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Mié 19 Jun 2019

Iglesia anima a trabajar por una nueva cultura vocacional

En la apertura del VI Congreso Nacional de Pastoral Vocacional, que se desarrolla por estos días en la ciudad de Bogotá, el obispo de Ocaña y presidente de la Comisión Episcopal de Ministerios Ordenados, Monseñor Gabriel Ángel Villa Vahos,explicó que el trabajo se centrará en hacer eco a las conclusiones del Sínodo de los Obispos sobre los Jóvenes, la Fe y el Discernimiento Vocacional. “Se ha querido unir a nivel nacional a todos los departamentos que trabajan con familia, jóvenes y vocaciones, porque precisamente las conclusiones del Sínodo nos invitan a crear una nueva cultura vocacional y esta hay que pensarla integrando los distintos actores de la vocación”, afirmó. Explicó el por qué los públicos seleccionados durante este Congreso: La familia, porque es allí donde nacen las vocaciones; la Juventud, fueron el centro de atención del Sínodo; y también a los animadores vocacionales. “En la medida en que podamos fortalecer una pastoral de conjunto, uniendo familia, juventud, animadores vocacionales, podremos lograr que las pretensiones del Sínodo y ahora las que haremos en este Congreso, sean una nueva oportunidad para hacer camino, porque si seguimos trabajando divididos no lograremos objetivos concretos”, aseguró el prelado. Finalmente, invitó a trabajar de manera conjunta para que los frutos esperados de este Congreso lleven a crear en la Iglesia una nueva cultura vocacional. El encuentro que lleva por nombre: "Los Jóvenes, la Fe y el Discernimiento Vocacional", congrega a más de 500 animadores y está siendo escenario para retomar y proyectar los desafíos presentados en los anteriores congresos nacionales, desarrollados a partir de 1983, año del primer congreso de pastoral vocacional y comunidad parroquial. Algunos de los aspectos destacados en este sentido fueron: La Pastoral Vocacional debe entrar en una dinámica que esté en sintonía con la nueva evangelización. La iniciación cristiana debe estar a la base de todo proceso vocacional. No hay crisis de vocaciones sino una crisis de identidad en los vacacionados. Hay que promover todas las vocaciones en todos los ambientes. Reafirmamos la necesidad y el empeño de un trabajo en profunda unidad eclesial. Es oportuno suscitar iniciativas de promoción vocacional. Estamos convencidos de la riqueza que aporta las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación en el cultivo de las vocaciones, invitamos a ponerlos al servicio de los procesos de animación. Reviste particular importancia encontrar caminos para llevar la propuesta vocacional a las culturas juveniles de hoy. Integrar la “cultura vocacional” en la tarea evangelizadora de la Iglesia; fomentar la cultura del encuentro que promueva la articulación de la acción pastoral en los diferentes estados de vida; presentar las conclusiones del sínodo: jóvenes, fe y discernimiento vocacional y la Exhortación Apostólica Christus vivit contextualizadas en la realidad Colombiana; y, propiciar la elaboración de criterios pastorales para los diferentes estados de vida, son los objetivos proyectados para el encuentro que finaliza el 20 de Junio. VER GALERÍA FOTOGRÁFICA

