SISTEMA INFORMATIVO
Monseñor Rueda: “Que paren las guerras, las masacres y homicidios”
Al concluir la CXII la Asamblea Plenaria, el presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, monseñor Luis José Rueda Aparicio, concedió una entrevista a Radio Vaticano-Vatican News, donde compartió acerca de las conclusiones del trabajo que los obispos realizaron durante los cinco días de sesión.
AQUÍ la entrevista completa ⬇️
La Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Colombiana concluyó con un llamado a acabar con la espiral de violencia y muerte en el país, pero también a vivir este momento con esperanza y responsabilidad, sobre todo ante las elecciones que se aproximan. Vatican News en conversación con el presidente del episcopado, monseñor Luis José Rueda Aparicio.
“Las alternativas militaristas no son las únicas y deben ir acompañadas por un compromiso de desarrollo humano integral real”. “Hay un contexto de violencia creciente fruto del narcotráfico”. “Hay mucho derramamiento de sangre, muchos muertos, muchos civiles que han perdido la vida”. “Nosotros creemos en el duro camino del diálogo, que es un arte difícil”. Estas son solo algunas ideas tomadas de la entrevista con monseñor Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia episcopal colombiana (CEC) al término de la Asamblea Plenaria, la número 112, en un país sometido por la violencia, la insurgencia, el narcotráfico, la corrupción y la pobreza.
El camino sinodal emprendido por la Iglesia fue el tema central de la plenaria, que tuvo lugar del 14 al 18 de febrero, de forma presencial, pero también lo fueron la realidad del país, que se aproxima a una serie de elecciones legislativas y presidenciales, mientras los grupos insurgentes y la criminalidad organizada no dan tregua a una población sometida por la violencia. También se habló del trabajo que lleva adelante la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) en Colombia y se anunció la campaña Dona Nobis, que busca reunir fondos para la obra evangelizadora de la Iglesia en el país.
Entrevista con monseñor Luis Rueda Aparicio, presidente del episcopado colombiano. [icon class='fa fa-download fa-2x'] AQUÍ[/icon]
Escucha: Palabra clave
El presidente de la CEC, ante los micrófonos de Radio Vaticano-Vatican News, nos ofrece un panorama sobre la plenaria del episcopado y los desafíos de la Iglesia y la sociedad. Comenzando por la sinodalidad, abordada por los obispos bajo el tema: “Por una iglesia sinodal, comunión, participación y misión”. ¿Cuáles han sido los puntos resaltantes en esta reflexión de los obispos?
Primero, hemos hecho un puente de comunión total y plena con el Sucesor de Pedro, con el Papa Francisco. Segundo, hemos hecho todo el esfuerzo de implementar en las diócesis y vicariatos apostólicos de nuestro país, la consulta, la escucha, sinodal en el primer momento. Pero también, teníamos que hacerla entre nosotros, como obispos, como servidores de la evangelización en Colombia. Juntarnos para poder asumir este espíritu sinodal desde nuestra propia misión y desde nuestra propia condición de servidores de la pastoral como obispos.
Elecciones: Participación y fin de la violencia
P:/ Se sabe que la Iglesia no puede estar apartada de la realidad en la que vive. Los obispos han hablado de la situación del país y han dirigido un mensaje a propósito de las próximas elecciones legislativas ¿En qué contexto se enmarcan estos comicios y cuáles son los desafíos?
R:/ Los comicios electorales que se aproximan, tanto los legislativos como las dos vueltas presidenciales, marcan un año democrático de mucha importancia para Colombia. También tenemos grandes desafíos. Hay un contexto de violencia creciente que se ha venido incrementando fruto del narcotráfico, fruto de grupos armados que han hecho presencia en Colombia y en la región. Entonces, hay mucho derramamiento de sangre, hay muchos muertos, muchos civiles que han perdido la vida y hay muchos atentados contra la vida.
