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jóvenes

Vie 5 Oct 2018

Sínodo: Se debe escuchar a los jóvenes

Durante la segunda jornada del Sínodo de los obispos, el Papa Francisco invitó a los padres sinodales a reflexionar acerca de la necesidad de escuchar, tener actitudes empáticas y ofrecer a los jóvenes una Iglesia renovada, así lo destacó Monseñor Omar Mejía Giraldo, obispo de Florencia, en información que nos ofrece desde Roma. Presentamos a continuación aspectos que resalta monseñor Mejía Giraldo, de las intervenciones ofrecidas por el Papa Francisco y algunos de los padres sinodales. * Escuchar:Se trata de un problema teológico y no simplemente pedagógico. Fue una palabra que, en las intervenciones de los padres sinodales apareció reiterativamente y el Papa Francisco la resaltó dándole relevancia. Escuchar a los jóvenes se convierte entonces en un imperativo categórico para la Iglesia de hoy. * Empatía:Es necesario construir una Iglesia empática; es decir, una Iglesia que acorta distancias, que le dice no al paternalismo y al clericalismo; una Iglesia cercana a la juventud. * Aquello descartado se ha vuelto la piedra angular.Fue una expresión de uno de los padres sinodales, pero que el Papa ha querido resaltar como un programa realmente importante para la Iglesia de hoy en la misión de evangelizar a los jóvenes. Otros aspectos a resaltar: * Monseñor Roberto Ospina, obispo de Buga, quien participa en el Sínodo en representación de Colombia, cerró la jornada con una intervención invitando a creer en los jóvenes, dijo: “Dios es el primero en creer en la juventud, si Dios ha creído en los jóvenes, nosotros debemos también creer ellos”, afirmó. "Dios con la respuesta de los jóvenes nos ha traído salvación. A veces dudamos de creer en ellos; quizás unos responderán y otros no, pero el primero en creer en los jóvenes ha sido Dios. Creamos en ellos": mons. José Roberto Ospina LeonGómez, Obispo de @DiocesisdeBuga #synod2018 pic.twitter.com/j6sPBGpyd0 — Episcopado Colombia (@episcopadocol) 5 de octubre de 2018 * Es necesario educar la juventud para la vivencia de la virginidad. Palabras de uno de los padres sinodales, citando a Santa Clara de Asís: “Cuando has amado a Dios, serás casto; cuando lo has tocado te haces puro; cuando lo has aceptado te vuelves virgen”. * En Irak no existe una teología propiamente especulativa, allí ha sido la liturgia la que ha preservado la fe; de ahí la gran importancia de cuidar, amar, respetar y fortalecer la liturgia como medio para la evangelización de los jóvenes. * Se resaltó también la importancia de crear espacios de silencio como camino de evangelización con los jóvenes. “Es necesario que los jóvenes aprendan a tener momentos de silencio, donde sientan que es un espacio dedicado sólo a Dios”. A través del silencio se ha dado la curación y sanación interior de la situación existencial de muchos jóvenes. * Los jóvenes quieren una Iglesia renovada y fresca; una Iglesia que les dé respuestas claras a sus interrogantes, una Iglesia cercana y fraterna. * Los jóvenes nos exigen renovación pastoral. * Es necesario que nos tomemos en serio a los jóvenes y les transmitamos la fe más por atracción, testimonio y credibilidad, que con discursos e ideas. Foto: Tomada de Internet

