Pasar al contenido principal

pentecostés

Jue 26 Mayo 2022

Abiertas las inscripciones para el 9º Encuentro Nacional Carismático (ENCAR)

La ciudad de Pasto se prepara para celebrar del 25 al 27 de junio el lX Encuentro Nacional Carismático (ENCAR), animado bajo el lema "Que hermoso son los pies del mensajero" (Isaías 52,7).. Según los objetivos de evangelización, de la Renovación Católica CARISMÁTICA, este evento católico busca “promover en la Diócesis de Pasto, en la zona sur occidente y en todo el país, la cultura de pentecostés y extender la llama de la evangelización a través de los medios de comunicación convencionales y redes sociales, para que las comunidades carismáticas y la iglesia en general vivan el encuentro personal con Jesucristo vivo”. Por su parte, monseñor Juan Carlos Cárdenas Toro, obispo de la Diócesis de Pasto, anima a los católicos para que en el contexto de la celebración del Sínodo de la sinodalidad, convocado el Papa Francisco, se unan a esta celebración que tendrá como escenario el Coliseo Sergio Antonio Ruano de la ciudad de San Juan de Pasto. "Que este encuentro en el contexto del Sínodo sobre la sinodalidad que ha convocado el Papa Francisco, sea una ocasión para reflexionar sobre la misión de bautizados, de vivir y anunciar la Buena Nueva de la salvación impulsados por el Espíritu Santo, propiciando siempre la comunión y la participación". Será un espacio donde participarán delegaciones de la Renovación Católica Carismática (RCC) de todo el país, entre los que se encuentran laicos, sacerdotes y demás miembros, quienes vivirán una experiencia de oración, fe y vivencia de los carismas abiertos a la acción del Espíritu Santo. Esta edición contará con una invitada especial, la presidenta del Consejo Nacional Renovación Católica Carismática del Brasil, Katia Roldi Zavaris, quien vendrá a compartir los espacios de evangelización y su experiencia de encuentro con Jesucristo vivo. En el marco de la celebración se tendrán momentos de adoración al Santísimo, eucaristías, testimonios y un avivamiento musical; además se desarrollarán varias líneas temáticas de riqueza espiritual comprometidos con la nueva evangelización entre las que se destacan: “Y recibirán la fuerza del Espíritu Santo, para ser mis testigos”; “Que hermosos son los pies del mensajero de la Paz”; “puestos en acción como la madre del redentor”; y “Permanezcan en mi amor”. Las personas interesadas en participar podrán solicitar información a través del celular: 3117427081

Dom 20 Mar 2022

El Papa promulga la Constitución Apostólica «Praedicate Evangelium»

