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Iglesia

Dom 12 Ago 2018

Arquidiócesis de Villavicencio lanza campaña: “PAZOS DOY”.

Con motivo del primer aniversario de la visita del Papa Francisco a Villavicencio, la arquidiócesis de esta ciudad lanzó la campaña “PAZOS DOY”. Una iniciativa que busca animar la preparación de los cristianos durante los 30 días que faltan para conmemorar con un evento principal y unas actividades semanales, el aniversario de la visita del Santo Padre a Colombia y de manera particular a esta ciudad. Según lo informa un boletín emitido por la oficina de prensa de la arquidiócesis de Villavicencio, cada día se propondrá una acción concreta para realizar personalmente y en familia; dedicando espacios para la oración, destinando días para realizar obras de misericordia, motivando al cuidado del medio ambiente y animando la visita a Jesús eucaristía. “La campaña “Demos el primer paso” que realizamos en su momento, como preparación para la visita del Papa Francisco dio resultados positivos y sirvió como fundamento para acoger esta iniciativa, en la que como Delegación de Comunicaciones nos propusimos invitar a los fieles a dar el primer paso para salir al encuentro del Papa Francisco, “Demos el primer paso” fue una serie de actividades que nos permitieron de una manera práctica prepararnos de la mano de Dios y acoger al Santo Padre, con total disposición como lo vivimos el 8 de septiembre del 2017”, reza el mensaje de esta jurisdicción. La Arquidiócesis junto con la Alcaldía de Villavicencio y la Gobernación del Meta, vienen trabajando conjuntamente para la realización de un evento especial que marcará el primer aniversario de la visita del Papá Francisco a esta ciudad.

Sáb 11 Ago 2018

Obispo de Yopal invita a vivir la caridad con damnificados por invierno

Tras los desastres que han dejado las lluvias en los departamentos de Guainía y Vichada, la Diócesis de Yopal, a través de su obispo, monseñor Edgar Aristizábal Quintero, invitó a los casanareños para que expresen su solidaridad a través de la oración, los aportes económicos y la donación de bienes no perecederos. “El llamado del Señor nos hace reflexionar sobre la situación que hoy están viviendo muchos hermanos de Colombia, en particular en los Vicariatos Apostólicos de Puerto Carreño e Inírida, por ello la invitación es a que vivamos la caridad con ellos”, expresó el prelado en un video mensaje. Monseñor Aristizábal Quintero, en sintonía con la permanente invitación del Papa Francisco en tener expresiones de caridad con nuestros hermanos, recordó que "si no tenemos obras concretas es inútil hablar del amor a Dios, porque sería vano y no tendría sentido (…) El amor a Dios lo vivimos en el amor al hermano, especialmente al más necesitado”, puntualizó. Para recaudar las ayudas económicas esta jurisdicción ha destinado a nombre de la Diócesis de Yopal, la cuenta de ahorros del Banco de Bogotá No. 646567198 (Nit: 891.855.518-5). Así mismo, están recibiendo los donativos en especie en la sede de la curia diocesana (Calle 8 No. 21 – 85 Yopal – Casanare).