Jue 4 Oct 2018

La lglesia y los jóvenes: un intercambio donde ambos se benefician

“El Sínodo debe ser un ejercicio de diálogo, sobre todo entre los que participan en él. Y el primer resultado de este diálogo es que cada uno se abre a lo nuevo, a cambiar de opinión gracias a lo que ha escuchado de los demás”, añadió Francisco subrayando que sentirnos libres para acoger y comprender a los demás, y así cambiar nuestras creencias y posiciones; “es un signo de gran madurez humana y espiritual”. Además, dijo que “Vale la pena sentirse parte de la Iglesia o entrar en diálogo con ella; vale la pena tener a la Iglesia como madre, como maestra, como hogar, como familia, que a pesar de las debilidades y dificultades humanas, es capaz de resplandecer y transmitir el mensaje eterno de Cristo”. Desde Nicaragua, Mons. Herrera Mons. Carlos Enrique Herrera, obispo de Jinotega, Nicaragua, reflexionó sobre la homilía del Papa en la apertura del sínodo, cuando dijo que los jóvenes "piden y reclaman a la Iglesia una entrega creativa, una dinámica inteligente, entusiasta y esperanzadora, y que no los dejen solos en manos de tantos mercaderes de muerte que oprimen sus vidas y oscurecen su visión, que necesitan dialogar con la Iglesia". Mons. Herrera dijo que en Nicaragua, ante la violencia que sufren los jóvenes, la Iglesia ha recurrido ante las autoridades para que no los atropellen y los obispos expresan a través de sus homilías, en su trabajo pastoral piden por la dignidad de la persona, la libertad de expresión, además tuvo palabras de aliento para la juventud nicaragüense. ESCUCHAR EL AUDIO Desde Cuba, Mons. Beyra Por su parte el obispo de Santísimo Salvador de Bayamo y Manzanillo, Cuba, Mons. Álvaro Beyra Luarca, al mencionar la homilía del Papa del miércoles cuando dijo que lo que cada obispo escuchó de joven, “les hará bien volverlo repasar en el corazón recordando las palabras del poeta: «Que el hombre mantenga lo que de niño prometió» (F. HÖLDERLIN).” Mons. Beyra Luarca, dijo que en este sínodo el primer joven es el Papa, porque ser joven es ver al futuro, y él mira siempre al futuro. Además, el prelado expresó la emoción que por primera vez, va a la JMJ de Panamá una delegación de 400 chicos cubanos. ESCUCHAR EL AUDIO Fuente: Vatican News

Mié 3 Oct 2018

El Papa inaugura Sínodo de los jóvenes

“Que el Espíritu nos dé la gracia de ser Padres sinodales ungidos con el don de los sueños y de la esperanza para que podamos, a su vez, ungir a nuestros jóvenes con el don de la profecía y la visión”: fueron las palabras del Papa Francisco en la misa inaugural de la XV Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, que centrará sus trabajos en “Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional”, tema de la Asamblea. Obispos capaces de soñar y contagiar esperanzas En una soleada plaza de San Pedro, Francisco se dirige a los presentes congregados invocando, al comienzo de la homilía, al Espíritu Santo para que, en este "momento de gracia" que es el Sínodo, "ayude a hacer memoria y a reavivar las palabras del Señor" y suscite "el ardor y la pasión por Jesús". “Memoria que puede despertar y renovar en nosotros la capacidad de soñar y esperar. Porque sabemos – asegura el Papa - que nuestros jóvenes serán capaces de profecía y visión en la medida en que nosotros, ya adultos o ancianos, seamos capaces de soñar y así contagiar y compartir los sueños y esperanzas que llevamos en nuestros corazones”. No dejarse asfixiar por los propios límites El Papa reza al Espíritu para que los Padres sinodales no se dejen "asfixiar y aplastar por los profetas de calamidades y del infortunio" o por sus propios "límites, errores y pecados", sino que sean capaces "de encontrar espacios para inflamar el corazón y discernir los caminos del Espíritu". Afectuosa bienvenida a los obispos de China Continental Después de haber dado una "cálida bienvenida" a los dos obispos de China Continental que "por primera vez" pueden participar en un Sínodo, el Papa espera que este "nuevo encuentro eclesial" pueda ser "capaz de ensanchar horizontes, dilatar el corazón y transformar aquellas estructuras que hoy nos paralizan, nos separan y nos alejan de nuestros jóvenes, dejándolos a la intemperie y huérfanos de una comunidad de fe que los sostenga, de un horizonte de sentido y de vida (cfr. Exhortación a los Apóstoles Evangelii Gaudium, 49)". Romper con el conformismo del "siempre ha sido así" "La esperanza nos desafía -dice el Papa-, nos moviliza y rompe el conformismo del ‘siempre ha sido así’, y nos pide que nos levantemos para mirar de frente el rostro de los jóvenes y las situaciones en las que se encuentran. La misma esperanza nos pide que trabajemos para revertir las situaciones de precariedad, exclusión y violencia a las que están expuestos nuestros muchachos. No dejar solos a los jóvenes en manos de mercantes de muerte Los jóvenes, fruto de muchas de las decisiones tomadas en el pasado, nos llaman a asumir junto con ellos el presente con mayor compromiso y a luchar contra lo que de alguna manera impide que sus vidas se desarrollen con dignidad. Nos piden y reclaman una entrega creativa, una dinámica inteligente, entusiasta y esperanzadora, y que ‘no los dejemos solos’ en manos de tantos mercaderes de la muerte que oprimen sus vidas y oscurecen su visión. Alertas ante la lógica de la autopreservación Francisco pide a los Padres sinodales que se escuchen unos a otros “para discernir juntos lo que el Señor está pidiendo a su Iglesia". Y esto – señala el Pontífice - requiere estar alertas y velar para que no prevalezca la lógica de la autopreservación y la autorreferencialidad, que termina convirtiendo en importante lo superfluo y haciendo superfluo lo importante". Escuchar a Dios, para no caer en posturas eticistas o elitistas Es necesario "escuchar a Dios, escuchar con él el clamor del pueblo; escuchar al pueblo, hasta respirar en él la voluntad a la que Dios nos llama" (cf. Discurso en la vigilia de oración de preparación al Sínodo sobre la Familia, 4 de octubre de 2014). Hay que evitar la "tentación de caer en posiciones eticistas o elitistas y también en la atracción por ideologías abstractas que no se corresponden nunca con la realidad de nuestro pueblo. La luz que alumbra el porvenir de los jóvenes El Papa cita el Mensaje a los jóvenes de Pablo VI al final del Concilio Vaticano II, en los años '60: "Durante cuatro años la Iglesia ha trabajado para rejuvenecer su rostro, para corresponder mejor al designio de su fundador, el gran Viviente, Cristo, eternamente joven. Y al final de esta impresionante "reforma de vida", se dirige a vosotros: es para vosotros, jóvenes, sobre todo para vosotros, que la Iglesia con su Concilio acaba de encender una luz, luz que alumbrará el porvenir, vuestro porvenir”. Y concluye: “ Padres sinodales, la Iglesia los mira con confianza y amor ”

