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sínodo

Vie 19 Nov 2021

Pautas para vivir sinodalmente el Ciclo de la Manifestación del Señor

La Comisión Central del Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano (SPEC), para la animación del Sínodo 2021-2023 pone a disposición de los creyentes estas pautas que servirán de apoyo para “hacer concreta la vivencia de la espiritualidad en esta coyuntura eclesial, de la mano de la Familia de Nazaret, primera Iglesia doméstica y sinodal”. En la presentación, el secretario general de la Conferencia Episcopal, monseñor Luis Manuel Alí, expresa que se trata de un documento que ofrece fundamentos bíblicos y patrísticos, orientaciones pastorales y un subsidio celebrativo para el Adviento, la Solemnidad de la Inmaculada Concepción, la Navidad y el fin e inicio del año civil. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar pautas[/icon]

Sáb 6 Nov 2021

Hacia una Iglesia sinodal (IV)

Por: Luis Fernando Rodríguez Velásquez - San Vicente de Lerins, nacido en Toulouse, Francia, y fallecido en el 450, monje declarado doctor de la Iglesia, afirmó que: “Lo propio del progreso es que la misma cosa que progresa crezca y aumente, mientras lo característico del cambio es que la cosa se muda y se convierta en algo totalmente distinto (…) Es también esto mismo lo que acontece con los dogmas cristianos: las leyes de su progreso exigen que éstos se consoliden a través de las edades, se desarrollen con el correr de los años y crezcan con el paso del tiempo” (San Vicente de Lerins, presbítero. del primer conmonitorio. Oficio de lectura viernes de la XXVII). El Papa Francisco, en el 2021, afirmó también, retomando palabras del Padre Congar que “No hay que hacer otra Iglesia, pero, en cierto sentido, hay que hacer una Iglesia otra, distinta”. La pregunta común que todos nos podemos hacer es ¿para qué servirá este ejercicio sinodal, para hacer otra Iglesia? Al final de la intervención del Papa en el encuentro de apertura del Sínodo en Roma, nos invita a “no dejarnos abrumar por el desencanto”. Esto es muy claro, pues en el ejercicio que se va al realizar, que ciertamente no es nuevo, a veces puede estar latente el sentimiento de desánimo por los resultados que pueden darse en la fase de consultación sinodal. Comparto una sencilla metodología, de manera que haya motivación para el trabajo y se logre llegar a conclusiones pertinentes y aplicables, a nivel particular y a un nivel global. Sugiero, antes que todo, que se parta de la realidad local, y cuando hablo de local, es la parroquia o grupo de interés primario, para pasar luego al grupo de interés secundario que es la Arquidiócesis, y posteriormente en el grupo de interés terciario que es la Iglesia Universal, pero sin olvidar que a la manera de los discos dentados de un reloj, el del segundero, el del minutero y del horario, los tres se inter relacionan y si uno falla, todo el reloj se detiene o atrasa o adelanta. Lo mismo en la Iglesia, y el ejercicio sinodal, teniendo en cuenta que la parroquia, la diócesis y la Iglesia Universal, tiene cada una un fin propio, todos se inter relacionan de manera que lo que se haga en la parroquia, si bien es cierto que el primer beneficiario será la misma parroquia, este beneficio y las reflexiones que se hagan, deberán tener una mirada más amplia, convencidos de que lo poco o mucho que se haga en cada porción de la Iglesia, es valioso y necesario y tendrá efectos en la Arquidiócesis y en la Iglesia Universal. En definitiva, el ejercicio sinodal nos hará entender mejor que hacemos parte de un proceso sistémico, donde todos somos necesarios. El Papa lo presenta cuando nos dice que “estamos en la misma barca”. ¿Y cómo responder a las preguntas que nos van a plantear? No se trata de responder con discursos elaborados o teóricos y alejados de la realidad. Se trata es de responder desde la experiencia vida de cada persona, grupo y comunidad. El itinerario sinodal será un espacio para realizar un auto examen a partir de lo que en el campo civil se ha denominado el DOFA, esto es, un acercarnos a las debilidades, oportunidades, fortalezas y amenazas que en cada momento y situación se puede estar viviendo en la Iglesia. Es reconocer lo que como persona, servidor, ministro y comunidad eclesial tenemos como debilidades y fortalezas, y también como en el mundo en que se vive, se pueden encontrar oportunidades y amenazas. Sugiero que se tengan en cuenta estos tips para que las reflexiones sean realmente motivadoras y aportantes. Un tip final: hay que dejar espacio al Espíritu Santo en los diálogos, en la escucha y el discernimiento. Con el Papa decimos: “Ven Espíritu Santo, dispón nuestros corazones a la escucha”. + Luis Fernando Rodríguez Velásquez Obispo Auxiliar de Cali Lea también: Por una Iglesia sinodal (I) [icon class='fa fa-download fa-2x'] LEER AQUÍ[/icon] Hacia una Iglesia sinodal (II)[icon class='fa fa-download fa-2x'] LEER AQUÍ[/icon] Hacia una Iglesia sinodal (III)[icon class='fa fa-download fa-2x'] LEER AQUÍ[/icon]

