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jóvenes

Mié 7 Abr 2021

Segunda cohorte para formar líderes jóvenes católicos en Bogotá

La Academia de Líderes Católicos de Colombia, dirigida por la arquidiócesis de Bogotá, iniciará este viernes 09 de abril, el segundo nivel de formación virtual para jóvenes. Un curso dirigido a estudiantes católicos o con apertura al mensaje evangélico, que se destaquen por sus condiciones de liderazgo, sus inquietudes cívicas y su vocación al servicio. Sus organizadores han indicado que este es un espacio que busca la "formación para jóvenes que se sienten inclinados de manera especial a la búsqueda del bien común y a ser actores en la transformación de nuestra ciudad y nuestro país, particularmente desde el ámbito político". Actuarán como conferencistas invitados: José Antonio Rosas Amor, Fundador Academia Latinoamericana de Líderes Católicos; José Manuel Restrepo Abonado, Ministro de Comercio, Industria y Turismo; Henry Bradford Sicard, Rector Colegio de Estudios Superiores de Administración (CESA); Sebastián Campos Garrido, Conferencista chileno en temas de comunicación digital y desarrollo personal, autor de 3 libros sobre espiritualidad y desarrollo personal para jóvenes; Paola María Coronado Angulo, Emprendedora mexicana; Eduardo del Castillo, Lidera la Fundación Colombia Comparte y ayuda a familias vergonzantes a superar su crisis financiera; Juana D María Pulido, Líder empresarial. Administradora de Negocios Internacionales; Diana María Guzmán Romero, Secretaria general de la Vicaría de Evangelización de la Arquidiócesis de Bogotá; Omar Bernal, exfutbolista; Monseñor Pedro Salamanca Mantilla, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Bogotá; monseñor Jaime Alberto Mancera Casas, Vicario Episcopal para la Dimensión Social de la Evangelización - Arquidiócesis de Bogotá, monseñor Daniel Arturo Delgado Guana, Vicario Episcopal Territorial Cristo Sacerdote; padre Rafael de Brigard Merchán, psicólogo y director de comunicaciones de la Arquidiócesis de Bogotá; padre Leonel Narváez Gómez, Misionero de La Consolata y creador de las escuelas de paz y reconciliación -ESPERE-. Quiénes podrán participar Se podrán inscribir aquellos jóvenes menores de 28 años de edad, católico practicante, estar activo en alguna institucion de educación superior de Colombia. Fechas del curso El proceso académico se realizará todos los viernes en la modalidad virtual a través de la plataforma ZOOM de 7:00 p.m. a 9:30 p.m. y consta de 12 sesiones, iniciando este 9 de abril y se extenderá hasta el 25 de junio de 2021.. Inversión Tendrá un costo de $ 500.000.oo También los estudiantes podrán acceder a media beca o beca total, otorgada a consideración del consejo directivo de esta Institución. Contacto Sandra Sánchez, secretaria ejecutiva. Correo electrónico [email protected] / Celular: 317 886 16 85 Formulario de postulación on-line [icon class='fa fa-download fa-2x'] AQUÍ[/icon]

Jue 28 Ene 2021

¡JMJ Portugal 2023 ya tiene himno!

El 27 de enero, a las 11 horas de Lisboa, se hizo la presentación a través de las redes sociales de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), del himno oficial de este encuentro programado para 2023. “Hay prisa en el aire” es el nombre de la canción que fue escrita por el padre João Paulo Vaz y la composición musical es de Pedro Ferreira, ambos de la diócesis de Coimbra en Portugal, inspirada en el lema propuesto por el Papa Francisco para esta cita con la juventud del mundo entero: “María se levantó y partió sin demora” (Lc 1, 39). “Cuando me llamaron a comunicarme que nuestra canción había quedado elegida, fue una alegría muy grande. Las jornadas mundiales de la juventud son un marco muy importante en mi vida. Comprender que la letra que había hecho iba a ser cantada por el mundo entero fue una enorme alegría”, declaró el padre João Paulo Vaz, en el portal web oficial del evento. Este tema fue grabado en varias versiones. En portugués, por ser la lengua oficial del país que acogerá este evento, y la versión internacional en 5 idiomas: portugués, inglés, español, francés e italiano. Es importante recordar que la JMJ es un acontecimiento que congrega a los jóvenes del mundo entero con el Santo Padre. Tiene lugar todos los años en las diócesis el Domingo de Ramos y cada tres años hay una peregrinación a una ciudad elegida por el Papa. La primera tuvo lugar en Roma, en 1986, convocada por San Juan Pablo II, reuniendo cerca 300 mil asistentes y la última fue en Panamá, en 2019, con el lema: “He aquí la sierva del Señor; hágase en mí según tu palabra” (Lc 1,38), con una participación de 800 mil peregrinos, en donde el Papa Francisco convocó a los jóvenes del mundo entero a reunirse en Lisboa, Portugal, en el año 2023.