Mar 2 Oct 2018

Colombia presente en el Sínodo sobre los jóvenes

A pocos días de iniciar el Sínodo de los Obispos que abordará el tema de los jóvenes y las vocaciones, las delegaciones de diferentes partes del mundo van llegando a Roma. Este es el caso de la delegación nacional que está compuesta por Monseñor Gabriel Ángel Villa Vahos, obispo de Ocaña; Monseñor Omar de Jesús Mejía Giraldo, obispo de Florencia; y Monseñor José Roberto Ospina Leongómez, obispo de Buga, quienes representarán a Colombia en este evento. Poco antes de partir a Roma, conversamos con Monseñor Gabriel Ángel Villa Vahos, quien también es presidente de la Comisión Episcopal de Ministerios Ordenados de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC). El prelado aseguró que viaja con grandes expectativas, no solo por el tema que se abordará, sino también porque es la primera vez que participa en un Sínodo. Ya entrando en material, Monseñor Villa Vahos, recordó que hay una triada que siempre ha sido prioridad en la acción de la Iglesia: fe, discernimiento y los jóvenes, aspectos que centrarán la reflexión de los padres sinodales. Monseñor Villa Vahos con una visión progresista, pero aterrizada recordó que la sociedad y en particular la juventud vive un cambio de época que resulta desafiante y apasionante y en el que los medios de comunicación son protagonistas e influyen en diferentes procesos culturales, como es el caso de la educación. El prelado aseguró que la Iglesia tiene que pensar en un aprovechamiento mayor de los medios de comunicación en función de los jóvenes. “No podemos satanizar la época, cada tiempo tiene sus potencialidades y dificultades. Es una oportunidad y un desafío para la Iglesia”, señaló. En relación al trabajo que realizarán en Roma, comentó que allí se darán las directrices necesarias, destacó que previo a este viaje se han preparado a través del documento Instrumentum Laboris, que se entregó previo al Sínodo. “En la mañana, en el aula común los padres sinodales podrán intervenir y por la tarde se organizará por grupos idiomáticos en los círculos menores”, comentó. Monseñor Villa Vahos recordó que la Iglesia tiene grandes esperanzas en los jóvenes y sus potencialidades. Invitó a no temer a Cristo, abrirle las puertas y confiar en él. Finalmente, animó a unirse en oración por el trabajo que realizarán los padres sinodales y que las conclusiones sean para el bien de los jóvenes del mundo, de América Latina y en particular de Colombia. El Sínodo El Sínodo de los Obispos es una institución permanente, creada por el Papa Pablo VI (15 de septiembre de 1965), en respuesta a los deseos de los Padres del Concilio Vaticano II para mantener vivo el espíritu de colegialidadnacido de la experiencia conciliar. El Papa Francisco, en su línea de abrir las puertas de la Iglesia y anunciar el Evangelio de la Alegría a todo el mundo, ha convocado para este año al Sínodo de los obispos con el tema: “Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional”. El Sínodo se realizará del 3 al 18 de octubre en Roma.