Mié 3 Nov 2021

“Pónganse en camino” (Lucas 10,3)

Por: Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía - El fenómeno de las migraciones masivas de pueblos enteros es un alarmante signo de estos tiempos. Colombia lo está viviendo, con inesperados flujos que atraviesan todas sus fronteras. El mapa demográfico del planeta se transforma en inmensas caravanas y riesgosas travesías. Estas enormes movilizaciones internacionales y las mismas grandes movilizaciones ciudadanas que se vienen dando en calles y plazas dentro del país, nos obligan a pensarnos como conjunto humano. Más aún cuando la comunicación por redes y medios visualizan en tiempo real lo que ocurre en cada lugar. O cuando la pandemia, con su expansión y confinamiento, con la vacunación y la reactivación progresiva, pone al desnudo que somos una misma humanidad, identificada en la igual fragilidad, pero con abismal desigualdad de condiciones y oportunidades. El mundo es planeta, humanidad y vida que a todos pertenece y a todos nos requiere. El pasado nos puede parecer lejano y lento, pero el presente tiene cara de conjunción y de síntesis, de celeridad y de necesaria apertura a la corresponsabilidad, a la movilización de las consciencias y voluntades hacia propósitos planetarios. Porque el futuro depende de nuestra capacidad de conjugarnos en tiempo, espacio y modelos de vida justos y equilibrados. No sin razón las nuevas generaciones, la juventud mundial, es el sector poblacional que más está reclamando cambios y transformaciones, para no dejarse robar el futuro de sus vidas por los poderes actuales, que acumulan dinero y depredan recursos y vidas humanas, sin acogerse a límites éticos. La realidad misma nos exige ese caminar juntos que la Iglesia llama Sínodo y que la humanidad define como inclusión y ecosistema. El tercer Evangelista, Lucas, ve en los 72 discípulos que envía Jesús junto con los 12, la unión del nuevo Israel, la Iglesia, con todos los pueblos de la tierra. Si la cifra de los 12 evoca al pueblo de Israel, la cifra de los 72, que solo trae el evangelio de Lucas, evoca a los pueblos gentiles o paganos. A la Iglesia y a la humanidad, a Israel y a todas las naciones de la tierra, nos dice Jesús en esta hora de la historia: “¡Pónganse en camino!”. Es la orden de marcha que asumimos como divisa en este tiempo de proceso sinodal que convoca a la Iglesia a reformarse y a configurarse de manera completa, como Cuerpo habitado por el Espíritu Santo, con el que ha sido bautizada por el mismo Jesús. Rehaciéndose con estilo bautismal y sinodal, como fue en sus inicios, con Jesús (Lucas 10) y con las comunidades apostólicas (Hechos 15), la Iglesia convoca a la humanidad a superar fronteras y barreras, excesos y abusos, exclusiones y violencias, para caminar juntos y darnos “una segunda oportunidad” sobre la tierra. El camino de la vida, con la fe que anuncia a Jesús y con la luz que Él enciende en nosotros, se transforma, no en una curva que asciende y desciende para morir, sino en un vivir progresivo y ascensional en el amor, hasta hacerse población total a Dios. Caminar juntos con Jesús e ir “a donde pensaba ir Él”, precediéndolo, anunciándolo, testimoniándolo, es la “movilización” misionera de la historia: la que permitirá que el amor convenza al mundo de algo: que es posible vencer con Jesús el odio, la mentira, la codicia, el pecado, la culpa y a la misma muerte. Que el secreto de la victoria se llama Cruz y Resurrección, caminando juntos con Jesús. Noviembre se inicia con la solemne asamblea de Todos los Santos, la asamblea del Cielo, como señal de vida que se absorbe a la muerte, conmemorando al día siguiente, el dos de noviembre, a Todos los Difuntos. Es un llamado a que recuperemos el don bautismal de la Vida Eterna, para que amemos el don sinodal de la vida temporal, sin jamás permitirnos interrumpirla con la manipulación humana de la muerte. Recuperar el amor por la vida y el respeto por la muerte es lo menos que la Iglesia puede suplicar a Dios para la humanidad y el primer paso ético para que podamos caminar juntos. + Darío de Jesús Monsalve Mejía Arzobispo de Cali

