia de la Covid-19, sino además por la crisis de conflicto social que atraviesa, entre otras regiones, esta zona del país. La “Semana Arquidiocesana” es una celebración que se realiza desde hace siete años, y este será en el marco de la conmemoración del aniversario número 111 de la Arquidiócesis de Cali. Durante estos días se honra también a la Virgen de los Remedios como protectora y patrona de esta Iglesia particular y del Valle del Cauca. A partir de este objetivo, a lo largo de esta semana se realizará una serie de eventos orientados a la intervención comunitaria y de la salud de las comunidades más vulnerables. Para ayudar a encaminar esta jornada, el arzobispo de Cali, monseñor Darío de Jesús Monsalve, ha querido ofrecer una reflexión, que contextualiza la realidad del tiempo de crisis que está viviendo la ciudad “sultana” y todo el Valle del Cauca, en materia social, política y económica. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon]

Vie 11 Jun 2021

Asistencia en salud, agua, saneamiento e higiene a familias venezolanas

Desde el 2015, Venezuela viene enfrentando una crisis económica, social y política debido a varios factores que han desencadenado un desplazamiento masivo de ciudadanos venezolanos durante los últimos años. Según Migración Colombia, hasta el 31 de enero de 2021, en el país se encontraban 1.742.927 migrantes venezolanos, de los cuales 759.584 se encuentra en condición regular y 983.343 en condición irregular. El ambiente en el que vive gran parte de la población migrante en Colombia es lamentable, esta situación está catalogada a nivel mundial como crisis humanitaria. Además de la falta de acceso a ofertas de empleo, a la vivienda digna y a la alimentación básica; se suman las dificultades para acceder a la atención en salud y a elementos de higiene básicos, aspectos que han acentuado la crisis migratoria por la que están atravesando. La situación en Colombia Aunque varios departamentos del país cuentan con una presencia significativa de migrantes venezolanos, las zonas fronterizas de Arauca, Vichada y Nariño (frontera con Ecuador), llaman especialmente la atención, ya que, a diferencia de otros territorios nacionales, por décadas estas regiones han tenido que padecer un sin número de desafíos económicos estructurales, desastres naturales y conflictos violentos. Migración Colombia reporta que, hasta el 31 de enero de este año, 44.851 migrantes se encontraban en Arauca, 14.523 en el departamento de Nariño, seguido de Vichada con 4.555. Por lo cual, estas zonas se enfrentan a mayor presión sobre sus recursos y servicios limitados al intentar cubrir las necesidades de la población migrante con intención de permanencia, población en tránsito, colombianos retornados y otras comunidades en situación de vulnerabilidad. La situación es aún más problemática en estos momentos de emergencia sanitaria por COVID -19, agravante de la salud pública a nivel mundial. Según la información recolectada en la línea de base del proyecto Asistencia en Salud y WASH a Familias Afectadas por la Crisis Migratoria Venezolana en Colombia, realizado por el Secretariado Nacional de Pastoral Social-Cáritas Colombiana (SNPS-CC), se entrevistaron a 210 familias (766 personas) de estas tres regiones del país y se evidenció que la población migrante enfrenta grandes barreras en de acceso a salud, agua, higiene y saneamiento básico, aspectos que impiden que mejore su calidad de vida y digna expuestos a riesgos que atentan contra su salud física y emocional. Barreras para los migrantes y refugiados Atención en salud El acceso a un sistema de salud que pueda satisfacer las necesidades básicas de migrantes y refugiados, es un derecho que está tipificado en diferentes constituciones a nivel mundial y en todos los convenios internacionales de protección a la población migrante. Colombia no es ajena a este tipo de reglamentaciones, pues como Estado perteneciente al DIH tiene como obligación velar para que este derecho se cumpla a cabalidad. Sin embargo, dentro de la información suministrada por el SNPS-CC, se encontró que el 78% (163) de las familias encuestadas en los tres territorios, mencionó haberse encontrado con barreras para la atención en salud, de las cuales el 53% (113) reconoció que fue por falta de documentación, el 39% (81) por falta de dinero y el 27% (56) por falta de acceso a transporte. Los datos revelan que, en Arauca (39) y Nariño (47) la dificultad con mayor incidencia es el dinero, esto es asociado