En la solemnidad de San José, se ha promulgado la nueva Constitución Apostólica sobre la Curia Romana y su servicio a la Iglesia y al mundo «Praedicate Evangelium» (Predicad el Evangelio), que entrará en vigor el próximo 5 de junio, solemnidad de Pentecostés. Este documento es fruto de un largo proceso de escucha que comenzó con las Congregaciones Generales que precedieron al Cónclave de 2013, la nueva Constitución, que sustituye a la "Pastor bonus" de Juan Pablo II promulgada el 28 de junio de 1988 y vigente desde el 1 de marzo de 1989, consta de 250 artículos. El próximo lunes 21 de marzo, el texto será presentado en la Oficina de Prensa de la Santa Sede por el cardenal Marcello Semeraro, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, por monseñor Marco Mellino, Secretario del Consejo de Cardenales, y por el padre jesuita Gianfranco Ghirlanda, canonista y profesor emérito de la Pontificia Universidad Gregoriana. El texto, como se ha dicho, es el resultado de un largo trabajo colegial, que comenzó desde las reuniones del pre-cónclave de 2013 e implicó al Consejo de Cardenales con reuniones desde octubre de 2013 hasta el pasado mes de febrero, y continuó bajo la dirección del Papa con diversas aportaciones de las Iglesias de todo el mundo. Hay que destacar que la nueva Constitución confirma un camino de reforma ya aplicado casi en su totalidad en los últimos nueve años, a través de las fusiones y ajustes que se han producido y que han dado lugar al nacimiento de nuevos Dicasterios. El texto subraya que "la Curia Romana está compuesta por la Secretaría de Estado, los Dicasterios y los Órganos, todos ellos jurídicamente iguales". Entre las novedades más significativas contenidas en el documento está la unificación del Dicasterio para la Evangelización de la antigua Congregación para la Evangelización de los Pueblos y el Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización: los dos responsables de los dicasterios se convierten en pro-prefectos, ya que la prefectura de este nuevo Dicasterio está reservada al Papa. De hecho, la Constitución dice: "El Dicasterio para la Evangelización está presidido directamente por el Romano Pontífice". Se crea también el Dicasterio para el Servicio de la Caridad, representado por la “Elemosineria”, que asume un papel más significativo en la Curia: "El Dicasterio +para el Servicio de la Caridad, llamado también “Elemosineria Apostólica”, es una expresión especial de la misericordia y, a partir de la opción por los pobres, los vulnerables y los excluidos, ejerce en cualquier parte del mundo la obra de asistencia y ayuda hacia ellos en nombre del Romano Pontífice, que en los casos de particular indigencia u otra necesidad, dispone personalmente las ayudas que se han de asignar". La Constitución Apostólica presenta, en este orden, los Dicasterios de la Evangelización, de la Doctrina de la Fe y del Servicio de la Caridad. Otra fusión se refiere a la Comisión para la Protección de Menores, que pasa a formar parte del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, continuando con sus propias normas y teniendo su propio presidente y secretario. Una parte fundamental del documento se refiere a los principios generales. El preámbulo recuerda que todo cristiano es un discípulo misionero. Entre los principios generales es fundamental la especificación de que todos -y por tanto también los fieles laicos- pueden ser nombrados para funciones de gobierno en la Curia Romana, en virtud del poder vicario del Sucesor de Pedro: "Todo cristiano, en virtud del Bautismo, es discípulo misionero en la medida en que ha encontrado el amor de Dios en Cristo Jesús. Esto no puede dejar de tenerse en cuenta en la actualización de la Curia, cuya reforma, por tanto, debe prever la participación de los laicos, también en funciones de gobierno y responsabilidad". Además, se subraya que la Curia es un instrumento al servicio del Obispo de Roma y en beneficio de la Iglesia universal y, por tanto, de los episcopados e Iglesias locales. "La Curia Romana no se interpone entre el Papa y los obispos, sino que está al servicio de ambos en la forma propia de la naturaleza de cada uno". Otro punto significativo se refiere a la espiritualidad: los miembros de la Curia Romana son también "discípulos misioneros". La sinodalidad, en particular, se destaca como una forma habitual de trabajar para la Curia Romana, un camino ya en marcha, que debe desarrollarse cada vez más. Otros aspectos contenidos en el documento son el subrayado de la definición de la Secretaría de Estado como "secretaría papal", el traslado de la Oficina del personal de la Curia a la Secretaría de Economía (Spe), la indicación de que la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (Apsa) debe actuar a través de la actividad instrumental del Instituto para las Obras de Religión. También se establece que para los clérigos y religiosos en servicio en la Curia Romana el mandato es de cinco años y puede ser renovado por un segundo período de cinco años, al final del cual vuelven a sus diócesis y comunidades de referencia: "Por regla general, después de cinco años, los funcionarios clericales y los miembros de los Institutos de Vida Consagrada y de las Sociedades de Vida Apostólica que han servido en las Instituciones y Oficinas Curiales vuelven a la atención pastoral en su diócesis/parroquia, o en los Institutos o Sociedades a los que pertenecen. Si los Superiores de la Curia Romana lo consideran oportuno, el servicio podrá ser prorrogado por un nuevo período de cinco años". Fuente: Agencia Vatican News Lea artículo: LA REFORMA DE LA CURIA ROMANA: UNA REFORMA SINODAL [icon class='fa fa-download fa-2x'] AQUÍ[/icon]

Lun 28 Feb 2022

¡Volvamos a la Pascua!