Por eso, en ese contexto, nosotros hemos hecho un llamado, primero a todos los colombianos a asumir con responsabilidad este momento crucial de la democracia de Colombia. Segundo, hemos hecho un llamado a los candidatos para que asuman la responsabilidad del servicio al bien común, para que no se dejen corromper y para que no generen odios que van a generar también, como consecuencia, más guerra y más violencia entre los colombianos. Y tercero, hemos hecho un llamado a la esperanza, un llamado a sentir que este es un momento para vivirlo con responsabilidad y con esperanza.
Cese al fuego
P:/ La iglesia colombiana en más de una oportunidad se ha propuesto como mediadora, en diversos momentos críticos, convocando a un diálogo, sobre todo, con el gobierno y las partes en conflicto. Este viernes, instituciones católicas y organizaciones internacionales han pedido un alto al fuego y la protección de la población civil. Como obispos también han solicitado un encuentro con el presidente de la república, Iván Duque. ¿ Cómo se podría abrir un diálogo que mejore la situación de conflicto que existe en el país?
R:/ Los obispos de Colombia hemos hecho un llamado al cese al fuego. Hemos dicho a todos los grupos armados que están en conflicto en nuestro país que paren la guerra, que paren las masacres, que paren los homicidios, que permitan que vivamos un proceso democrático en reconciliación y paz. Pero, además, los obispos de distintas regiones del país como la zona limítrofe con Venezuela, el Catatumbo Ocaña y Arauca.
Igualmente, los de la zona del Pacífico, donde está el Departamento del Chocó, hemos llamado al gobierno nacional para que permita que entablemos diálogos. Le hemos dicho al gobierno también que no escatimen ninguna posibilidad de diálogo para que esta situación dolorosa en nuestro país, tenga una salida racional, pronta y estable.
No a la ideología de guerra
P:/ Precisamente, usted ha dicho una frase enérgica en la rueda de prensa: “No aceptamos la ideología de guerra”. Hablando también de la situación del Chocó o del Arauca, por ejemplo, hay asesinatos, narcotráfico, guerrilla, criminalidad, ocupaciones, desplazamientos y, también, una situación de militarización muy grande. En este sentido, ¿en qué consiste esa “ideología de guerra” de la que usted habla? ¿Es solamente por parte de la insurgencia o también la fuerte militarización que hay actualmente?
R:/ Hay una cadena de muerte en Colombia que lleva muchas décadas. Por un lado, el narcotráfico, que ha hecho de Colombia un lugar de producción, de consumo, de procesamiento y, también, de exportación a Europa y a Estados Unidos de la coca. Con eso, el narcotráfico compra armas y, con esas armas, se trabaja a través de los grupos, ya sea de paramilitares o guerrilleros que están haciendo mucho daño y que ponen a la población civil en medio de los fuegos, todo por adueñarse del producto del narcotráfico, pero también por adueñarse de los territorios, dónde viven los campesinos, los indígenas, los afroamericanos, los más pobres.
Por eso, nuestro llamado contundente es a parar la guerra, a respetar el derecho internacional humanitario y a quitar toda forma de conflicto para que podamos encontrarnos, reconciliarnos, soñar y trabajar por una Colombia posible, viable, reconciliada que respete la vida y en paz.
Azotados por el conflicto
P:/ ¿Usted cree que la manera de solucionar estos problemas sea solo un gran desplazamiento de fuerzas del orden, fuerzas de seguridad y de militares para detener el conflicto o existen también otras alternativas?
R:/ Sin duda que existen muchas alternativas. Lo primero es atender, escuchar a la población civil que está en estos territorios azotados por un conflicto recio, profundo, que les quita las tierras y les quita la vida. Pero, además, es necesario que haya un protagonismo de todas las comunidades. Finalmente, es muy importante que sepan que nosotros como Iglesia, los sacerdotes, la vida consagrada, los laicos, ese Pueblo de Dios que peregrina en Colombia, creemos y esperamos una posibilidad mayor de reconciliación, de encuentro. Sin duda que hay muchos caminos.