Lun 12 Oct 2020

Centralidad de la Niñez convoca a Jornada Nacional

Bajo el lema “completa la pieza que falta”, el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), a través del Programa Centralidad de la Niñez, realizará el próximo 6 de noviembre de 2020 una jornada nacional, que busca configurar una experiencia de trabajo en red en favor de la protección y bienestar de los menores. A esta iniciativa se han unido la Conferencia Episcopal de Colombia, la Conferencia de Religiosos de Colombia, la Confederación Nacional Católica de Educación (CONACED) y World Visión Colombia, quienes hacen un llamado a todas aquellas personas vinculadas con la niñez y adolescencia, para que participen este día, a partir de las 09:00 a.m., en un ejercicio de construcción colectiva y de reflexión. Según lo han manifestado sus organizadores, se trata de poder articular un trabajo “mucho más sistemático y sostenible, sinodal y ecuménico, estratégico y pastoral, compartido y consistente en favor de niños, niñas y adolescentes”, por ello hacen extensiva la invitación a agentes pastorales, sacerdotes, religiosas, docentes de escuelas católicas, catequistas, líderes evangélicos y organizaciones afines a este trabajo. Dinámica de las jornadas El evento se organizará en dos segmentos. En la mañana se realizará una conferencia central a cargo de ponentes internacionales vinculados con experiencias eclesiales e interreligiosas de trabajo en red. El segundo momento, durante la tarde, corresponderá al trabajo en mesas temáticas, constituidas de la siguiente manera: Mesa 1: Niñez migrante, trabajadora y en situación de calle Mesa 2: Víctimas de conflicto Mesa 3: Pacto Global educativo Mesa 4: Protección de niños, niñas y adolescente Mesa 5 Teología y espiritualidad Mesa 6: Derechos de la niñez, incidencia y diálogo ¿Cómo participar? Los interesados podrán inscribirse haciendo clic en este enlace: [icon class='fa fa-download fa-2x'] Gran Jornada Nacional[/icon] Una vez matriculado se le estará enviando en el transcurso de estos días su carta credencial, materiales de trabajo e indicaciones respectivas así como también el enlace de ingreso. Este proceso de inscripción estará abierto hasta el próximo 30 de octubre. Fuente: Of. comunicaciones del CELAM

Mar 25 Ago 2020

Ante las masacres, ¡Sí a la vida!