Mar 18 Jun 2019

Iglesia católica anima a buscar caminos de unidad

Al cierre de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, en la que se reflexionó en torno al tema: “Actúa siempre con toda justicia” Dt16, 18 – 20, Monseñor Edgar Aristizábal Quintero, obispo de Yopal y presidente de la Comisión de la Promoción de la Unidad y el Diálogo (PUD) de la Conferencia Episcopal de Colombia, dijo que es deber de cada cristiano y cada hijo de Dios trabajar por la unidad, no solo en la Iglesia católica, sino de aquellos hermanos que se han separado. “Me alegra que desde la Conferencia Episcopal y en la Comisión que acompaño, podamos seguir convocando representantes de diferentes iglesias históricas y muchos hermanos y hermanas que nos ayudan. Todos y cada uno desde las diferentes perspectivas e instituciones vamos viviendo la fraternidad, ese camino de unidad, vamos creciendo en esta tarea, con la palabra y el testimonio de Cristo, donde nos toca a cada uno de nosotros tener el corazón y la vida abierta a ese encuentro con el hermano” aseguró el prelado. Durante la ceremonia de clausura, realizada en las instalaciones de la Iglesia Anglicana San Pablo, el prelado también aseguró “que siguiendo el mandato de Cristo y esa súplica tan bella que Jesús dirigió a su Padre que todos sean uno, también como Iglesia animamos a la unidad, buscamos que se de fraternidad, deseamos trabajar por cada hermano formándolo educándolo y sirviéndolo en las cosas que sean posibles”. Por su parte, el obispo Francisco Duque, de la Iglesia Episcopal de Comunión Anglicana, afirmó que fruto de la reflexión de esta semana “queda el reto de seguir orando, y de enseñar a las comunidades nuestras, el acercamiento entre unos y otros de tal forma que podamos nosotros reconocernos como hijos de Dios”. El trabajo de la semana, que consistió en la elaboración de una cartilla con un subsidio para la celebración ecuménica y un octavario con reflexiones bíblicas y oraciones, fue realizado por el comité ecuménico, convocado por la Iglesia Católica a través del Departamento para la Promoción y Unidad del Diálogo, integrado por las iglesias Episcopal de comunión anglicana, ortodoxa griega, colombiana metodista, evangélica luterana de Colombia, luterana alemana, cristiana menonita y presbiteriana. Cada una de estas Iglesias, tomó uno de los días de la semana, para acoger a las demás, y desarrollar uno de los temas propuestos.

Vie 14 Jun 2019

Seminario Internacional: El proceso de paz en Colombia después de dos años

En las conclusiones del Seminario que se realizó en la ciudad Washington, por iniciativa del Instituto Kroc, y el Secretariado Nacional de Pastoral Social, donde se evaluaron los dos años del proceso de paz en Colombia, Monseñor Héctor Fabio Henao Gaviria, director de Cáritas, insistió en la importancia del diálogo y escucha entre altos representantes del Estado, el gobierno, la comunidad internacional y la sociedad civil, para buscar alternativas y lecciones aprendidas en el proceso de construcción de paz. Monseñor Henao Gaviria, también explicó como el Seminario concluyó, que construir confianza es crucial para asegurar un proceso de reconciliación a largo plazo en Colombia. Una historia tan prolongada de violencia destruyó la confianza en la sociedad. La confianza en los demás es una herida en el alma de la sociedad. Luego lo expresó en varios puntos que estuvieron presentes a lo largo de las discusiones. Así: La importancia de la participación de todos los niveles y sectores de la sociedad en los debates públicos y en la vida de la democracia. Esto implica que todas