Nosotros creemos en el duro camino del diálogo, que es un arte difícil, para sentarnos a dialogar como se ha hecho en otras ocasiones, es la única posibilidad racional. Lo ha dicho el Papa Francisco: O todos somos hermanos o todos nos hundimos. Y nosotros queremos optar por un camino de fraternidad que le dé horizontes de esperanza y de vida nueva a todos colombianos, porque aquí no sobra nadie. Entonces, las alternativas militaristas no son las únicas y deben ir acompañadas por un compromiso de desarrollo humano integral real y concreto en todas las regiones.
Periodistas: servidores de la verdad
P:/ Monseñor Rueda, por último, durante la Asamblea Plenaria se celebró el Día Nacional del Periodista, el miércoles 16 de febrero. ¿Cuál es, a su juicio, la importancia de los medios de comunicación y de los periodistas en la construcción de la paz en Colombia?
R:/ Felicito a todos los periodistas, de Colombia y del mundo. Tienen una gran responsabilidad. Nos encontramos con ellos aquí en la sede de la conferencia episcopal y pudimos dialogar, como seres humanos, y a la luz del mensaje del Santo Padre, los invitamos de la verdad, a ser misioneros de la esperanza, a ser servidores de una vida posible en Colombia. Ellos saben de esa gran responsabilidad que tienen, y por eso los estamos invitando a que sean servidores para evitar toda polarización, evitar todo odio, todo rencor, para que estos comicios electorales transcurran en la verdad y que sepan que, con la comunicación en todos los medios, nos pueden ayudar a buscar el bien común de todos los colombianos.
Fuente: Radio Vaticano-Vatican News
La familia defiende y protege la vida
Mar 11 Jun 2024
Lun 1 Jul 2024
Austeridad, entrega en la misión, servicio y valentía: motivaciones del Cardenal Rueda a los obispos, a la luz de las bienaventuranzas
Este lunes, 1 de julio, inició la CXIII Asamblea Plenaria de los obispos colombianos. Durante la instalación del encuentro, que tendrá carácter electivo, el cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y presidente del episcopado, animó a los prelados a vivir la austeridad, entregarse en la misión, donarse en el servicio a sus comunidades, y afrontar las dificultades y fragilidades desde la verdad, con valentía y el anuncio del perdón.El Primado de Colombia inició su discurso inaugural haciendo alusión a Lucas 6, 20-23, donde Jesús pronuncia las bienaventuranzas a sus discípulos tras haberlos elegido en el ministerio apostólico. Les recordó a los obispos que esta primera enseñanza también se traslada a su misión como sucesores de los doce apóstoles, por lo que es fundamental hacer una relectura de ella, especialmente en este año de la oración, que prepara a la Iglesia Universal para el Jubileo de la Esperanza 2025.El Cardenal Luis José Rueda afirmó que, frente a los retos a los que está expuesta la esperanza, es normal que surja la tentación de la desconfianza, pero que el cristiano, y aún más, el obispo, puede afrontar las situaciones más adversas, con su confianza puesta en el misterio de la cruz y de la resurección del Señor. Animando y reconfortando a sus hermanos, compartió así su reflexión sobre las bienaventuranzas:“Bienaventurados los obispos que se esfuerzan por vivir la austeridad”. Enfatizó en la importancia de la vida austera, se refirió a ello como “un mensaje poderoso y un gran aporte para la paz en Colombia”; un ejemplo de lucha contra la corrupción y la codicia que tanto daño causa.“Felices los obispos que aprendiendo de Jesús viven el espíritu de la pobreza y el desapego, son servidores humildes que no viven de la imagen, sino que, en la propia conciencia saben con sinceridad quienes son, y ponen su corazón en el verdadero tesoro que es Cristo crucificado y resucitado, vivo y cercano cada día”.