Vie 29 Oct 2021

Ampliada la fase diocesana del proceso sinodal hasta agosto de 2022

A través de un comunicado la Secretaría General del Sínodo ha informado que se prorroga hasta el 15 de agosto de 2022, la entrega de la síntesis de las consultas al Pueblo de Dios, previstas para la fase inicial diocesana del Sínodo. Según lo señala el mensaje, esto obedece a las múltiples solicitudes hechas por parte de quienes consideran que es importante realizar esta consulta con más calma para dar una "mayor oportunidad al Pueblo de Dios de tener una auténtica experiencia de escucha y diálogo". De ahí la decisión de la prórroga - afirma la nota- que coincide con la propia identidad del Sínodo, es decir, de "una Iglesia sinodal que es una Iglesia que escucha" y busca siempre el bien. Por lo tanto, según lo establecido por el Consejo Ordinario del Sínodo de los Obispos, habrá tiempo hasta el 15 de agosto de 2022 para presentar las síntesis de las consultas de las Conferencias Episcopales, las Iglesias Orientales católicas sui iuris y otros organismos eclesiales. Es importante observar que la Secretaría General del Sínodo de los Obispos abrió la primera fase diocesana del proceso sinodal los días 9 y 10 de octubre en el Vaticano y el 17 de octubre en las Iglesias particulares, sobre el tema “Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión”, este camino sinodal terminará en su totalidad en el 2023. De hecho, recordamos que el tiempo disponible a partir de octubre de 2021 sirve, en esta fase diocesana que precede a la continental y universal, para una consulta capilar, en la escucha de la totalidad de los bautizados, con las herramientas que proporciona la propia Secretaría del Sínodo. A cada obispo y a cada Conferencia Episcopal, le corresponde entonces la tarea de iniciar caminos que confluyan en el "Encuentro Pre-sinodal", y luego en una síntesis ponerlas a disposición y conocimiento de la Secretaría del Sínodo. Leer comunicado [icon class='fa fa-download fa-2x'] AQUÍ[/icon]

Vie 22 Oct 2021

Episcopado convoca a la Vida Consagrada a orar por el proceso sinodal

Luego de haberse dado la apertura oficial del itinerario sinodal convocado por el Papa Francisco, la Conferencia Episcopal de Colombia, convoca a los miembros de los Institutos de Vida Consagrada, a adelantar una campaña de oración y acompañamiento para animar este caminar que se extenderá hasta el 2022. Así lo dio a conocer el secretario general de la Conferencia Episcopal, monseñor Luis Manuel Alí Herrera, quien a través de una carta enviada a las consagradas y consagrados del país, recomienda realizar esta acción en todos los entornos católicos, materializándola en dos importantes momentos: 24 horas de Adoración Eucarística y la Adoración Perpetua de la Eucaristía. “Para “caminar juntos” a la escucha del Espíritu Santo necesitamos orar. No hay camino sinodal sin la oración personal y comunitaria. La oración dispone nuestro corazón a la escucha de los demás y nos ayuda a discernir la acción del Espíritu Santo en el mundo”, resalta la misiva. Previo parecer y orientaciones del Obispo del lugar, las comunidades religiosas podrán elegir la opción más conveniente, para desarrollar estas jornadas de oración. “Así podrán vincularse de manera activa a este fascinante y hermoso Kairós eclesial”, puntualiza la comunicación.

