Dom 4 Jun 2023
5 de junio | Lectura del santo Evangelio según san Marcos 12, 1-12
Agarrando al hijo amado, lo mataron y lo arrojaron fuera de la viña
EN aquel tiempo, Jesús se puso a hablar en parábolas a los sumos sacerdotes, a los escribas y a los ancianos:
«Un hombre plantó una viña, la rodeó con una cerca, cavó un lagar, construyó una torre, la arrendó a unos labradores y se marchó lejos. A su tiempo, envió un criado a los labradores, para percibir su tanto del fruto de la viña. Ellos
lo agarraron, lo azotaron y lo despidieron con las manos vacías. Les envió de nuevo otro criado; a este lo descalabraron e insultaron. Envió a otro y lo mataron; y a otros muchos, a los que azotaron los mataron. Le quedaba uno, su hijo amado. Y lo envió el último, pensando:
´´Respetarán a mi hijo´´.
Pero los labradores se dijeron:
´´Este es el heredero. Venga, lo matamos y será nuestra la herencia. Y, agarrándolo, lo mataron y lo arrojaron fuera de la viña.´´
¿Qué hará el dueño de la viña? Vendrá, hará perecer a los labradores y arrendará la viña a otros. No han leído aquel texto de la Escritura: ´´La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular. Es el Señor quien lo ha hecho, ha sido un milagro patente´´?».
Intentaron echarle mano, porque comprendieron que había dicho la parábola por ellos; pero temieron a la gente y, dejándolo allí, se marcharon.
Palabra del Señor.