Lun 24 Sep 2018

Recordando el “Demos el primer paso”

Mons. Froilán Casas Ortíz - Por este mes de septiembre estamos recordando los colombianos la dicha de haber recibido y acompañado al papa Francisco en su viaje a nuestra patria. Nunca en nuestro terruño se había sentido un ambiente tan especial como el vivido los días del seis al diez de septiembre de 2017. Parecía que Colombia hubiera parado el cúmulo de crímenes y noticias horrendas, como que la presencia del Sucesor de Pedro hubiese desarmado los odios y las venganzas. Esos cinco días fueron como una era mesiánica; como que los anuncios de los profetas mesiánicos se hubiesen cumplido: “De las espadas forjarán arados, de las lanzas podaderas” Is 2, 4. Sí, por esos días se silenciaron las armas y como que el desarme de los corazones de los colombianos, permitió respirar la tan anhelada paz. No cabe duda, hay que leer los signos de los tiempos y con la presencia del papa Francisco, Colombia vivió la esperanza. Nuestro pueblo es creyente y el referente JESUCRISTO, de alguna manera está en el corazón de nuestros coterráneos. Colombia es un terreno propicio para seguir sembrando la Palabra de Dios. ¡Qué reto especialmente para nosotros los ministros ordenados! Cuidado con defraudar la esperanza y el hambre de Dios que se siente en Colombia. Ningún país como el nuestro es tan permeable a escuchar a Dios, pero a la par, es muy sensible cuando sus ministros no son ejemplo de vida. Hoy más que nunca se exige santidad, sobre todo en sus ministros. Nos quieren sí, pero nos quieren santos; claro, santos de carne y hueso, con nuestras debilidades pero al mismo tiempo, con la actitud de un Pedro arrepentido y que da señales de cambio, convirtiéndose en el más fiel seguidor del Maestro. El Santo Padre nos animó a seguir en la tarea hermosa de anunciar a Jesucristo, nos invitó a “soñar en grande”. Hermoso su discurso a los jóvenes en la plaza de Bolívar en Bogotá: “Por favor no se metan en el ‘chiquitaje’, no tengan vuelos rastreros, vuelen alto y sueñen grande”. Sí, siempre hacia adelante. Que los escándalos de unos pocos hombres consagrados, no nos desanimen, que ellos sean acicate para pensar en un futuro lleno de personas integrales, enamoradas de Jesucristo y comprometidos desde Él en el “empeño en reconocer al otro, en sanar las heridas y construir puentes, en estrechar lazos y ayudarnos mutuamente”. Palabras llenas de esperanza y cargadas de emotividad para ser los verdaderos artesanos de la paz, siendo los constructores de la justicia. Nos invitó el papa Francisco a “resolver las causas estructurales de la pobreza que generan exclusión y violencia”. No hay ninguna duda que la principal causa de la pobreza y la desigualdad es la injusticia; una injusticia marcada por la corrupción en todos los niveles, una injusticia que como un cáncer pandémico ha hecho metástasis en gran parte del cuerpo social colombiano. Nos hace falta más predicación del Evangelio a fin de que la gente capte lo horrorosa que es la injusticia, un pecado que clama al cielo. Nos invitó igualmente el Santo Padre a cultivar la cultura del encuentro en donde todos nos sintamos hermanos, ¡qué lindo mensaje! Las palabras del papa siguen sonando en nuestros oídos y su presencia que irradiaba a Jesús nos seguirá impulsando a tener la alegría de ser unos verdaderos cristianos, a vivir la “alegría del Evangelio” Evangelii Gaudium. Que María Santísima, nuestra madre, como en la mañana de pentecostés nos siga acompañando en esta tarea. + Froilán Casas Ortíz Obispo de Neiva