Por: Mons. Víctor Manuel Ochoa Cadavid - Deseo entrar en el tema complejo que nos afecta en estos días, en todo Colombia. Las masacres en las cuales han perdido la vida muchas personas, jóvenes y también adultos. Han sucedido hechos terribles y abominables contra la vida humana, primero entre nosotros en Banco de Arena y la zona rural de Cúcuta, en Campo Dos, Tibú (Norte de Santander), en Cali (Valle del Cauca) y en Samaniego (Nariño). Tristes imágenes aparecen ante nuestros ojos, de tantas vidas humanas sacrificadas inútilmente, unidas al dolor inmenso de sus familias y amigos. También tenemos ante nosotros el gran número de víctimas humanas en el Área metropolitana de Cúcuta, más de 200 desde el inicio del año y la muerte de personas que tienen una figuración o trabajo en el campo social, los llamados líderes sociales que han sido asesinados. Es necesario, desde nuestros espacios, levantar la voz en defensa de la vida humana, de los derechos humanos y fundamentales, el primero el derecho a la vida. No podemos permanecer en silencio ante tantas muertes, ante tantas circunstancias y hechos donde se roba el primer derecho de la persona humana, la vida. La Iglesia defiende y promueve la dignidad de la persona humana, pero sobre todo afirma el derecho a la vida -completa-, es decir desde su concepción hasta la muerte natural. Es la base y el fundamento de todos los demás derechos de la persona humana (cf. Congregación para la Doctrina de la Fe, Instrucción Donum Vitae, 22.02.1987). Los invito a repasar algunos conceptos, desde nuestra fe, que son importantes y que necesitamos fortalecer, en orden a comprender mejor lo que es la vida humana. El hombre es una creatura salida de las manos de Dios, con una bella figura el libro del Génesis nos enseña que el hombre salió de las manos del Creador, que con sus manos lo modeló a su imagen y semejanza (Gen 1, 26ss). Recibió el hombre de Dios su vida, su fuerza, el espíritu de vida que le anima y mueve (Cf. Gen 2, 7), pero al mismo tiempo este hombre es frágil, limitado en su ser y sus acciones, pues la muerte le ronda, como fruto del pecado y de su opción por no cumplir la voluntad de Dios (Cf. Gen 3, 19ss y Job 14, 7-10). El hombre, como creatura de Dios tiene un fin, una tarea que cumplir y entra en este designio amoroso del Creador (Cf. Gen 1, 11ss). La vida humana es breve, con una figura bíblica – es como un soplo -, como – una sombra- (Job 14, 1; Salmo 144, 1). El hombre hace parte de este plan de Dios, por ello cada vida humana es irreemplazable y, según el deseo creador del Altísimo tiene una tarea y una vocación fundamental, que completará su plenitud en Dios, en la eternidad. El hombre tiene una vocación de infinito y está llamado a vivir en Dios, dice Santo Tomás de Aquino (Ordo ad Deum, S.Th. I-II, q. 4, a. 4). Mirando su origen, su tarea, su dirección y misión en el plan de Dios, nos duelen las muertes de los hombres, es un daño irreparable y que nos afecta. La vida humana es sagrada, es una verdad que conocemos y que tenemos que continuar afirmando siempre, es necesario que respetemos siempre la condición de vida del ser humano. San Juan Pablo II, el gran profeta de la vida en nuestros tiempos nos enseñó: “La defensa de la vida humana es urgente” (San Juan Pablo II, Evangelium Vitae, n 3). En nuestros tiempos, especialmente en Colombia, contemplamos formas inauditas de ataque a la dignidad de la vida humana. En estas masacres que tratamos de rechazar y en otros muchos modos y circunstancias, la violencia, los asesinatos de líderes sociales, de personas de nuestro entorno, el aborto, la eutanasia. No podemos callar ante asesinatos selectivos y de la gran violencia que nos aflige. Por esto, cada noticia que nos llega de muertes, injustas y dolorosas, es motivo de gran preocupación para nuestra comunidad de fe. Tenemos que cambiar la mentalidad y no acostumbrarnos a la muerte, entender que estas vidas son irrepetibles, que cada vida, incluso una sola, tiene un valor absoluto. Uno de los obispos de Cúcuta, Mons. Jaime Prieto Amaya, nos decía una frase que ha quedado como epitafio de su tumba: “Cada vida es irrepetible, cada persona es irreemplazable, cada muerte es irreversible”. La violencia es degradación, este fenómeno que reaparece es un mal síntoma de nuestra realidad social, no es un fenómeno aislado, sino que es signo de la profunda crisis que nos afecta, nos tiene que interrogar profundamente a cada uno de nosotros, a nuestros gobernantes y a todas las instituciones, a cada uno de los miembros de esta comunidad. Vivimos en Colombia problemas sociales muy complejos, fruto de nuestra historia, de la falta de educación y oportunidades, de la falta de la justicia social y que tienen gran incidencia en nuestra comunidad: violencia familiar, narcotráfico, corrupción, grupos ilegales, contrabando, explotación de las personas. A estas duras realidades no podemos unir el desinterés por estas muertes indiscriminadas de personas, fruto de la acción de cualquiera que sea el actor violento. Es un momento dramático donde debemos levantar nuestra voz en defensa de los jóvenes y niños, de los niños no nacidos por causa del aborto, de los ancianos suprimidos con la eutanasia, con los asesinatos del crimen en las distintas ciudades y en nuestro San José de Cúcuta y municipios del área metropolitana. No podemos continuar contando muertos, como cifras estadísticas, en nuestro territorio y en el país entero. Esperamos también la precisa y puntual intervención de las autoridades en la defensa de la vida humana y en el esclarecimiento de estos tristes hechos. Tenemos que reaccionar, levantando nuestra voz y gritando ¡SÍ A LA VIDA! Es la defensa de un derecho fundamental de la persona humana, mucho más para aquellos que tenemos fe y reconocemos que cada hombre nace de la mano de Dios. No podemos agregar a muchas injusticias, a los abusos contra la persona humana por las condiciones sociales de pobreza, la violencia y la muerte. A los violentos, a los que asesinan, un llamado a la conversión y al respeto a la vida humana. Que no falte en este momento una palabra de aliento y de esperanza para las familias de quienes sufren por la muerte de sus hijos, familiares y amigos. San Juan Pablo II nos enseñaba que “Somos un pueblo de la vida y para la vida” (San Juan Pablo II, Evangelium Vitae, n. 6). Es necesario crear una cultura de la vida, donde brille con toda su fuerza el don de la creación de Dios, donde el hombre es el centro, pero también él tiene una gran responsabilidad con el creador, con la creación de Dios. Que todos, respetando nuestras vidas, tengamos la posibilidad de desarrollar ese proyecto que Dios nos ha entregado. ¡SÍ A LA VIDA! + Víctor Manuel Ochoa Cadavid Obispo Diócesis de Cúcuta