las instituciones estén enfocadas en aumentar la comprensión y entendimiento recíprocos. Esto es la manera de evitar que discusiones transitorias escalen hasta convertirse en problemas mayores y se haga casi imposible el diálogo y el encuentro social. Recordó la propuesta del Papa Francisco durante su visita a Colombia de hacer realidad la “cultura del encuentro”. Los ejercicios para asegurar la infraestructura, vincular las regiones afectadas por el accionar de grupos al margen de la ley y por cultivos ilícitos, así como los esfuerzos por lograr mayor seguridad a líderes sociales y comunidades, pasa por el desafío de hacerlo en un marco que cree y refuerce confianza entre los diferentes sectores de la sociedad y sus dirigentes. Las respuestas a víctimas sin distinciones, sobrevivientes y ex combatientes, requiere enfoque en restaurar la dignidad en clave de reconciliación. Es importante asegurar la no repetición sobre todo cuando se habla de planes integrales territoriales, con una presencia de la institucionalidad de largo plazo que recupere confianza para lograr la legitimidad en poblaciones en las que existen numerosas capacidades individuales y colectivas que pueden aportar mucho al proceso. Existen numerosas contradicciones entre actores sociales. Se requiere un enfoque desde la reconciliación para encontrar soluciones. Es urgente fortalecer el diálogo social, el cual es una necesidad en Colombia. La verdad como elemento clave en el proceso. El proceso de recuperación de la verdad debe ser sanador, debe pasar por el conocimiento y reconocimiento de los hechos del pasado para construir un proyecto compartido de sociedad. Lograr consensos con una agenda de futuro es clave para prevenir nuevos conflictos. La confianza da legitimidad profunda a las instituciones. Esto se logra por numerosas iniciativas y diversos caminos. Se trata de dar la oportunidad a todos los sectores comprometidos con la democracia, en medio de sus diferencias, para mantenerse activos en forma permanente. Después de décadas de violencia se requiere de un proceso de largo plazo. Es claro que no se va a lograr en corto plazo dar solución a las dinámicas que han estado en la base de las violencias y alcanzar la confianza. Tal como se analizó hay elementos sociales, estructurales y de actividades ilegales que requieren intervenciones sostenidas en el largo plazo para lograr las metas. Integrar los territorios y las voces de las comunidades indígenas, afrocolombianas, mujeres y líderes es de enorme importancia para fortalecer la confianza en la sociedad en general. El asunto de la tierra, el catastro, los planes de desarrollo con enfoque territorial, requieren una visión que incluya el diálogo y la voz de las comunidades con sus expectativas y planes. La existencia de diferentes narrativas sobre el pasado y el presente es un desafío si no se logra ponerles en diálogo y escucha recíproca. Construir confianza pasa por el respecto por las opiniones de las comunidades sobre su territorio. Monseñor Henao Gaviria concluyó agradeciendo la presencia del Alto Consejero para la estabilización Dr. Emilio Archila, el Defensor del Pueblo Carlos Negret, Pete Maroco de la Oficina de conflictos y operaciones de estabilización del Departamento de Estado y numerosos expertos internacionales. El evento se desarrolló en el marco del trabajo de incidencia del Grupo de Trabajo por Colombia -GTC, que en esta ocasión se encuentra en Estados Unidos desarrollando acciones de reflexión e incidencia sobre la construcción de la paz y reconciliación en el país. Fuente: Of. de comunicaciones de SNPS