“Bienaventurados los obispos que animan con su vida la misión”. Recordó a los obispos el llamado que se les ha hecho a entregarlo todo por la misión evangelizadora. De esta forma, los convocó a estar dispuestos a trabajar en conjunto con las diversas vocaciones dentro de la Iglesia colombiana, y así, caminar hacia la verdadera sinodalidad.“Felices los obispos que son agradecidos con el pequeño paso que se pudo dar, que saben mantener la serenidad, aunque el lobo esté al acecho, que no pierden la esperanza, aunque al revisar las duras labores por la evangelización, pareciera que la cizaña estuviera ahogando el trigo, son obispos que confían en la acción del Espíritu Santo, y son capaces de ponerse en silencio y de rodillas para agradecer ante el sagrario, después de una jornada de aparentes fracasos”.“Bienaventurados los obispos que llegan hasta las lágrimas en su servicio”. Los invitó a reconocerse vulnerables y frágiles, y que, a su vez, se descubran reconfortados y consolados por el amor de Dios Padre. Además, a ser servidores de la esperanza en sus comunidades, sabiendo leer e interpretar los signos de los tiempos.“Son obispos con capacidad para consolar al que está afligido, son hermanos que prefieren llorar que sucumbir, son aquellos que no se dejan deslumbrar por las estadísticas, son capaces de conmoverse ante el sufrimiento de las personas y de la ciudad, y lloran por amor, uniéndose a las lágrimas de Jesús por Jerusalén”.“Bienaventurados los obispos que afrontan sin amargura las tribulaciones”. Con esta bienaventuranza finalizó el Cardenal Rueda Aparicio animando a sus hermanos en el ministerio apostólico, a tomar la cruz de la misión y a avanzar con valentía dejándose acompañar. Mencionó que, de esta forma, pueden escuchar la voz del Espíritu Santo, por ejemplo, en medio del sonido ensordecedor de las noticias falsas.“Son Obispos que tienen en su conciencia el signo de María, serena y fiel junto a la cruz de su Hijo, que mantienen la paz ante la injuria y la difamación. Son obispos convencidos de que nada los podrá separar del amor de Dios manifestado en Cristo Jesús (…) Son hombres que han recibido en su vida personal el perdón y logran anunciarlo con sus actitudes y palabras en medio del Pueblo Fiel de Dios, llevan el bálsamo de la misericordia como una gracia desbordante, saben que a pesar de las presiones externas y las fragilidades internas, nadie los podrá separar del amor de Cristo, ni la angustia, ni la persecución, ni la desnudez, ni los peligros, ni la guerra (Cfr Rm 8, 31 - 39).En su discruso, el Arzobispo de Bogotá manifestó gratitud por el apoyo y la confianza depositada durante los tres años que ejerció como presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia; también lo hizo en nombre de sus hermanos en la dirección, monseñor Omar Alberto Sánchez Cubillos (arzobispo de Popayán y vicepresidente) y monseñor Luis Manuel Alí Herrera (obispo auxiliar de Bogotá y secretario general). Además, extendió su agradecimiento al padre Jorge Bustamante Mora (actual secretario general encargado) y a cada uno de los "hermanos y hermanas del Secretariado Permanente del Episcopado de Colombia (SPEC)", por su servicio. Al tiempo, manifestó su disposición para seguir apoyando a quienes en esta CXVII Asamblea Plenaria resulten elegidos en estos roles."Es hermoso ver que somos discípulos misioneros itinerantes, es bello dar un signo de libertad a la Iglesia de Colombia y a la sociedad de nuestro país, un signo de libertad ante la tentación de sentirse indispensables, porque estamos convencidos de que el Espíritu Santo elige, capacita y acompaña siempre nuevas expresiones de liderazgo sinodal, al servicio de su Pueblo Santo", concluyó el Cardenal Luis José.