Mar 11 Ago 2020

Jóvenes colombianos usan la ‘fantasía del amor’ para llegar a sus abuelos

“Usen "la fantasía del amor" para estar cerca de sus abuelos, de los ancianos. Es importante la unión y la conexión con las raíces, pues, un árbol separado de sus raíces no crece, no da flores ni frutos. Lo que el árbol tiene de florido vive de lo que tiene sepultado”. Fueron las palabras del Papa Francisco a los jóvenes el domingo 26 de julio, fecha en que se celebró la memoria de los Santos Joaquín y Ana abuelos de Jesús. Respondiendo a este llamado y en tiempo de pandemia, la Conferencia Episcopal de Colombia, a través de la sección de juventud, invitó a los jóvenes a expresar su gratitud y cariño a los abuelos, manifestados con alegría a través de la música, cantos, poesía, abrazos y besos, para ello dispuso de las redes sociales, donde muchos jóvenes asumieron el reto propuesto. Fruto de esta invitación se elaboró un video donde se recogieron estos testimonios y al que se sumó también Monseñor José Roberto Ospina Leóngomez, obispo de Buga y Presidente de la Comisión Episcopal para el Estado Laical de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), quien saludo e impartió la bendición a todas las personas mayores. “Los jóvenes colombianos, obedeciendo al Santo Padre y usando la ‘Fantasía del Amor’, han tenido un gesto de ternura con sus abuelos y nos han hecho llegar las evidencias, las cuales queremos compartir con todos” comentó Sor Arelis Gaviria, directora encargada del Departamento del Estado Laical de la CEC. La religiosa animó para que en estos momentos de soledad y abandono que viven muchos adultos mayores, más por cuenta del confinamiento, las familias y amigos se acuerden de ellos y les brinden la protección y el cariño que merecen. Finalmente exhortó para que los jóvenes se vinculen a esta iniciativa, grabando un video con sus abuelos y lo compartan a través del Facebook de la Pastoral Juvenil de Colombia @PastoralJuvenilColombiana.