a la distancia a los centros de atención desde las comunidades, mientras que en Vichada identificaron la documentación como barrera principal (43), ya que, el sistema de salud colombiano solo permite una atención a los migrantes indocumentados por urgencias. Por último, cabe resaltar que el 73% (154) de las familias encuestadas comentó no estar afiliada al sistema de salud colombiano, el 21% (45) tiene uno o varios familiares afiliados, y sólo el 5% (11) registro estar todo el grupo familiar dentro del sistema de salud. Salud ambiental, higiene y saneamiento básico. Si bien el acceso a salud es una limitante para la población migrante, esta se podría evitar si no padecieran de distintos tipos de enfermedades que, en su gran mayoría, dependen de sus condiciones de habitabilidad, pues un alto porcentaje de familias venezolanas no cuentan con acceso a agua potable para consumo humano, con un servicio de recolección de basuras por parte de empresas públicas y desconocen que un mal manejo de residuos sólidos puede provocar la proliferación de vectores que transmiten enfermedades e infecciones a la población. El 32% (68) mencionó haberse encontrado enfermo por dolor de estómago y diarrea, y el 2% (4) haber contraído enfermedades transmitidas por vectores, como chikungunya, zika, malaria, entre otros. El 47% (99) de las familias encuestadas reportaron no tener acceso a agua las 24 horas del día los 7 días de la semana, de estos el 70% (69) reportó consumir agua del grifo y el 30% (30) comentó extraerla de pozos profundos. Es cierto, que el panorama para los más de 60.000 migrantes venezolanos que se encuentran en estas tres regiones del país es desolador, también es cierto que desde diferentes organizaciones e instituciones se está trabajando en conjunto para romper esas barreras que les impide tener una mejor calidad de vida. Acciones solidarias y trabajo en equipo para una mejor calidad de vida Teniendo en cuenta esta realidad, desde febrero de 2019 la Iglesia Católica en Colombia a través del SNPS-CC en conjunto con la Oficina de Asistencia para Desastres en el Extranjero USAID/OFDA, inició la implementación de un programa propuesto en dos fases de intervención. Durante la primera Fase se atendieron a más de 12,000 migrantes venezolanos en 4 departamentos del país con asistencia en salud, dinero en efectivo y agua, saneamiento e higiene (WASH). Ahora, el proyecto Asistencia en salud y agua, saneamiento e higiene a familias afectadas por la crisis migratoria venezolana en Colombia en su segunda fase y en apoyo con la agencia BHA/USAID, tiene como objetivo, al finalizar el mes de agosto de 2021, llegar a más de 10.500 personas, facilitando el acceso a servicios de salud y mejorando las prácticas de higiene de la población migrante venezolana, colombianos en situación de vulnerabilidad y las comunidades de acogida. Acciones como la remisión a servicios médicos mediante la gestión de casos y vías de remisión eficaces, entregas de subsidios de transporte para el traslado a los centros médicos, campañas de salud ambiental y talleres en promoción de la higiene donde se sensibiliza a la población sobre las consecuencias del mal manejo de las basuras y su adecuada gestión, reciclando, reutilizando y reduciendo, son algunas de las acciones que ya se están implementado en estos tres departamentos. Se debe seguir trabajando para romper barreras A la falta de acceso a un sistema de salud y de un ambiente de habitabilidad digno que pueda evitar la generación de enfermedades, hay que sumarle que la población venezolana se enfrenta a otras problemáticas como explotación sexual, explotación laboral, convivencia familiar, desescolarización, regularización, entre otras, información arrojada por el estudio en terreno realizado por el SNPS-CC. Por esta razón, la Iglesia Católica colombiana seguirá uniendo esfuerzos en pro de darle continuidad a las acciones humanitarias que contribuyan al mejoramiento de la calidad de vida de la población migrante que se encuentra en el territorio nacional, pues vivir en condiciones dignas en otro país es un derecho que por inherencia les pertenece. Finalmente, el SNPS-CC invita a todas las instituciones, organizaciones y entidades locales, gubernamentales, nacionales e internacionales, a continuar trabajando no sólo por los migrantes y refugiados, sino por la población colombiana en condición en vulnerabilidad, para romper esas barreras que les impiden gozar de un ambiente de vida dingo e igualitario.