Vie 10 Ago 2018

Iglesia conmemoró el Día internacional de los pueblos indígenas

Con el rezo del Santo Rosario, los frailes dominicos de la Basílica de Nuestra Señora del Rosario y la comunidad Chiquinquireña, recibieron a los más de quinientos representantes indígenas que llegaron a la ciudad para conmemorar el día internacional de los pueblos indígenas a los pies de la Reina y Patrona de Colombia. Este 9 de agosto, hacia las 11:00 de la mañana arribaron a Chiquinquirá más de doce buses que transportaron, desde Bogotá, a los delegados de algunas comunidades indígenas que están asentadas en la capital del país producto del desplazamiento forzado y la violencia que se vive en sus territorios. Como peregrinos caminaron junto a la imagen de Nuestra Señora del Rosario, hasta llegar al Santuario Mariano para la eucaristía solemne que fue presidida por Monseñor Medardo de Jesús Henao del Río, obispo del Vicariato Apostólico de Mitú. En su homilía monseñor Medardo remembró el acontecimiento de la renovación como un hecho ocurrido en tierras ancestrales donde por mucho tiempo se maltrató y se vulneró los derechos de las comunidades de la época. “Pero el lienzo de Nuestra Señora aún se ve borroso cuando nuestra casa común es amenazada por explotación ilegal, cuando muchos de nuestros hermanos indígenas son desplazados por la violencia y cuando sus líderes son asesinados por buscar el bien común”, manifestó el prelado. Sumado a esto, el prelado denunció que un gran número de indígenas no cuentan con un servicio de salud adecuado y que son humillados en su persona por el simple hecho de venir de un origen ancestral. Resaltó el papel de algunos santos, como San Bartolomé de Casas, que ha luchado por la renovación del pueblo indígena y pidió a Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá que, así como ella tomo sus colores esa mañana de 1586, que así también renueve el esplendor de los humildes y sencillos que son los elegidos de Dios. Como mensaje final, monseñor Medardo invitó a los indígenas, congregados en la Basílica, a que se sientan orgullosos de sus raíces, y a los jóvenes les pidió respetar y promulgar las tradiciones de sus padres y abuelos. La cultura, otra protagonista El acto religioso fue animado por los cantos étnicos y culturales de la comunidad indígena Embera Chamí, coro de la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús, más conocida como la iglesia del Voto Nacional de Bogotá, que con instrumentos y bailes típicos rindieron homenaje a Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá. Una vez culminada la eucaristía, los más de quinientos invitados fueron recibidos por los grupos apostólicos del Santuario Mariano Nacional en la sede de la Universidad Santo Tomás para compartir un plato de sopa caliente e intercambiar experiencias culturales y sociales. Este evento contó con la participación de comunidades Embera chamí, Embera catío, Embera dobida y Siapidara, Tucana, Guanana, Cubea, Quechua, Muisca, Pijao, lnga, Kamsá, Nassa yube, Waunam, Curripacos, Piapocos, Senú, Piratañuya y Luitota, todos ellos del territorio colombiano. Este acontecimiento quedará escrito para siempre en el libro de las peregrinaciones a la Basílica de Chiquinquirá como una de la más importantes, pues así como María se mostró hace 400 años a una humilde indígena y a su hijo, ahora ellos vinieron hasta su casa para mostrarse ante Ella y consagrar sus raíces ancestrales. Fuente: Of. de comunicaciones Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá

Jue 9 Ago 2018

Embajadora de EE.UU ante la ONU visita Casa ‘Divina Providencia’ en Cúcuta

La embajadora de EE.UU. ante la ONU, Nikki Haley, la mañana del miércoles 8 de agosto arribó a Cúcuta, Norte de Santander, para acercarse a la frontera colombo-venezolana y percibir la realidad de los efectos causados por la crisis humanitaria derivada del vecino país. A la Casa de Paso Divina Providencia de la Diócesis de Cúcuta, ubicada en La Parada, Villa del Rosario, llegó la comitiva de esta dependencia del gobierno estadounidense, donde se reunieron con el Obispo de Cúcuta, Monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, quien los acompañó a recorrer la Casa y vivir de cerca esta situación. Ante lo observado, Haley afirmó que “Lo que hace Colombia, cuidar a sus hermanos y hermanas es muy importante”, destacando la labor que ha ejecutado la Iglesia colombiana para mitigar este fenómeno de migración masiva, que trae consigo hambre y enfermedades, entre otros. La funcionaria del gobierno de Donald Trump, aseveró duras críticas contra el gobierno venezolano, dice que el mundo tiene que darse cuenta que Maduro (el presidente de Venezuela) “es un dictador”. También afirmó: "los miles de inmigrantes eran profesionales, esa nación era exitosa pero todo eso desapareció… los Estados Unidos va a seguir trabajando para que quienes huyen tengan una mejor calidad de vida". Su compromiso como embajadora está centrado en visibilizar esta situación y asimismo proyectar acciones concretas que desde el gobierno de su país pueda ayudar para que esta situación disminuya y finalmente se termina. Finalizada la visita a la Casa de Paso, la comitiva se dirigió al puente Internacional Simón Bolívar para observar el drama que diariamente viven los venezolanos al cruzar la frontera y emprender una odisea dirigiéndose a otros países en busca de un mejor futuro.