Lun 10 Jun 2019

Tejer vidas desde los sueños: Programa FortaleSCiendo

Más de 220 líderes participaron en el evento de cierre del programa que los capacitó en habilidades de liderazgo, incidencia y gobernanza que deja como resultado la creación de 11 espacios de control social y 5 veedurías a la ejecución de obras, promovidas por 17 organizaciones. “Los caminos que hemos transitado no han sido fáciles, pero sí propicios para regresar a nuestra identidad, recuperar lo que nos dejaron nuestros ancestros, seguir sus huellas y dejar las nuestras”. Estas son las palabras de Elizabeth Morales, diseñadora y representante de la comunidad indígena de Cartagena del Chairá, en Caquetá. Una mujer que pasó de disfrutar de la naturaleza a sufrir los estragos de la guerra. Fue gobernadora por tres años en su comunidad. Aprendió a entender las necesidades de su pueblo, pero también a defender sus derechos y volver a soñar. “Todo empezó con la guerra. Nos desplazaron y perdimos todo. Tuvimos que empezar de cero”, recuerda. Llegaron a Cartagena del Chairá y lo primero que hicieron fue conformar una asociación para no perder sus costumbres y abrir un camino que los conectara con las autoridades locales para que los reconocieran y los apoyaran en esa nueva realidad. No conocían las normas de los “blancos” ni los procesos para reclamar lo que les pertenecía. Entonces, como ellos afirman “con la ayuda del cielo”, apareció un programa para capacitarlos y acompañarlos a relacionarse con los gobernantes, a proponer desde sus necesidades y aportar al desarrollo de políticas públicas. Algo que parecía imposible, pero que hoy es una realidad. En palabras de Elizabeth, “tiempo atrás estar en frente de un público era sinónimo de terror, pero hoy es un logro porque nos arriesgamos a aprender y a construir en comunidad y damos gracias por el programa FortaleSCiendo, que no solo nos capacitó en la parte profesional sino personal”. En el 2015, el Secretariado Nacional de Pastoral Social, junto con otras entidades, le dio vida al programa FortaleSCiendo, una iniciativa para potenciar las capacidades internas y externas de la sociedad civil y contribuir para lograr políticas y acuerdos en pro de sus comunidades, especialmente las que fueron golpeadas por el conflicto. Abrimos una convocatoria y lo que se buscaba eran organizaciones dispuestas a hacer un trabajo por su comunidad y que pudieran incidir en la gobernanza y contribuir a un desarrollo sostenible”, señala Yomaida Cardona, subdirectora de FortaleSCiendo. El proyecto se enfocó en cinco líneas de trabajo: fortalecimiento organizacional, gobernanza, acceso a la justicia, transparencia electoral y derechos humanos. En la convocatoria, que se realizó a nivel nacional, fueron seleccionadas 100 organizaciones de la sociedad civil en 39 municipios. Así arrancaron con promotores que visitaban a las personas en sus comunidades para formarlos en estrategia y relaciones, y trabajar en temas como, por ejemplo, la capacidad de volver a soñar. “Cuando pasas por momentos de dificultad se pierden los sueños y en ocasiones no se quiere hablar de la situación, pero se tiene que liberar el alma”, dice Gracia Marina Salazar, representante del Costurero de Memoria, un colectivo de mujeres que invita a contar historias no con palabras sino mediante la costura. Con los conocimientos que adquirieron, crearon una caja de herramientas con material pedagógico y metodológico para que las personas que han vivido situaciones similares puedan dejar sus memorias y darles paso a nuevas realidades e historias. Esta metodología se basa en una teoría del cambio y en el desarrollo de comunidad. El objetivo del Costurero de Memoria es que pueda llegar a todos los rincones de Colombia y así recuperar, resignificar y restituir esos derechos que se violaron en la guerra. “Con este proceso estamos construyendo país. Con hilos de colores aportamos a una paz soñada y estamos más empoderadas sin miedo al futuro”. Estos son algunos de los testimonios que se presentaron durante el evento de cierre del Programa FortaleSCiendo, al que asistieron más de 220 líderes que participaron durante los cuatro años en el proceso y quienes recibieron su respectivo diploma y la oportunidad de mostrar en una feria sus proyectos productivos, en los que se comercializaron cafés, artesanías, mieles e incluso una galería para dar el contexto de los procesos que han vivido y así fortalecer sus relaciones con otras comunidades. “Este proyecto nos deja un antes y un después. Nos deja herramientas y capacidades para dialogar con los entes gubernamentales. Uno de nuestros logros fue la incidencia en nuestra comunidad para el tema del arreglo de la vía. Eso fue algo muy importante y lo logramos gracias a esa estrategia”, dice Luz Mery Valdez, líder en el corregimiento San Isidro, en Carmen de Bolívar. La hoja de ruta está trazada. Las comunidades van a seguir con un acompañamiento y consultoría por parte de los mentores. El reto es seguir trabajando para crear nuevas realidades y consolidar la paz desde los territorios. “Es muy grato ver que logramos superar nuestros miedos y volver a creer”, puntualiza Elizabeth Morales. RESULTADOS PROGRAMA FORTALESCIENDO Transformamos relaciones Las alianzas, políticas o proyectos con instituciones públicas son una muestra de que construyeron confianza o “transformaron” las relaciones. Un total de 101 organizaciones ejecutaron, entre noviembre de 2018 y marzo de 2019, aproximadamente $3.900 millones en la implementación de planes de trabajo e iniciativas de incidencia. Además, 104 organizaciones lograron mayor cohesión organizacional y mejora en la resolución de conflictos. Somos más visibles Generando opinión pública sobre sus temas de interés, 92 organizaciones fortalecieron sus capacidades comunicativas para el diálogo social; realizaron 2.167 piezas comunicativas de radio, prensa, audiovisuales y redes sociales emitidos a través de medios de comunicación propios, y recibieron 319 cubrimientos de otros medios de comunicación locales, regionales, nacionales e internacionales. Derechos humanos y acceso a la justicia En el programa, 95 organizaciones diseñaron protocolos de protección y autoprotección con enfoque diferencial. Cuentan con medidas preventivas y de respuesta ante situaciones de riesgos y amenazas por su liderazgo comunitario y defensa de los derechos humanos en sus territorios. Y 32 organizaciones emprendieron 56 acciones jurídicas para la protección de sus derechos. Fuente: Diario El Espectador