Vie 24 Jul 2020

Niños, jóvenes y adolescentes en esta Pandemia

Por: Mons. Carlos Arturo Quintero Gómez - Durante esta crisis mundial a causa de la pandemia, niños, adolescentes y jóvenes han tenido que confinarse, junto a sus padres, hermanos, adultos mayores y sus mascotas. Este encerramiento ha despertado en ellos, diversas emociones y una mezcla de sentimientos que los ha conducido a vivir en medio de la ansiedad, cuadros depresivos, al vaivén de la soledad, la incomprensión de los mayores, las desconfianzas y preguntas existenciales como: ¿Qué va a ser de mi vida? ¿Por qué este encerramiento? ¿Y mis sueños, metas e ideales? Algunos jóvenes se resisten a este aislamiento porque trae consigo frustraciones y dificultades para interactuar, incluso a muchos les cuesta estudiar, a través de la internet, lo que les ha llevado a desistir del estudio por considerar que la virtualidad los bloquea e impide el libre desarrollo de sus ideales. ¿Cómo ayudar a esta generación de los milenials y los centenials? ¿Cómo comprender sus sueños y animarles a vivir con pasión, sin desfallecer, entendiendo que aún pueden cumplir sus ideales? ¿Cómo estimularles a no dejar apagar en ellos su fe, su esperanza, su amor a Dios? ¿Cómo ayudarles a entender que Dios los ama y que esta crisis es una prueba? Tarea nada fácil, que exige de todos, compromiso, testimonio de vida y aprender a escucharles. Deberíamos entonces preocuparnos por los niños, traviesos por naturaleza, hiper activos y sensibles a los cambios, aunque terminan adaptándose, mejor que los adultos, muchas veces sin entender lo que ocurre. Preocuparnos por los adolescentes, que atraviesan por esta hermosa etapa de la vida, buscando afianzar su identidad, intensificando sus interacciones con sus pares y amigos, soñando la vida y discerniendo sobre el qué hacer. Es la edad de las relaciones en la que se forjan amistades, incluidas las redes sociales; hay una búsqueda de aprobación y deseo de participar en diversos colectivos. Y qué decir de la juventud, la edad de las decisiones, de las elecciones y de los riesgos. Todos estos valores, pueden llegar a congelarse en el tiempo y en el espacio, y traer consigo posibilidades de estancamiento, vidas que se pueden atrofiar y sueños que se pueden desmoronar. En muchos de ellos, se quebranta la alegría, se rompen los hilos de la confianza y la serenidad, se fracturan las relaciones, se esfuman los ideales. Y mientras esto ocurre en el corazón de muchos jóvenes, nuestra sociedad sigue impávida, preocupada por la reactivación económica, tan válido como la atención a los más desfavorecidos, pero debería también ser una ocasión para pensar la manera de acompañar a los niños, adolescentes y jóvenes. Desde la Iglesia, debemos pensar igualmente en los desafíos para la nueva evangelización, pues en estos tiempos muchos chicos, seguro se han ido enfriando espiritualmente, a pesar que en los hogares cristianos han intentado mantener viva la llama de la esperanza y el amor de Dios. La mejor manera de ayudarles es sin duda, con el buen ejemplo, escuchándoles, aconsejándoles, mostrándoles la verdad de la vida y el rostro misericordioso de Jesús. Como lo expresaba San Juan Bosco, es preciso aguantar y no enojarse; persuadir al niño en vez de amenazarlo, corregir al joven mejor que castigarle. De ahí la necesidad de “mantener un espíritu sereno, evitando las palabras hirientes, actuando con comprensión en el presente y esperanza en el futuro”. Decirle a nuestros niños, adolescentes y jóvenes, las palabras de Jesús que les llama: “no tengáis miedo” e invitarles a correr el riesgo por Jesús, modelo auténtico del joven, que todo lo puede e instarles a mantener vivo en sus mentes y en sus corazones, los sueños que desean y pueden alcanzar. Carlos Arturo Quintero Gómez Obispo de Armenia