Mié 8 Ago 2018

10 de agosto: Día Nacional de la Libertad para Educar

La Conferencia Episcopal de Colombia se une a esta conmemoración que convoca a padres de familia, líderes sociales, actores políticos, organizaciones, entidades y comunidad en general en su deseo y exigencia por el respeto al derecho de los padres a educar de acuerdo a sus principios, valores y creencias; así como el respeto a la autonomía educativa de las instituciones, sean o no confesionales. Esta iniciativa surgió hace dos años con la manifestación del 10 de agosto de 2016, que reunió a dos millones de colombianos en torno a las polémicas cartillas de ideología de género que se esperaban implementar en los colegios del país, han explicado los organizadores, entre los que se encuentran: Red Familia Colombia, Un paso al frente y Foro Nacional de la Familia. De otra parte, señalan: “Nos adherimos al manifiesto internacional apoyado por más de 40 organizaciones internacionales en la defensa de este derecho humano contemplado en la Carta de Derechos Humanos de la ONU y en todos los tratados de Derechos Humanos de los que Colombia es signataria”. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar: Manifiesto internacional por la libertad para educar[/icon]

Mié 8 Ago 2018

15 años de actividad pastoral trabajando de la mano con las familias

En un ambiente de júbilo, alabanza y gratitud a Dios se desarrolló la 2ª jornada de celebración de los 15 años de la Diócesis de Engativá, con participación de familias y sacerdotes pertenecientes a esa jurisdicción eclesial. El coliseo del Colegio Eucarístico Mercedario fue el escenario desde el cual monseñor Francisco Nieto Súa, obispo de esta diócesis y el secretario del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, monseñor Octavio Ruiz Arenas, animaron a cerca de 3.000 personas a vivir el plan pastoral, que busca lograr “Con misericordia, paz en la ciudad”. Con este propósito, el obispo diocesano, monseñor Nieto Súa, destacó la creación este año de la Vicaría de Espiritualidad y Cultura, a través de la cual esta jurisdicción quiere mirar “con misericordia a quienes llegan: pobres, pecadores, a nuestros hermanos venezolanos…, porque son ellos quienes marcan a futuro el plan pastoral, que nos empuja a que el anuncio del evangelio sea más claro y más eficaz”. Durante su intervención, monseñor Nieto agradeció a Dios por las pequeñas comunidades que han encontrado una forma cercana de vivir a Dios, por los sacerdotes que trabajan con ellas y por las familias. En el mismo espacio la Pastoral de Familia presentó sus metas y con apoyo en testimonios de tres parejas de esposos, conformadas desde hace más de 30 años, expuso la importancia de vivir a Cristo y caminar tomados de Su mano. La familia y las redes sociales fue el tema abordado por el padre Germán Barbosa, quien con un equipo de jóvenes representó la forma como el Internet y sus diferentes herramientas afectan las relaciones familiares, exponen la privacidad de las personas e incluso pueden llegar a ocasionar situaciones desafortunadas tanto a individuos como al núcleo familiar. La gran sorpresa para los asistentes estuvo a cargo de la Asociación Misioneros del Amor de Jesús y María, que entregó cupos para que varias familias pertenecientes a la Diócesis asistan a un encuentro privado con el cantante Luis Felipe Ascoy, quien junto a Martín Valverde, serán las figuras principales del Megaconcierto Católico “Con misericordia, paz en la ciudad”, que se realizará en el parque Simón Bolívar el próximo sábado 29 de septiembre, como cierre de las celebraciones previstas para festejar los 15 años de la Diócesis de Engativá. La jornada se dio por terminada con la Eucaristía presidida por monseñor Octavio Ruiz Arenas y monseñor Francisco Nieto Súa. Fuente: Of. de comunicaciones diócesis de Engativá

Vie 3 Ago 2018

Fallece hermano del arzobispo de Cartagena

La Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) expresa sus más sentidas condolencias al arzobispo de Cartagena, monseñor Jorge Enrique Jiménez Carvajal, por el sensible fallecimiento de su hermano Jaime Jiménez Carvajal. Las honras fúnebres se celebrarán este sábado 4 de agosto, a las 9:00 a.m., en la parroquia de San Lucas (Carrera 25 N° 20S-35, Poblado, San Lucas - Medellín). El episcopado colombiano eleva sus plegarias por el eterno descanso del señor Jaime, manifiesta su compañía y solidaridad con la familia del arzobispo de Cartagena. Jaime Jiménez Carvajal Nació el 12 de junio del 1947. Se formó en la Escuela Naval de Cadetes de Cartagena y perteneció a la Armada Nacional hasta cuando se retiró, siendo capitán de reserva. Le sobreviven su esposa Graciela, sus tres hijas: Tatiana, Liliana y Natalia, y tres nietos. Era un Católico practicante, persona de mucha responsabilidad en su vida y dedicado a su trabajo y a su hogar. Su salud fue muy frágil y los últimos años especialmente difíciles por la complicación de diversas enfermedades. Desde hace 10 años trasladó su hogar de Cartagena a Medellín, particularmente por motivos de salud.