Lun 18 Oct 2021

Caminando con María, Diócesis de Pasto inició fase diocesana del Sínodo

La Diócesis de Pasto dio inicio a la fase diocesana del Sínodo con una Solemne Eucaristía, presidida por Mons. Juan Carlos Cárdenas Toro, que se realizó en la Catedral Sagrado Corazón de Jesús, este domingo 17 de octubre, a la cual asistieron sacerdotes de varias parroquias de la ciudad de Pasto, religiosos, religiosas y una amplia participación de laicos y autoridades civiles y militares. La preparación para iniciar este camino sinodal, se hizo el sábado 16 de octubre, mediante una gran procesión en la cual, la patrona de nuestra diócesis, Nuestra Señora de la Merced, recorrió los barrios periféricos de la ciudad en un trayecto que duró alrededor de 15 horas continuas, iniciando a las 8:00 a.m. y terminando hacia la medianoche. El lugar de inicio fue el Seminario Mayor Los Sagrados Corazones, donde Mons. Juan Carlos Cárdenas Toro, realizó la oración inicial del Santo Rosario que motivó a los peregrinos durante todo su andar, porque hubo lluvias reiteradas y hasta un temblor, pero ello no fue impedimento para avanzar con fe y alegría. De esta manera, esta experiencia fue una verdadera peregrinación en la cual, las comunidades acompañaban el recorrido de la Virgen María durante el tránsito por su territorio parroquial hasta entregarla a la siguiente parroquia en la cual otro nuevo número de fieles aguardaba para este anhelado encuentro. Se espera, afianzar la vida comunitaria y emprender juntos este camino, para escuchar a todos, en los espacios de participación que se ha organizado para los siguientes meses en las parroquias y vicarías de la Diócesis de Pasto. Fuente: Of. comunicaciones Diócesis de Pasto

Vie 15 Oct 2021

Hacia una Iglesia sinodal (III)

Por: Mons. Luis Fernando Rodríguez Velásquez - Cuando se habla de sinodalidad eclesial como experiencia en la que caminamos juntos buscando un mismo fin, es necesario tener en cuenta algunas consideraciones. La primera, es que esta concepción no es nueva en la Iglesia. Desde sus mismos orígenes las comunidades cristianas, en torno, primero de su maestro, Cristo, y luego, en torno de los apóstoles, presididos por Pedro, trabajan juntos, hacen discernimiento juntos para resolver conflictos, etc. La segunda, más recientemente, el Concilio Vaticano II, propone la elocuente figura de la Iglesia como Pueblo de Dios, donde se invita a replantear los principios de la Iglesia netamente jerárquica, para apropiarnos de la imagen de una Iglesia servidora, en donde todos los miembros del Pueblo de Dios somos iguales en dignidad, aunque cada uno tiene un papel o una misión en la Iglesia, tanto universales, con el sacerdocio común, y los dones y carismas particulares, como los que surgen por el sacramento del orden (episcopado, presbiterado, diaconado). En los años 80 se promulga la reforma del Código de Derecho Canónico, y allí, en el libro segundo, intitulado “Del Pueblo de Dios”, se dedican 542 cánones al tema de los derechos y deberes de los fieles cristianos en general, luego los derechos y deberes de los fieles laicos, y describe la constitución jerárquica de la Iglesia y los Institutos de vida consagrada. Esto se encuentra en los cánones 204 a 746. En estos cánones ofrece el Código las formas como cada miembro del pueblo de Dios, peregrino en la tierra, puede y está llamado a ofrecer sus aportes para la consolidación del Reino de Dios en el mundo. A manera de ilustración, veamos algunos de los cánones, que nos permiten entender por qué en la dinámica sinodal, todos estamos invitados a participar activamente. c. 208 “Por su regeneración en Cristo, se da entre todos los fieles una verdadera igualdad en cuanto a la dignidad y acción, en virtud de la cual todos, según su propia condición y oficio, cooperan a la edificación del Cuerpo de Cristo”. 209 &1 “Los fieles está obligados a observar siempre la comunión con la Iglesia, incluso en su modo de obrar”. &2 “Cumplan con gran diligencia los deberes que tienen tanto respecto a la Iglesia universal como en relación con la Iglesia particular a la que pertenecen, según las prescripciones del derecho”. 211 “Todos los fieles tienen el deber y el derecho de trabajar para que el mensaje divino de salvación alcance más y más a los hombres de todo tiempo y del orbe entero”. 212 &2 “Los fieles tiene la facultad de manifestar a los Pastores de la Iglesia sus necesidades, principalmente las espirituales y sus deseos”. &3 “Tienen el derecho, y a veces incluso el deber, en razón de su propio conocimiento, competencia y prestigio, de manifestar a los Pastores sagrados su opinión sobre aquello que pertenece al bien de la Iglesia y de manifestar a los demás fieles, salvando siempre la integridad de la fe y de las costumbres, la reverencia hacia los Pastores, y habida cuenta de la utilidad común y de la dignidad de las personas”. Son muchos otros cánones que dan pie a la realización de las asambleas sinodales parroquiales y diocesanas. Vale la pena leerlos todos. + Luis Fernando Rodríguez Velásquez Obispo Auxiliar de Cali Lea también: Por una Iglesia sinodal (I) [icon class='fa fa-download fa-2x'] LEER AQUÍ[/icon] Hacia una Iglesia sinodal (II)[icon class='fa fa-download fa-2x'] LEER AQUÍ[/icon]