Mié 9 Jun 2021

El Vaticano promueve charlas para personal sanitario y agentes de la salud

Ante la emergencia sanitaria provocada por la pandemia de la Covid-19, el personal sanitario y los agentes de la salud siempre han estado comprometidos en salvaguardar la vida de las personas. Esto, ha llevado a que muchos de ellos vivan niveles de estrés altos, afectando, en muchos casos su estado de salud físico y mental. En este contexto y en atención a este público, el Dicasterio para el servicio del Desarrollo Humano Integral del Vaticano está desarrollando por estos días videoconferencias sobre el tema de la salud, inspirados en las Encíclicas Laudato Si' y Fratelli tutti. "Las videoconferencias ayudarán a los participantes a comprender el impacto de la pandemia sobre el personal sanitario y todos los que forman parte de redes de atención y apoyo. Escucharemos testimonios, compartiremos experiencias e intentaremos responder una pregunta importante: ¿Cómo podemos acompañar a los agentes sanitarios y pastorales implicados en la primera línea de la pandemia?", señalan sus organizadores. Para este jueves 10 de junio, de las 16:00 a 18:20 horas (hora italiana), 9:00 a.m. a 11:20 a.m. (hora colombiana), corresponde la sesión de AMÉRICA LATINA, donde el cardenal Peter K. Turkson, prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral de la Santa Sede, tendrá a su cargo la apertura de la videoconferencia. Expertos conferencistas serán los encargados de abordar temas como: "Experiencia, necesidades y desafíos durante y después de la pandemia de Covid-19"; "Acompañamiento y ayuda al personal sanitario durante y después de la pandemia"; "La presencia cristiana junto a la fragilidad humana en el tiempo de la pandemia"; y "Una ética para los tiempos de la pandemia junto a los profesionales de la asistencia sanitaria". El público, en atención a esta emergencia sanitaria, entre ellos personal sanitario y los agentes de la salud interesados en participar, lo podrán hacer ingresando al siguiente link [icon class='fa fa-download fa-2x'] AQUÍ[/icon]- Webinar ID: 817 8544 4877 /Passcode: 300686

Mar 1 Jun 2021

“Es necesario atender las demandas legítimas, pero a través del diálogo": Mons. Álvarez