Sáb 8 Jun 2019

Únete a la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos

Bajo el lema “Actúa siempre con toda justicia” (Dt 16, 18-20), el Comité Ecuménico en Colombia, convocado por la Iglesia Católica, a través del Departamento para la Promoción de la Unidad y el Diálogo (PUD), invita a la vivencia de esta jornada que se llevará a cabo del 8 al 15 de junio. Unirse a la celebración de esta semana “significa asumir el reto de Jesús de buscar la unidad: “Que todos sean uno y que el mundo conozca que son mis discípulos por el amor que se tienen”, explicó el padre Jorge Enrique Bustamante Mora, Director del Departamento PUD. Esta jornada, agregó el sacerdote, “reafirma nuestra unidad cristiana; nos lleva a aprender a respetar y valorar al otro, aunque no comparta todo con nosotros, pero si sigue a Cristo tenemos que verlo como un hermano con quien podemos orar y compartir, manteniendo cada uno su identidad; y, finalmente, se constituye en nuestro aporte a la reconciliación y la paz de las comunidades”. Los organizadores, en el país, proponen dos formas de celebración: La ecuménica, que se llevará a cabo el sábado 15 de junio, a las 5 de la tarde en la Catedral Episcopal Anglicana San Pablo (Calle 51 # 6-19). Este día se tendrá un momento de diálogo con los asistentes sobre la postura de las ocho Iglesias Históricas (Iglesia Episcopal de Comunión Anglicana, Iglesia Ortodoxa Griega, Iglesia Colombiana Metodista, Iglesia Evangélica Luterana de Colombia, Iglesia Luterana Alemana, Iglesia Cristiana Menonita, Iglesia Presbiteriana, convocadas por la Iglesia Católica) y, posteriormente una celebración. La segunda actividad programada es el Octavario, que consiste en la oración durante 8 días desde las distintas Iglesias. La Semana de Oración por la Unidad se celebra en el mundo en dos momentos: En el Hemisferio Norte la celebran en la tercera semana de enero, en torno a la Fiesta de la Conversión de San Pablo y en el Hemisferio Sur se celebra en el contexto de Pentecostés. Sobre la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, Monseñor Édgar Aristizábal, presidente de la Comisión Episcopal PUD, en la presentación del material elaborado para la jornada señaló que “los miembros de las comunidades de fe cristiana desde nuestra creencia y vivencia debemos ser luz que ilumine el mundo y muestre la valentía de proceder con justicia en toda realidad, de forma que antojemos a los demás a vivir según el camino de esta fe”. Además, agregó el prelado, el tema para este año resulta “profético e iluminador en medio de las constantes realidades de corrupción que ahondan la ya insondable brecha entre ricos y pobres. La corrupción impide superar los cordones de miseria y pobreza que vive nuestro pueblo, Pueblo Santo de Dios”. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar cartillaSemana de Oración por la Unidad de los Cristianos 2019[/icon]

Vie 7 Jun 2019

Iglesia anima discernimiento sobre Libertad Religiosa

Al concluir el Encuentro Nacional de Libertad Religiosa y su Incidencia en Colombia, el obispo de Armenia y miembro de la Comisión Episcopal de Promoción de la Unidad y del Diálogo, monseñor Carlos Arturo Quintero Gómez, afirmó que la Iglesia Católica siempre ha sido abanderada en promover y liderar la libertad religiosa, pero es el Gobierno quien está en la obligación de proteger y custodiar esta libertad con implementación de unas políticas públicas claras. “La Iglesia Católica siempre ha estado abierta a participar y facilitar esos caminos de diálogo y concertación. Hoy en día en Colombia es indispensable trabajar una política pública para la Iglesia Católica, donde no se están buscando privilegios para ella, sino un camino de concertación en el que se le reconozca su tradición y que la mayoría de colombianos pertenecen a esta Iglesia Católica, Apostólica y Romana”, aseguró. El prelado dijo, además, que la libertad religiosa para la Iglesia Católica es importante, pero afianzando siempre su identidad y comunión con el Papa, una Iglesia abierta al diálogo con el mundo y la cultura. Ante la diversidad de las denominaciones religiosas, el jerarca afirmó que se debe trabajar de la mano con ellos en un ambiente de respeto y tolerancia, “pero sabiendo dónde están los límites de ese diálogo y los límites para entrar a debatir o concertar sobre diversos temas que son de interés público (…) Hay temas en que nos podemos unir y temas religiosos donde podemos reflexionar y profundizar cada vez más sobre la dimensión de participación de las diversas Iglesias”. Por su parte, el padre Jorge Bustamante Mora, director Departamento de Promoción y Unidad del Diálogo, advirtió que el tema de la libertad religiosa ha ido adquiriendo un tinte político, hecho que amerita una reflexión al respecto. “Debemos hacer una reflexión seria para ver cómo ayudar a esta realidad, puesto que la libertad religiosa se ha politizado, ha ido adquiriendo un color político que es necesario depurar para que sea auténtico derecho de libertad religiosa”, afirmó. Asimismo, el padre Leonardo Gutiérrez, Pro-vicario general de la Arquidiócesis de Bucaramanga y participante en el encuentro, afirmó que este espacio ha sido importante como proceso de formación y actualización. “La libertad religiosa toca la identidad profunda de la Iglesia, por eso estamos formándonos y aprendiendo para poder llegar a nuestras regiones a socializar lo visto. Ayudar a nuestras comunidades a entender lo que es la libertad religiosa para respetar las demás denominaciones, pero también para hacernos respetar, valorando nuestra identidad y dando una voz en la que también nosotros necesitamos ser respetados como católicos”. La conclusión de cierre de este encuentro estuvo marcada por la decisión de trabajar en la implementación de una estructura a nivel nacional, donde se conformen comisiones diocesanas que permitan dar continuidad y seguimiento a la temática de la libertad religiosa en Colombia.