Lun 17 Sep 2018

El Papa celebrará la Misa inaugural del Sínodo sobre los jóvenes

El Papa Francisco celebrará, el próximo 3 de octubre, la Misa inaugural de la XV Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, dedicada al tema “los Jóvenes, la fe y discernimiento vocacional”. Así lo confirmó la Oficina de Prensa de la Santa Sede, precisando que la celebración se realizará a las 10:00 a.m. Concelebrarán con el Santo Padre solamente los miembros del Sínodo. El 15 de septiembre, el Vaticano anunció la lista de participantes del Sínodo de los Obispos, que se extenderá hasta el 23 de octubre. La lista está encabezada por el Papa Francisco, como Presidente del Sínodo. A continuación se encuentra el Secretario General, Cardenal Lorenzo Baldisseri; y luego figuran los presidentes delegados: el Cardenal Louis Raphael I Sako, Patriarca de Babilonia de los Caldeos, Jefe del Sínodo de la Iglesia Caldea (Irak); el Cardenal Desiré Tsarahazana, Arzobispo de Toamasina (Madagascar); el Cardenal Charles Maung Bo, Arzobispo de Yangon (Myanmar); y el Cardenal John Ribat, Arzobispo de Port Moresby (Papúa Nueva Guinea). La lista incluye luego al Relator General, a los Secretarios Especiales, a las comisiones de Información y Controversias. Más adelante figuran todos los Padres Sinodales, tanto aquellos de nombramiento pontificio, elegidos y ex officio; así como los colaboradores, auditores, consultores, asistentes y delegados fraternos de otras denominaciones cristianas. Fuente: ACIPrensa

Sáb 8 Sep 2018

Iglesia y Gobernación de Sucre unen esfuerzos para prevenir el suicidio

En una circular emitida por el obispo de Sincelejo, Monseñor José Clavijo Méndez, pidió a sus párrocos para que en las homilías dominicales dediquen un espacio a la reflexión de temas relacionados con la convivencia social, autocuidado, amor a la vida, valores en la familia y autoestima, como una forma de prevenir el suicidio. Más de 40 suicidios en lo corrido del año, llevaron a la Iglesia Católica y a la Gobernación de Sucre a asumir un compromiso de sensibilización para la prevención del suicidio en este Departamento “En nuestro Departamento durante los últimos años, con frecuencia se han generado casos de intentos de suicidio y suicidios consumados provocando una alerta en el tema de Salud Mental y Salud pública por lo que se hace necesario aunar esfuerzos, compromiso de prevención, vigilancia, acompañamiento y atención intersectorial”, reza la misiva. Esta comunicación firmada por el obispo de esta Jurisdicción, monseñor José Clavijo Méndez; el señor Ramón Quintero Lozano, secretario de Salud de Sucre, y el presbítero Juan José Sarmiento Cueto, delegado diocesano para la Pastoral de la Salud, va dirigida a distintos miembros de la Iglesia y a actores claves de la sociedad civil. La Iglesia y la Gobernación de Sucre acordaron conmemorar conjuntamente este lunes 10 de septiembre en Sincelejo, el Día Mundial de la Prevención del Suicidio, instituido en 2003 por la Organización Mundial de la Salud. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar circular[/icon] Fuente: Oficina de comunicaciones diócesis de Sincelejo