En una entrevista concedida a Vatican News, monseñor Elkin Fernando Álvarez Botero, obispo de Santa Rosa de Osos y secretaro general de la Conferencia Episcopal, habló sobre algunos aspectos que preocupan hoy a Colombia en materia económico y social. Igualmente, insistió que se debe atender el llamado que el Papa Francisco ha hecho para enfrentar esta crisis a través de la oración y el diálogo. A continuación los invitamos a leer la entrevista completa a monseñor Elkin Fernando Álvarez Botero. “Es necesario atender a las demandas legítimas que se han presentado en las manifestaciones, pero la vía siempre será la del diálogo, la del encuentro, la de la capacidad de poder comprenderse, escucharse realmente y atender a las problemáticas que estamos viviendo”: lo reitera y lo subraya Mons. Elkin Fernando Álvarez Botero, secretario general de la Conferencia Episcopal Colombiana y obispo de Santa Rosa de Osos, entrevistado por Vatican News, a más de un mes de inicio de las manifestaciones que han provocado diversos muertos y daños a bienes en el país latinoamericano. La situación sigue tensa, no ha habido un acuerdo en la mesa de negociaciones que se abrió entre el gobierno y la Comisión de Paro y los sectores sociales que están manteniendo las manifestaciones y las protestas en las calles. El prelado explica el escenario actual ante nuestros micrófonos: R.- Las manifestaciones comenzaron el 28 de abril y desde ese momento no han cesado, se dan casi diariamente en diversas ciudades. Particularmente se han vivido procesos en el Valle del Cauca, en Cali, en Cauca, en Popayán, pero también en el centro de la capital, en Bogotá, en Medellín y otras grandes ciudades. En general ha habido manifestaciones a lo largo y ancho del país. El motivo inicial era una protesta por una pretendida reforma tributaria, que luego fue retirada, y, pues, ha continuado este proceso de manifestaciones reclamando reconocimientos para sectores sociales que han sido tradicionalmente desatendidos u olvidados, y que están alzando su voz de protesta en torno a estos derechos. Las manifestaciones que se han dado, a pesar de los llamados continuos a que sean protestas pacíficas, en algunos sitios han terminado en disturbios y en daños a los bienes públicos. También ha habido enfrentamientos entre los miembros de la policía y algunos manifestantes. El panorama social sigue siendo muy complejo, se ha procurado por todos los medios de avanzar en un diálogo, que aborde los temas fundamentales que están en los reclamos de los manifestantes. Hasta ahora se ha logrado mantener la mesa de diálogo, pero todavía no comienzan propiamente las negociaciones, y se sigue intentando esta vía del diálogo. La Iglesia Católica hace parte de un equipo garante de las conversaciones, y trata de mantener, sobre todo, una disposición para que se llegue a acuerdos. Este es a grandes trazos el panorama que estamos viviendo. Mons. Álvarez, el domingo también hubo una marcha para rechazar la violencia y el bloqueo como una forma de acción política, una manifestación que ha sido rechazada por muchas personas. En este clima de tensión social que se vive, que ha procurado muchísimas muertes, ustedes ratifican el diálogo como camino, algo que también hicieron la ONU y la Unión Europea el sábado pasado.¿Cree que haya una plena comprensión de la importancia de este camino de diálogo, de que se trabaje en él? Y, ¿qué es lo que está en juego para los colombianos? R.- El domingo pasado efectivamente se han producido también estas marchas que han sido llamadas "del silencio", especialmente, abriendo un espacio para que las manifestaciones no terminen en violencia, y para que se respeten los Derechos Humanos de todos, también de quienes se han visto afectados por las manifestaciones que han impedido que lleguen insumos o abastecimientos a ciudades. Esta es, digamos, como una contraparte de estos procesos que se han vivido últimamente. La Iglesia Católica junto con la ONU, garantes en los diálogos, insisten en la necesidad del diálogo. De parte de la Conferencia Episcopal hemos reiterado el llamado del Papa Francisco en Fratelli tutti, que dice que, frente a estas problemáticas sociales, entre la indiferencia egoísta y la reacción violenta o la protesta violenta siempre hay una posibilidad, que es el diálogo. También hemos insistido en que en este diálogo está cifrada la esperanza de poder encontrar puntos de contacto que nos lleven a la reconciliación y al compromiso con la paz. Es necesario atender a las demandas legítimas que se han presentado en las manifestaciones, pero la vía siempre será la del diálogo, la del encuentro, la de la capacidad de poder comprenderse, escucharse realmente y atender a las problemáticas que estamos viviendo. R.