Jue 14 Oct 2021

Ad portas del Sínodo, episcopado envía mensaje a los sacerdotes del país

Este domingo 17 de octubre, la Iglesia Católica en Colombia dará inicio oficialmente al Sínodo sobre la Sinodalidad, para ello, el arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia Episcopal, Monseñor Luis José Rueda Aparicio, hace una invitación a todos los sacerdotes del país para que vivan este acontecimiento eclesial, como un momento de gracia y bendición, unido con todo el pueblo de Dios. "En nombre de la Conferencia Episcopal de Colombia, quiero invitarlos para que todos vivamos este tiempo como un tiempo de gracia, afinemos el oído, ampliemos el silencio para adorar al Señor presente en nuestra historia y para reconocer en los clamores, pero también, en los reconocimientos que hace el pueblo de Dios de nuestra labor misionera, ese paso del Señor". El presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia recuerda a los sacerdotes el papel protagónico que tienen, junto con las comunidades, para vivir este momento de Iglesia sinodal. El prelado observa que, en todos los puntos cardinales de Colombia, la Iglesia hace parte de "una red de servidores de Cristo Jesús, ungidos, amados y enviados a evangelizar", por tanto -continúa- "ahora tenemos el kairos del sínodo con el cual el Espíritu Santo, a través del Papa Francisco, nos invita a ponernos en camino y eso va a renovar nuestra vida sacerdotal". Sínodo 2021 – 2023 Fue el pasado mes de mayo cuando se hizo público el itinerario sinodal aprobado por el Papa Francisco para la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, que debe tener lugar en octubre de 2023 con el lema: 'Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión'. Con esta convocatoria, el Pontífice “invita a toda la Iglesia a interrogarse sobre la sinodalidad: un tema decisivo para la vida y la misión de la Iglesia”. En este contexto, el Papa Francisco inauguró en Roma entre el 09 y 10 de octubre, el Camino Sinodal que se extenderá en la fase diocesana hasta abril de 2022 para continuar con la fase continental. Así también, este domingo 17 de octubre, los obispos de Colombia en cada jurisdicción, animarán esta misma celebración. Son cuatro las fases contempladas como itinerario: diocesana y nacional entre 2021 y 2022, y continental y mundial entre 2022 y 2023 para concluir en octubre de este último año en Roma con la XVI Asamblea Ordinaria del Sínodo de los Obispos.