Jue 30 Mayo 2019

Orientaciones para el fortalecimiento de la Religiosidad Popular

Al cierre del Encuentro Nacional de Liturgia, que tuvo lugar en la sede del Episcopado colombiano, el padre Juan David Muriel Mejía, de la Arquidiócesis de Medellín y docente en Teología de la Universidad Pontificia Bolivariana, habló sobre las líneas de acción a seguir con respecto al tema que convocó: “Piedad popular y compromiso cristiano”. Explicó que la religiosidad popular se debe descubrir como una experiencia de encuentro con el Señor Resucitado. Planteó la necesidad de una orientación clara, donde “pastores y fieles sean obedientes a los criterios de la experiencia universal eclesial”, agregó, además, que se debe tener la capacidad de no “ser individuales, ni egoístas, sino ser amplios, universales, auténticos y libres”. En este sentido, precisó que la religiosidad popular implica tener unos criterios claros sobre la necesidad de una vinculación a la vida del Magisterio de la Iglesia, a una permeabilidad hacia la pastoral bíblica y un conocimiento del Señor desde la Sagrada Escritura. Al referirse al tema de los Santuarios, lugar de mayor afluencia de peregrinos y donde se vive de manera más cercana la religiosidad popular, el sacerdote dijo que estos espacios se deben fortalecer de manera especial con la celebración de los sacramentos y sacramentales, (el sacramento de la penitencia y la dirección espiritual), para que sean vividos de manera “digna, bella y noble”, acorde a la proclamación del Evangelio. “Se debe tener atención del peregrino en sus necesidades básicas, acompañamiento a la catequesis, tratar de orientar a la persona humana en sus necesidades: tener tiempo para la escucha, abrirse a experiencias humanas como la manufactura, asistencia social del trabajo y la generación de espacios donde el hombre pueda progresar y ser digno”, aseveró.

Mié 29 Mayo 2019

Cáritas Colombia enfila esfuerzos en la protección de la niñez migrante venezolana