- La conciencia de que éste es el camino creo que va entrando en la dinámica social, y esperamos que realmente se pueda avanzar por la vía del diálogo transformador para dar curso a las reformas y los cambios que son necesarios. A propósito de reformas, de cambios, con el pensamiento en que muchas de las problemáticas de las protestas que se dan es justamente porque tocan la parte económica ¿no? Hay que repensar la economía de hoy para "dar un alma a la economía del mañana" dice el Papa Francisco... ¿Cuán importante es que se escuche esta insistencia del Santo Padre en la Colombia de hoy? R.- En un mensaje de la Conferencia Episcopal a los inicios de estas manifestaciones cuando estaba toda la reflexión, y con ella también la protesta por la reforma tributaria, justamente transmitimos ese mensaje del Papa: "hay que ponerle alma a la economía de hoy" y junto con ello los principios de la Doctrina Social de la Iglesia, que deben guiar la economía especialmente pensando en el bien común, en la posibilidad de que todos tengan acceso a los bienes, a las riquezas, en cortar la brecha y la inequidad tan grande que experimentamos desde hace mucho tiempo en nuestro país. Es cierto que todos los problemas que están detrás de estas protestas no son de orden económico, pero sí tocan fuertemente la economía. Es muy importante escuchar este llamado del Papa porque es lo que fundamenta, justamente, que se pueda emprender un camino de reconstrucción nacional, que realmente desde esta dimensión económica represente que el país puede ser casa y Patria para todos. Que todos tengan posibilidades, acceso a los servicios básicos, a lo que representan derechos y condiciones de vida digna para todos. ¿podrían estar en riesgo, en esta situación, en esta condición del país los pasos dados en el proceso de paz? R.- Pues, la implementación de estos acuerdos del 2016 en el proceso de paz con la guerrilla de las FARC va adelante. Ciertamente ha habido dificultades, hay reclamos de lado y lado por lo que se refiere a los alcances conseguidos, o a la implementación de lo que se había acordado. El camino de implementación de los acuerdos continúa, hay unos organismos en Colombia que tienen independencia y siguen trabajando en esto. La situación actual, nos pide ampliar las perspectivas y avanzar con mayor celeridad en la implementación de estos acuerdos inclusive buscando la paz con otros sectores, que es necesario hacerlo. Pienso que puede todavía experimentarse algún retraso o algún discernimiento extra, pero esperamos que el proceso de paz continúe, y que inclusive pueda afianzarse teniendo presente toda la situación que estamos viviendo. Cabe recordar que estas protestas se dan en el contexto de una pandemia, cuando Colombia registra ya 3 millones 383 mil, aproximadamente, de casos totales, con un promedio de 20/21 mil casos por día, más de 88 mil fallecimientos. Recordando también el llamamiento del Santo Padre en el domingo de Pentecostés, se hace también un llamado a la prudencia... R.- Sí. No podemos olvidar esta realidad, así con las cifras que usted ha mencionado, que son reales, es lo que nos reportan diariamente las autoridades sanitarias. Es necesario tener en cuenta a la población más afectada en este momento, que es la juvenil, las personas de entre 30 y 50 años. Tenemos una situación sanitaria crítica en las grandes ciudades del país, no hay disponibilidad de camas para los pacientes UCI, para los pacientes de Covid, así que es necesario tener en cuenta este factor. Sin duda ha habido una fuerte incidencia por las manifestaciones. Hemos llamado también a la prudencia, a tener en cuenta esta realidad, además del sufrimiento y el cansancio del personal médico que ya ha sido manifestado en diversos medios. Ojalá que se pueda concordar todo esto, respetando el derecho a la manifestación pacífica, que es necesario siempre reconocer y garantizar, pero teniendo en cuenta que estamos viviendo un panorama crítico con respecto a la pandemia, y que nos hace un llamado extra a cuidar la vida, la propia y la del prójimo. Fuente: Vatican News