Por: Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía - “Bendito sea Dios, Padre de Nuestro Señor Jesucristo, que en su gran misericordia, por la resurrección de Jesucristo de entre los muertos, NOS HA HECHO NACER A UNA ESPERANZA VIVA, a una herencia incorruptible, pura, imperecedera, que nos estaba reservada en el Cielo. La fuerza de Dios nos custodia en la fe para la salvación que nos aguarda, cuando llegue el momento final” (1ª Pedro1, 3-5). Con esta súplica del Apóstol y Pastor elegido por Jesús para la primitiva Iglesia, convoco a todos los creyentes al retorno pleno a sus parroquias y centros de culto, para compartir, desde el miércoles de Ceniza, dos de marzo, la preparación a LA PASCUA ANUAL 2022. Los tiempos litúrgicos de Cuaresma y Pascua, entre el sacramental de la Santa Ceniza y la solemnidad de Pentecostés, cuando se apaga el Cirio Pascual y encendemos el fuego interior del Espíritu Santo, marcan la gran transformación que Cristo Jesús hace en quienes acogemos su Persona y su Palabra, su misericordia y la soberanía del Padre Dios. Un ser humano nuevo, una nueva humanidad, un cambio de vida y un “cambiar la vía” por la que mal caminamos, expresan esta Nueva Creación en Cristo. Dios deja de ser mera religión y su Amor de la Cruz se vuelve como el “Big Bang” de un universo nuevo. Pedro, en su primera carta que hemos citado, y Pablo en su primera a Corintios (15, 57), nos invitan a que “demos gracias a Dios, que nos da la victoria por nuestro Señor Jesucristo”. Esa victoria del AMOR DE LA CRUZ, hemos de proclamarla con claridad, gozo y firmeza. Hemos de volvernos un solo cuerpo, un pueblo dispuesto a CAMINAR JUNTOS, una fuerza del Dios Amor que transfigura esta historia triste y adolorida que hoy vive la humanidad, amenazada nuevamente por la catástrofe de una guerra mundial inminente, por un calentamiento global, resultado de la guerra a muerte contra los recursos vitales. Todo ello, junto a fenómenos de violencias, de aborto provocado y fetos mercantilizados para surtir órganos y células, de eutanasia y suicidios disparados. Son, entre otros, los signos negativos en medio de nuestros tiempos, por otro lado tan avanzados y globalizados, tan sorprendentes y luminosos. Sobra decir, entonces, que vivimos tiempos difíciles y tenemos inmensa responsabilidad histórica, sobre todo para no comprometer el futuro de las nuevas generaciones y de la especie humana misma. Volver a la Pascua 2022, después de dos años entre pandemias y protesta social, en medio de jornadas electorales y movilizaciones sociales, del recrudecimiento del conflicto interno y la amenaza latente de conflictos armados en las fronteras y con Venezuela, de inseguridad ciudadana y flujos de desplazados y migrantes, es la medicina espiritual y la terapia colectiva que necesitamos todos. La Cuaresma y Pascua 2022 tengan en nuestras parroquias los cuatro grandes motivos de la actualidad: 1. El gran marco del PERDÓN DE DIOS a todos nuestros abusos, incluidos los que nosotros mismos como pastores hemos cometido. Es REPARTIR A MANO ABIERTA EL PERDÓN DE DIOS, la liberación de la culpa y del pecado, la victoria sobre el odio y las venganzas, la sanacion de nuestras heridas sicosociales, la ABSOLUCIÓN DE PECADOS RESERVADOS, la reconciliación con la creación y la vida como obra y don de Dios. Volvamos la parroquia un gran confesonario abierto en jornadas penitenciales conjuntas en cada territorio arciprestal durante la Cuaresma. Promovamos EL PERDONAR como verbo en infinitivo que identifica el actuar de Dios con nosotros, como respuesta indispensable en nuestras relaciones interhumanas, sociales y políticas, aprendiendo a conjugarlo en todos los modos pasivos y activos y subjuntivos, en relación con los demás. Es necesario pedirlo, ofrecerlo, darlo, instituirlo como cultura del perdón. 2. LA PASCUA COMO CENA FAMILIAR, al mejor estilo hebreo, judío, según las tradiciones nuestras, enmarcándolas en la Cena Pascual de Jesús y en las cenas, desayunos y comidas del Señor Resucitado, centradas en los verbos eucarísticos: TOMAR el pan, DAR GRACIAS, PARTIRLO Y DARLO a comer. “Quédate con nosotros, Señor”. “Lo reconocieron al partir el pan” (Lucas 24, 13-35). 3. EL AMOR DE LA CRUZ como camino de vida, aprendido a la luz de la Pasión, las actitudes y las palabras de Jesús desde el misterio de la Cruz y de la NO VIOLENCIA que nos adentra en el alma propia y el arrepentimiento, en el desarme de actitudes, palabras y acciones demoledoras contra el prójimo. 4. LA SINODALIDAD como aprendizaje de Iglesia y de poblaciones en los territorios, a CAMINAR JUNTOS. La integración sociocomunitaria, más allá de lo confesional, las procesiones y manifestaciones colectivas de religiosidad cristiana, equilibradas siempre para que resalte la grandeza de lo litúrgico, así como la más amplia participación de generaciones y fieles en la Semana Santa, sean impulso claro a esta sinodalidad. El Bautismo y la Penitencia que lo renueva, la eucaristía y las comunidades que reviven, sean el sello evangelizador de estos grandes tiempos litúrgicos que iniciamos en los albores del mes de marzo. + Darío de Jesús Monsalve Mejía Arzobispo de Cali