Sáb 29 Jun 2024
Dos nuevos nombramientos del papa Francisco para Colombia: Obispo de la Diócesis de Engativá y Obispo Auxiliar de Bogotá
La Santa Sede dio a conocer dos nuevos nombramientos episcopales para la Iglesia colombiana. Monseñor Germán Medina Acosta, quien desde agosto de 2021 se venía desempeñando como obispo auxiliar de Bogotá, fue designado por el papa Francisco como Obispo de la Diócesis de Engativá; y el padre Edwin Raúl Vanegas Cuervo, quien ejercía desde el 10 de abril de 2024 como Vicario Episcopal Territorial de San José en esta misma jurisdicción, fue nombrado Obispo Auxiliar de Bogotá. Ambos pastores han sido formadores y rectores del Seminario Conciliar de Bogotá.Monseñor Germán Medina fue ordenado Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Bogotá el 14 de agosto de 2021 por el cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia. Posteriormente, fue designado Vicario Episcopal de la Evangelización y Vicario Episcopal para el Anuncio, Formación en la Fe y Diálogo con la Cultura, así como miembro del Consejo Presbiteral.Tras este nuevo nombramiento por parte del Santo Padre, monseñor Medina relevará en la Diócesis de Engativá a monseñor Francisco Antonio Nieto Súa, quien desde julio de 2015 pastoreaba esta jurisdicción. En septiembre del 2023 monseñor Nieto cumplió setenta y cinco años, la edad límite para ejercer dicho oficio eclesiástico.Por su parte, el padre Edwin fue ordenado sacerdote en la Arquidiócesis de Bogotá el 4 de diciembre de 1999 por el cardenal Pedro Rubiano Sáenz (Q.E.P.D.). Es especialista en Teología Fundamental de la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma (2009), Licenciado en Teología de la Universidad Pontificia Bolivariana (2011) y adelantó estudios doctorales en Teología en la Universidad Pontificia Comillas – Madrid (2015). Tras desempeñarse como Rector del Seminario Mayor desde el año 2018, fue designado por el cardenal Rueda Aparicio, para acompañar a las comunidades urbanas y rurales de la Vicaría de San José, ubicada en el sur oriente de Bogotá, donde abarca el territorio de 4 localidades de la capital y 11 municipios de Cundinamarca.Ahora, el presbítero se unirá al cardenal Luis José Rueda Aparicio y a monseñor Alejandro Díaz García, también obispo auxiliar de Bogotá, en la misión de pastorear la Sede Primada de Colombia.Biografía de monseñor Germán Medina AcostaMonseñor Germán Medina Acosta nació en Bogotá el 25 de febrero de 1958.Realizó sus estudios secundarios en el Seminario Menor de Bogotá (1975) y los de Filosofía (1978) y Teología (1982) en el Seminario Mayor de Bogotá. Es licenciado en Teología (1989) de la Pontificia Universidad Javeriana. Magister en Psicología Comunitaria (1996) de la Pontificia Universidad Javeriana. Especialista en Ética y Pedagogía de Valores (1998) de la Pontificia Universidad Javeriana. Doctor en Teología (2002) de la Pontificia Universidad Salesiana de Roma. Fue ordenado sacerdote el 11 de junio de 1983 por el cardenal Aníbal Muñoz Duque, para el servicio de la Arquidiócesis de Bogotá.Entre sus encargos pastorales, se destacan:-Vicario parroquial en Nuestra Señora del Ave María (1983).-Miembro del equipo de directores del Seminario Menor de Bogotá (1984).-Coordinador del equipo arquidiocesano de Pastoral Juvenil (1985). Capellán en el Colegio del Rosario (1986).-Primer Capellán en la Universidad Nacional y Párroco en los Santos Ángeles Custodios (1996).-Arcipreste del Arciprestazgo N° 1.3 (1999).-Miembro del equipo de formadores del Seminario Mayor (2002). Miembro del Consejo del Diaconado Permanente (2003).- Miembro del Consejo Presbiteral (2008).-Rector del Seminario Mayor de San José (2010).