Mar 21 Ago 2018

El reto de la verdadera educación

Por: Mons. Víctor Manuel Ochoa Cadavid - Amigos lectores, deseo con ustedes afrontar un tema de vital importancia en el momento actual: el valor de la educación en la formación y crecimiento de nuestros niños y jóvenes. Vivimos un tiempo complejo, sometido a profundos cambios de orden cultural y tecnológico. En los últimos decenios la humanidad ha sufrido cambios inmensos en las capacidades tecnológicas y también de la comunicación. El hombre por la ciencia va teniendo cada vez más capacidades para enfrentar el mundo y disponer de bienestar, pero también ha entrado en una profunda crisis de valores y de falta de consistencia moral en sus hechos y comportamientos. El campo de la formación de los jóvenes y de sus principios de vida ha preocupado siempre a la Iglesia y ha comprometido en su tarea a los seguidores de Jesús, para fortalecer la escuela católica. La educación de los hijos hace parte de las tareas que no se pueden delegar ni entregar a otros sin asumir la propia responsabilidad de los esposos. En la transmisión de la vida, en la formación de una comunidad de vida en la mutua colaboración y en la educación de los hijos se concretan los altos valores a los cuales están llamados los esposos. Hoy hay muchas líneas o lecturas de la realidad social que busca arrancar a los esposos esta tarea de la educación de los hijos, entregando sus ideales, sus valores y líneas al Estado o a unos principios de presunta civilidad. La educación da razones de esperanza. El aprender las letras, los conocimientos, el saber humano no es el mero fundamento de la educación, no es el mero saber, es -sobre todo- el conocer a Dios y entender su respeto y el amor y la veneración que debemos darle. Enseña el libro de los Proverbios: “El inicio de la sabiduría es el temor de Dios” (Sap 9, 10). La primera verdad a la cual se enfrenta el hombre, desde niño, es la aceptación de Dios como creador y salvador del hombre, este es el gran reto que tienen quienes aplican las modernas teorías pedagógicas para educar y transmitir las verdades. El hombre creado por Dios, a su imagen y semejanza, está dotado de capacidades intelectuales y conocimiento que le permiten conocer y entender el plan de Dios para su existencia y, especialmente, para enfrentar el mundo con su discernimiento. El conocimiento y la ciencia son la base también del bienestar que debe procurar para su existencia. El saber, el conocer la naturaleza humana exclusivamente no son la base del conocimiento, el hombre está llamado también a conocer y amar los valores, las dimensiones trascendentes de la persona humana, que pasan más allá de lo que es meramente material. La Educación es una responsabilidad de los padres: A veces olvidamos esta verdad y este principio; la formación de los niños y de los jóvenes depende de sus padres, ellos son los primeros responsables de conocer la forma, el contenido, los métodos que se apliquen para la formación de los niños. No puede entregarse a otros esta tarea, si bien tiene que respetarse el trabajo de los profesores, los contenidos, la orientación, las grandes ideas y contenidos de la formación de los jóvenes tiene que ser supervisada con mucho cuidado por los padres. La educación comienza en los hogares, con la transmisión de los valores de la autoridad, de la honestidad, de los principios que rigen la vida de los hombres. El educar a los niños y jóvenes tiene que superar lo meramente humano, el solo conocimiento de las cosas de este mundo (sea la ciencia, sean las relaciones espacio corporales del hombre, sean las relaciones sociales entre las personas). El conocimiento hoy es inmenso, el hombre conoce tanto como nunca ha podido conocer y esta sabiduría está al alcance de todos con las modernas tecnologías. Es allí donde está el gran reto para la educación, una formación para asumir con libertad y en el respeto de la voluntad de Dios la vida y sus realidades. La escuela es uno de los dones preciosos de la comunidad humana. De la educación y de su calidad, de sus principios altos de moralidad y ética, depende el futuro de la humanidad y de nuestra comunidad concreta: Esta es la razón de la presencia de muchas comunidades religiosas y de la Iglesia misma en la tarea educativa. Hacer resplandecer el alto valor y los principios de la humanidad, de la alta dignidad de la persona humana. El gran reto está en buscar que las actividades que se realicen en la educación fortalezcan valores humanos y espirituales, que lleven a que el hombre busque siempre los bienes supremos de su existencia, que de verdad asuman los grandes principios de la existencia. Preguntémonos cuales son los valores que hoy se transmiten a los jóvenes y niños: ¿De verdad prevalecen los grandes valores?, ¿Prevalece la dimensión espiritual sobre lo material y el mero bienestar humano? Es real que tenemos una gran crisis de valores, tenemos situaciones de inmoralidad y de incoherencia en nuestra sociedad en los momentos actuales, busquemos todos fortalecer la comunidad humana desde los grandes valores de la fe. ¿Cómo son formados nuestros jóvenes? En nuestra Diócesis, estamos en la ESCUELA DE JESÚS, una escuela que nos lleva a la verdad, que nos muestra el camino de Dios, un camino donde conocemos a Dios por su PALABRA y comprendemos la Buena Noticia del Evangelio. + Víctor Manuel Ochoa Cadavid Obispo de Cúcuta