Mar 25 Mayo 2021

De Babel a Pentecostés

Por: Mons. José Libardo Garcés Monsalve - Babel, en la Sagrada Escri­tura, es lugar de confusión y desorden, donde la pre­potencia, orgullo y egoísmo del hombre lo condujeron a creer que podía construir una torre para lle­gar hasta el cielo, olvidándose que el camino era la vivencia de los mandamientos. En Babel todos hablan y nadie se entiende, todos mandan y nadie obedece, todos gritan y nadie hace silencio, se exige justicia y ho­nestidad mientras se comulga con la injus­ticia y la corrupción, se pide hablar con la verdad mientras se di­funde la mentira. En Babel no hay espacio para el diálogo y la concertación, todos buscan imponer sus ideas a costo de lo que sea. En Babel la men­te y el corazón del ser humano se embotan de tal manera que, le es imposible reconocer en el otro al hermano, sólo ve adversarios a los que tiene que vencer, porque los considera una amenaza. Colombia, tierra consagrada al Sa­grado Corazón de Jesús, no puede ni debe ser la Babel donde el mie­do venza a la confianza, el odio al amor, la violencia a la paz, la di­visión a la unidad. El Santo Padre Francisco nos ha dicho que es en la fraternidad y con la solidaridad como lograremos vencer juntos la pandemia de la COVID-19, que, por estos días, entre otras cosas, ha encontrado en las aglomeracio­nes de personas presentes en las movilizaciones y protestas, espa­cios para su rápida propagación. Volvamos a reunirnos en una sola casa como lo hicieron los discípu­los de Jesús que, sin perder la fe y la esperanza en las palabras de su Maestro, perseveraron en la ora­ción, en la fracción del pan, y en el ejercicio de la caridad. Esa casa común es Colombia, lugar donde debe darse el Pentecostés, donde la presencia del Espíritu Santo nos una a todos y transforme la confusión en comunión, tienda puentes para el encuentro y de­rribe los muros de la indiferencia, del odio y de la violencia. Con un nuevo Pente­costés, los colombia­nos llenos del Espíritu Santo, seremos capa­ces de comprender la lengua de todos, pues hablaremos la lengua que hombres y mu­jeres entienden sin importar raza, credo o clase social: el len­guaje del amor, del perdón, la re­conciliación y la paz. Este nuevo lenguaje nos permite sentarnos a dialogar para escucharnos, reco­nocer con humildad que, en deter­minados momentos, por tratar de construir una torre a nuestro ca­pricho y antojo para sentirnos más fuertes y vernos más altos que los demás, he­mos olvidado el sentido de ser hermanos y la importancia de construir el bien común. Es el momen­to de pedirle al Espíritu Santo que así, como se posó en cada uno de los após­toles, encienda en cada colom­biano el fue­go de su amor, indispensable para asumir con valentía y deci­sión el compro­miso de trabajar juntos por la transformación de un país que necesita un pro­yecto integral de vida en el que se respete la dignidad del ser humano y se promueva el desa­rrollo de los pueblos. Este avivamiento, llenará nues­tros corazones de fe y esperan­za, hará posible que lo torcido se enderece, lo escabroso se allane, los