Vie 3 Ago 2018

Agenda eclesial de paz

Por: Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía - En la Colombia actual, el bien de la paz no puede reducirse a lo que hagan o dejen de hacer los gobiernos. Hoy no tenemos un estado de paz, ni una paz de Estado, como lo manda la constitución nacional, pues carecemos, tristemente, de esos consensos entre ciudadanos y gobernantes que, por múltiples factores de vieja data y conceptos divergentes del poder y de la justicia, han generado, no solamente desequilibrio sino verdadero daño a la convivencia pacífica, a la inclusión del Estado en la totalidad del territorio y de la población en la totalidad de derechos y oportunidades. Pululan las economías y los “poderes paralelos”, en el barrio o en el campo, en la lejanía y la selva. Situación que se agrava mucho más con el auge del narcotráfico, su producción y mercado, para no hablar de otros fenómenos concomitantes a la criminalidad. Sin duda alguna, estos serán días de incertidumbre y expectativas, de balance sobre un proceso de paz, apenas iniciándose, pero ya con hechos, procesos y planes que deberán ser responsablemente asumidos por el pueblo colombiano y por el nuevo gobierno, más allá de visiones partidistas. En materia de ahorrar vidas humanas, y la paz sí que lo es, no se puede mantener el criterio de derecho a desandar el trecho recorrido, sino de garantizar la meta anhelada: paz con verdad, democracia plena y mayor justicia social. La Iglesia Católica en Colombia, ojalá en un contexto de ecumenismo desde la verdad de Dios, del hombre y de la creación, debe alentar siempre, sin miedo, el Evangelio de la paz, la buena nueva del perdón y la utopía de la unidad en la diversidad. Para una población en diáspora cultural y desarraigada de sus pertenencias, de bienes y sentido, ahogada por el libre mercado y el insaciable consumo, sometida a la ley de la fuerza y de un aberrante desprecio por la vida del semejante, se vuelve indispensable esa “Iglesia de puertas abiertas”, comunidad en salida al encuentro del difícil prójimo de estos tiempos, “hospital de campaña” en medio de personas, familias y masas heridas. Esta Iglesia, “espacio alternativo” a sociedades y Estados, independiente de partidos gobernantes y opositores, deberá emerger, con fuerza y sabor de Evangelio, también en Colombia. Evangelizar y pastorear la sociedad (fe y doctrina social de la Iglesia), resultan inseparables. Bien vale la pena retomarlo con el ímpetu de hace 50 años, con el “Documento de Medellín”, conclusiones de la 2a. Asamblea General del Episcopado Latinoamericano y Caribeño, celebrada en Medellín del 26 de agosto al 6 de septiembre de 1968. Allí, la justicia y el cambio social, la paz, la opción por los pobres y por los jóvenes, marcaron la pauta. Propongámonos, como mínimo, volver a ese texto y releerlo hoy, guiados por el mensaje del Papa Francisco. El Documento de Medellín, actualizado por el magisterio del Papa, bien podría inspirarnos una agenda eclesial de paz para nuestro compromiso. Esta agenda podría ser construida entre todos. Me atrevo a sugerir, como hechos y palabras “generadores” de aprendizajes “alfabetizadores”, para una conciencia social de paz como Iglesia, al menos tres conjuntos de lenguaje: 1. Conjunto de la “V”: *VIDA, VÍCTIMAS, VERDAD. 2. Conjunto de las “P”: *PALABRA, PACTO, PERDÓN. 3. Conjunto de las “D”: *DIGNIDAD, DERECHOS, DEMOCRACIA. Sobre estos hechos-palabra, podríamos empezar a generar una conducta de Iglesia, que nos permita visibilizar a las víctimas de violencias y violentos, para cuestionar a sus perpetradores y a los indiferentes comportamos estos sencillos aportes. +Darío de Jesús Monsalve Mejía Arzobispo de Cali