Jue 5 Mar 2020

“¡Joven, a ti te digo, levántate!: Mensaje para JMJ 2020

En su mensaje para la Jornada Mundial de la Juventud 2020, que se celebrará el próximo domingo 5 de abril, Domingo de Ramos, a nivel diocesano, el Papa Francisco anima a los jóvenes del mundo a “levantarse”, a ponerse en marcha, para construir una sociedad sobre la base de la misericordia. En este sentido, retomando el tema de la JMJ 2022 de Lisboa, capital de Portugal,: «María se levantó y partió sin demora» (Lc 1,39), propone centrar la reflexión preparatoria en los textos bíblicos: “¡Joven, a ti te digo, levántate!” (cf. Lc 7,14), en el 2020, y “¡Levántate! ¡Te hago testigo de las cosas que has visto!” (cf. Hch 26,16), en el 2021. “Como podéis comprobar, el verbo común en los tres temas es levantarse. Esta expresión asume también el significado de resurgir, despertarse a la vida. Es un verbo recurrente en la Exhortación Christus vivit (Vive Cristo), que os he dedicado después del Sínodo de 2018 y que, junto con el Documento final, la Iglesia os ofrece como un faro para iluminar los senderos de vuestra existencia”, explica el Papa. “Espero de todo corazón”, agrega, “que el camino que nos llevará a Lisboa concuerde en toda la Iglesia con un fuerte compromiso para aplicar estos dos documentos, orientando la misión de los animadores de la pastoral juvenil”. Ver el dolor y la muerte El Papa alienta a los jóvenes a tener una mirada atenta y compasiva ante “tantas situaciones vividas por vuestros coetáneos”. “Y mi mirada, ¿cómo es? ¿Miro con ojos atentos, o lo hago como cuando doy un vistazo rápido a los miles de fotos de mi celular o de los perfiles sociales? Cuántas veces hoy nos pasa que somos testigos oculares de muchos eventos, pero nunca los vivimos en directo. A veces, nuestra primera reacción es grabar la escena con el celular, quizás omitiendo mirar a los ojos a las personas involucradas”, advierte el Papa. Ante esta realidad, el Santo Padre recuerda el valor de la cercanía y la manera como una mirada sincera, un gesto de amor y misericordia, una respuesta empática, puede dar fuerzas a alguien para que retome su vida, “porque fue mirado por alguien que quería que viviera”. Tener compasión “Con frecuencia, las Sagradas Escrituras expresan el estado de ánimo de quien se deja tocar “hasta las entrañas” por el dolor ajeno. La conmoción de Jesús lo hace partícipe de la realidad del otro. Toma sobre sí la miseria del otro”, se lee en el mensaje en el que el Papa insiste a los jóvenes “no dejarse robar la sensibilidad”. “Ciertas realidades de la vida solamente se ven con los ojos limpios por las lágrimas» (Christus vivit,76). Si sabéis llorar con quien llora, seréis verdaderamente felices. Muchos de vuestros coetáneos carecen de oportunidades, sufren violencia, persecución. Que sus heridas se conviertan en las vuestras, y seréis portadores de esperanza para este mundo. Podréis decir al hermano, a la hermana: “Levántate, no estás solo”, y hacer experimentar que Dios Padre nos ama y que Jesús es su mano tendida para levantarnos”. Finalmente, Francisco invita a los jóvenes a hacer surgir sus sueños y a través de ellos, “proponed al mundo, a la Iglesia, a los otros jóvenes, algo hermoso en el campo espiritual, artístico, social. Os lo repito en mi lengua materna:¡hagan lío!Haced escuchar vuestra voz”. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Lea Mensaje JMJ 2020 completo [/icon]

Jue 31 Oct 2019

Alianza con la Orden de Malta beneficia comunidades vulnerables del país

Por estos días visitó la sede del Episcopado una delegación de la Orden de Malta Colombia, quienes, a través de una alianza con esta institución, han venido realizando donaciones para beneficiar a la población vulnerable. La ayuda consiste en la importación de tres productos: Manna Pack, que es un complemento nutricional; sillas de ruedas; y medicamentos, estas donaciones se canalizan a través del Departamento de Estado Laical de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) y son distribuidas a las jurisdicciones que lo soliciten. Juan Guillermo Gutiérrez Toro, presidente de la Orden de Malta en Colombia, durante el encuentro con un grupo de beneficiaros, resaltó la importancia de esta alianza y manifestó su interés por aumentar las importaciones de ayuda para ampliar la cobertura en todo el país. “El objetivo es crear un cubrimiento nacional con todas las jurisdicciones. Para este fin, estamos construyendo un proyecto que nos permita determinar las necesidades específicas en cuanto a estos productos y, de esta manera, plantear un plan articulado para la entrega de estas ayudas”. La Orden de Malta es una orden religiosa seglar vinculada con la Iglesia católica, fundada en Jerusalén en el siglo XI como orden hospitalaria, que prestaba asistencia a los peregrinos en el marco de las cruzadas y a la comunidad más vulnerable. En la actualidad tiene su sede en Roma.