adversarios se den la mano, y la búsqueda del bien común sea responsabilidad y compromiso de todos. De Babel son los capítulos negros de la historia de Colombia que se repiten cuando los colombianos se alejan y no aceptan la volun­tad de Dios, al contrario, constru­yen torres gigantes que terminan desmoronándose y aplastando en su caída a los más débiles e inde­fensos. En cambio, Pentecostés es una nueva creación con líneas en blanco para escribir a la luz del Espíritu Santo los nuevos ca­pítulos de los colombianos que se reconocen hijos de un mismo Padre y se hacen conscientes de que, si permanecen en el amor que Jesucristo les enseñó, vencen al pecado que genera caos, dolor y muerte, para vivir en la gracia que produce abundantes frutos. En unión de oraciones, reciban mi bendición. + José Libardo Garcés Monsalve Obispo de Málaga Administrador Apostólico de la Diócesis de Cúcuta

Dom 23 Mayo 2021

Papa Francisco sigue orando por Colombia

En un mensaje pronunciado este domingo 23 de mayo, al finalizar el rezo del Regina Coeli y en la fiesta de Pentecostés, el papa Francisco volvió a manifestar su cercanía hacia el pueblo colombiano y pidió orar por esta nación. "Queridos hermanos y hermanas, confío a las oraciones de todos ustedes la situación en Colombia, que sigue siendo preocupante. En la solemnidad de Pentecostés rezo para que el amado pueblo colombiano sepa acoger los dones del Espíritu Santo, para que a través de una dialogo serio se puedan encontrar soluciones justas, a los múltiples problemas de los cuales sufren especialmente los más pobres, debido a la pandemia". Igualmente, invitó para que se evite cualquier comportamiento que atente contra la vida humana, en ejercicio a ejercer sus derechos en un marco constitucional. "Insto a todos a evitar, por razones humanitarias, comportamientos perjudiciales para la población en el ejercicio del derecho a la protesta pacífica”, puntualizó. https://youtu.be/kd-AyA6SMF8

Mié 19 Mayo 2021

Diócesis de Ocaña adelantará jornada de actualización litúrgica

Como parte del proceso formativo que adelanta la Diócesis de Ocaña en las diferentes áreas pastorales, y en esta ocasión, animados por el Vaticano II que plantea que: “La liturgia es la cumbre a la cual tiende la actividad de la Iglesia y al mismo tiempo la fuente de donde mana toda fuerza”, los días 20 y 21 de mayo, esta Iglesia particular desarrollará la Jornada Diocesana de Actualización Litúrgica. Será un momento oportuno para reflexionar desde el Evangelio y la Doctrina Social de la Iglesia, sobre el encuentro con Jesucristo en la liturgia, que cada vez está más presente en los distintos aspectos de la vida cristiana. Los temas a abordar durante estos dos días son: "Desde el Pentecostés judío y la entrega de la ley antigua, al Pentecostés Cristiano y la entrega de la nueva ley en el amor oblativo de Cristo resucitado"; y "María y el primer Pentecostés Cristiano". La Jornada está dirigida para sacerdotes, religiosos, religiosas, y laicos. Para participar ingrese al siguiente link [icon class='fa fa-download fa-2x'] AQUÍ[/icon]