Sáb 1 Mayo 2021

Falleció monseñor José Daniel Falla, obispo de Soacha

Con profundo dolor la Conferencia Episcopal de Colombia comunica el fallecimiento, en el día de hoy, de monseñor José Daniel Falla Robles, obispo de la Diócesis de Soacha, víctima del coronavirus. Con sentimientos de esperanza, los obispos de Colombia reciben la noticia, y a través del secretario general de la CEC, monseñor Elkin Fernando Álvarez Botero, expresan su cercanía y fraterna solidaridad a los sacerdotes, religiosos y files laicos de la Diócesis de Soacha, y también a los de las Arquidiócesis de Bogotá y Cali, y a quienes están vinculados a la Conferencia Episcopal de Colombia de la cual monseñor Falla fue secretario general. "Que el Señor conceda a nuestro hermano Obispo la corona de la gloria eterna, prometida a sus servidores. Oremos por él, por la intercesión de San José, patrono de la buena muerte, hoy en su fiesta. Unidos en la fe, la esperanza y la caridad", expresó el prelado. BIOGRAFÍA Monseñor José Daniel Falla Robles nació en Bogotá el 7 de octubre de 1956. Hizo sus estudios de primaria (1964-1968) y secundaria (1969-1974) en el Colegio Mayor Nuestra Señora del Rosario de Bogotá. Ingresó luego a la Universidad de los Andes en la cual cursó la carrera de Ingeniería Industrial. En el mismo centro obtuvo un Magister en Administración empresarial (1981-1982). Ingresó al Seminario Mayor San José de Bogotá en el año 1987, donde llevó a cabo los estudios de Filosofía (1987-1988) y de Teología (1989-1992). Recibió la ordenación sacerdotal, de manos del entonces arzobispo de Bogotá, cardenal Mario Revollo Bravo, el 28 de noviembre de 1992, incardinándose a la Arquidiócesis de Bogotá. Durante los años de ejercicio del ministerio sacerdotal ha desempeñado los siguientes cargos: - Miembro del Equipo de Formadores del Seminario Menor de Bogotá (1993-1994) - Rector del Seminario Menor de la Arquidiócesis de Bogotá (1995) - Párroco de Nuestra Señora del Campo (1996-2001) - Miembro de la Comisión Arquidiocesana del Diezmo (1996) - Párroco de San Diego (2002-2004) - Rector del Santuario de Monserrate (2004-hasta hoy) - Director Ejecutivo de la Fundación Caja de Auxilios del Clero (desde 1996) - Síndico del Seminario Mayor San José (desde 1996) - Miembro de la Junta Directiva de la Fundación Librería del Seminario (desde 1997) - Miembro del Consejo Superior de la Fundación Mutuo Auxilio Sacerdotal Colombiano (MASC) (desde 1997) - Miembro del Consejo Presbiteral (desde 2002), Miembro del Colegio de Consultores (desde 2005) - Miembro de la Junta Directiva de la Fundación Buen Samaritano (desde 2006) - Asesor Espiritual de la Acción Católica Arquidiocesana de Bogotá (desde 2007) - Miembro de la Comisión de Formación Permanente del Clero (desde 2007) El 15 de Abril de 2009, Su Santidad Benedicto XVI lo nombró Obispo titular de Calama y Auxiliar de la Arquidiócesis de Cali. El 15 de Julio de 2012, durante la XCIII Asamblea Plenaria del Episcopado, es nombrado Secretario General de la Conferencia Episcopal. El 29 de junio de 2016, el Papa Francisco nombra a monseñor José Daniel Falla Robles como obispo de Soacha.

Lun 26 Abr 2021

CELAM respalda mensaje del Papa Francisco a XXVII Cumbre Iberoamericana

En un comunicado ofrecido por el Consejo Episcopal Latinoamericano y del Caribe (CELAM), las directivas de esta institución eclesial expresaron su total respaldo al Papa Francisco frente al mensaje enviado el pasado 21 de abril a los 18 mandatarios de naciones que asistieron, en Andorra, a la XXVII Cumbre de Jefes de Estado de Iberoamérica, donde les recordó poner de presente en sus reflexiones el difícil momento que pasa el mundo por efectos de la pandemia del Covid-19. “Nos unimos al llamado del Santo Padre a profundizar la fraternidad y solidaridad entre los gobiernos y ciudadanos de Iberoamérica para que juntos, con políticas públicas justas, y con acciones concretas y eficaces, podamos enfrentar y salir airosos de la pandemia en perspectiva de un mundo verdaderamente fraterno y solidario en esta nuestra casa común”. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado del CELAM[/icon] Mensaje del Papa Francisco a XXVII Cumbre Iberoamericana[icon class='fa fa-download fa-2x'] Leer AQUÍ[/icon]