Con el apoyo Cáritas Luxemburgo, el Secretariado Nacional de Pastoral Social - Cáritas Colombia, en el marco del proyecto de “Asistencia humanitaria integral a población en condiciones migratorias”, cuyo énfasis es la atención a la población migrante venezolana, desarrolló el seminario ‘Sembrando Esperanza’, este martes, 28 de mayo, con la asistencia de más de 60 personas pertenecientes a diversas organizaciones de trabajo con infancia en el país. El objetivo de este taller fue brindar herramientas de acompañamiento a niñez en contextos migratorios, especialmente para promover espacios y experiencias de paz, reconciliación y participación como un aporte ante la emergencia generada por la masiva migración venezolana a Colombia. Lina Peña, especialista nacional de migración y refugio de Cáritas Colombia, comentó que el proyecto inició en noviembre de 2018 y culmina ahora en mayo de 2019 y se desarrolló en conjunto con las diócesis de Cúcuta, Apartadó, Cali y Bogotá. Además de la articulación dada con la Red Clamor, capítulo Colombia, y el Programa Puentes de Solidaridad. Sembrar la paz con niños migrantes Una de las estrategias de cierre en este proyecto ha sido la transferencia de metodologías de modelos exitosos e importantes para el país en el acompañamiento a la niñez migrante, es por esta razón que Carlos Henao, director de Sembradores de Paz, una organización con más de 20 años de trayectoria en el país, compartió con los participantes la metodología que durante todo este tiempo les ha permitido ser una de las organizaciones más sólidas de la Iglesia en Colombia en el tema de la construcción de la paz, el perdón y la reconciliación. Peña también señaló que esta “metodología de Sembradores de Paz que se desarrolla en conjunto con la fundación para la Construcción de la Paz (FINCOPAZ,) la cual acompaña a través de la formación en temas de protección de la niñez”. Por esta razón han convocado a este grupo heterogéneo de organizaciones de protección de la niñez para articular una acción conjunta de acompañamiento, especialmente como un ejercicio para revisar sus propias estrategias de cara a la participación de los niños en una plataforma social un poco más amplia, que atienda los temas de migración y refugio. Diálogo ampliado Entre las organizaciones que han participado de este encuentro están Conviventia, DIPRON, COALICO, corporación Minuto de Dios, Universidad de la Salle, Universidad Juan N. Corpas, Fundación Conexión por un futuro mejor, War Child, Acción contra el hambre, SJR, Corposcal, Idipron, Religiosas Adoratrices, religiosas Caridad Santa Ana, religiosas Vicentinas-Defensoras de Vida, Red Tamar de CRC, Kiwanis, “Es un grupo muy diverso tienen diferentes énfasis en el acompañamiento y por ello se hace más interesante hacer este diálogo de las acciones de protección y de la promoción de la participación de los niños y de los jóvenes en el territorio colombiano”, acotó Peña. Cabe destacar que este taller se ha realizado en Cali y Cúcuta, donde ha habido participación activa de los agentes de pastoral. No se trata sólo de migrantes Durante su mensaje de saludo, el padre Enán Humánez, subdirector de Cáritas Colombia, recordó a los presentes las palabras del Papa Francisco a propósito de la 105° Jornada Mundial del Migrante. “No se trata solo migrantes, sino de la caridad humana y la caridad humana no tiene rostro, no solo se trata de contexto migratorio. No se trata de migrantes, sino de nuestros miedos respecto al tema de la xenofobia, empezamos a estigmatizar a unas personas y otras”, ha dicho. Igualmente el presbítero recordó que debemos mirar con los ojos del corazón, entender en estas claves que nos regala el Santo Padre para la futura articulación, porque “no se trata de migrantes, se trata de nuestra humanidad, porque quien no ha sido también extranjero, los seres humanos históricamente han migrado y siempre vamos a estar en ese contexto”. Hacia el trabajo mancomunado Carlos Henao, director de Sembradores de Paz, ha destacado la necesidad de trabajar en redes como garantía de la sostenibilidad de las acciones. Señaló que desde su trabajo en Sembradores de Paz todo se ha dado gracias a la acción mancomunada: “Hay un compromiso inmenso para que desde la iglesia se dé una respuesta efectiva” al tiempo que pidió romper las fronteras, promovamos la fraternidad sin fronteras. Por otra parte, ha planteado que para lograr resultados factibles en materia de movilidad humana se hace urgente promover proyectos socioproductivos para que el migrante se gane la vida dignamente, “debemos integrarlos, sacarlos de los semáforos y darles herramientas para el trabajo digno”. El director de Sembradores de Paz ha denunciado que en las grandes capitales de Colombia como Medellín, Cali, Bogotá, Cartagena, entre otras, el flagelo de la prostitución y el reclutamiento forzado está a la orden del día, por lo cual llamó a aunar esfuerzos para combatir estas situaciones que atentan contra la dignidad de los niños y niñas. “Qué bueno será volvernos a encontrar para juntos construir rutas de protección a población migrante venezolana”, finalizó.