Mié 12 Jun 2019

Fieles caleños se congregaron para recibir al Espíritu Santo

El pasado sábado 8 de junio, en las Canchas Panamericanas, miles de fieles caleños se reunieron para celebrar la Vigilia de Pentecostés, acto preparativo para la llegada del Espíritu Santo y que conmemora el nacimiento de nuestra Iglesia Católica. El evento inició con avivamiento y música, animando a los feligreses que se encontraban expectantes ante la llegada de este Pentecostés. Acto seguido, los presbíteros Omar López y Gustavo Echeverry presentaron a la audiencia los agentes que en este momento están ayudando a implementar el Plan Pastoral arquidiocesano 2019 - 2023, e instaron a los asistentes a hacer parte de la Asamblea Pastoral de Servidores de cada una de las parroquias. De la misma forma, se vivió de manos del Padre Felipe Forero, párroco del Santuario de la Divina Misericordia, una catequesis interactiva, durante la cual se resaltaron los valores de los jóvenes católicos y de la vocación matrimonial, todo realizado desde la experiencia personal del público, el cual se divirtió mientras recibían el mensaje de amor de nuestra Iglesia. Asimismo, se llevó a cabo un acto penitencial liderado por Mons. Juan Carlos Cárdenas Toro, Obispo Auxiliar de Cali, el cual llevó a cada uno de los presentes a interiorizar el mensaje de Cristo, a evaluar su comportamiento como cristiano y a pedir la intercesión de Dios en sus vidas. También hubo Exposición del Santísimo Sacramento, portado por Mons. Luis Fernando Rodríguez Velásquez, Obispo Auxiliar de Cali, durante el cual se presentaron los dones recibidos, en tanto los feligreses oraban con devoción. Por último, se cerró la vigilia con Solemne Eucaristía presidida por Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía, quien consagró la celebración a la paz y reconciliación de nuestro país, así como al respeto al prójimo desde los valores católicos.

Sáb 20 Abr 2019

Sábado Santo: Vigilia Pascual

La vigilia de esta noche es el punto culminante del Triduo Pascual. Es la gran celebración del año litúrgico, porque en ella se celebra con júbilo la resurrección de Jesucristo. Es una celebración para vivirla con toda la intensidad necesaria, pues ella inaugura la cincuentena festiva de Pascua que, a la manera de un gran domingo, se prolonga desde esta noche hasta la solemnidad de Pentecostés. Unos momentos muy bellos se desarrollan en la celebración, iniciando con la bendición del fuego para encender el cirio pascual que representa a Cristo luz del mundo y del que todos los fieles congregados en el templo toman luz para sus cirios. Seguidamente, la liturgia de la Palabra que, entretejida por cantos y oraciones, va proclamando la historia de la salvación. Estas lecturas unidas al Gloria y al Aleluya, son la mejor narración del acontecimiento que celebramos este día: la resurrección de nuestro Salvador. Se continúa con la liturgia bautismal, momento para renovar nuestro bautismo. Y, finalmente, la liturgia de la Eucaristía, donde culmina la celebración pascual; allí se concentra la conmemoración más significante por el pan y el vino, que es un banquete pascual, signo de entrega y permanencia de muerte, de vida y de resurrección. Este es el núcleo, este es el corazón de nuestra vida de fe. Vivámosla con toda la alegría. ¡Aleluya, aleluya, el Señor resucitó!