-Miembro del Consejo Presbiteral (2014).-Párroco en San Juan de Ávila (2015).-Miembro del Consejo Presbiteral, en representación de la Vicaría Episcopal Territorial de San Pedro y animador del equipo arquidiocesano para la formación permanente (2016). -Ratificado como miembro del Colegio de Consultores, nombrado vicario episcopal territorial de San Pedro y vicario general de la Arquidiócesis de Bogotá desde el mes de junio de (2017).-El 11 de julio de 2021 fue nombrado por el papa Francisco como Obispo titular de Aradi y Obispo auxiliar de Bogotá. Su ordenación episcopal fue el 14 de agosto de 2021, ese mismo día tomó posesión de su cargo.Biografía de monseñor Edwin Raúl Vanegas CuervoEl padre Edwin Raúl Vanegas Cuervo nació en Bogotá el 21 de mayo de 1975.Cursó sus estudios de Filosofía y Teología en el Seminario Conciliar de Bogotá. Fue ordenado sacerdote en la Arquidiócesis de Bogotá el 4 de diciembre de 1999 por el cardenal Pedro Rubiano Sáenz.Es especialista en Teología Fundamental de la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma (2009), Licenciado en Teología de la Universidad Pontificia Bolivariana (2011) y adelantó estudios doctorales en Teología en la Universidad Pontificia Comillas de Madrid (2015).Tras desempeñarse como Rector del Seminario Mayor desde el año 2018, en abril del presente año, fue designado por el cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá, para acompañar las comunidades urbanas y rurales de la Vicaría Territorial de San José, en la Sede Primada de la Iglesia Católica colombiana.Entre sus encargos pastorales, se destacan:- Vicario Parroquial de Santa María Madre de Jesús (1999).- Párroco de San Juan Neumann (2000 - 2004).- Miembro del Equipo de Pastoral Vocacional Arquidiocesano (2005-2006).- Formador (2009 - 2018) y Rector (2019 - 2024) del Seminario Conciliar San José de Bogotá.- Coordinador Arquidiocesano de Diálogo Ecuménico e Interreligioso (2013 - 2016)- Animador Arquidiocesano para la Formación Permanente del Clero (2018).- Vicario Episcopal Territorial de San José (2024 hasta la fecha).
Vie 28 Jun 2024
Obispos colombianos vivirán una nueva asamblea electiva del 1 al 5 de julio: piden a los fieles orar por este momento
Desde el próximo lunes 1 hasta el viernes 5 de julio, los obispos colombianos se reunirán en Bogotá para desarrollar su CXVII Asamblea Plenaria. En esta oportunidad, el encuentro tendrá como propósito central elegir a quienes liderarán el trabajo de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) durante el trienio 2024 – 2027.Durante esta asamblea los prelados decidirán quiénes serán los encargados de desempeñar durante este período los roles de presidente, vicepresidente y secretario general; determinarán cómo quedarán conformadas las comisiones episcopales y quiénes las presidirán. Además, designarán a aquellos sacerdotes, religiosas y laicos que, desde las diversas áreas del Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano (SPEC), conducirán estratégica y operativamente la materialización de la misión de la Iglesia colombiana, a partir de las líneas propuestas por la CEC.Setenta y ocho pastores activos, incluyendo a los administradores diocesanos de Duitama, Vélez y Santa Rosa de Osos y al Provicario Apostólico de Guapi; así como doce obispos eméritos, han confirmado su participación en este encuentro. En él también se abordarán diversos temas de la actualidad eclesial y social, para definir criterios que le permitan a la Iglesia seguir respondiendo a los desafíos del país, a la luz del Evangelio, teniendo como prioridad el bien común y partiendo de las realidades concretas que se presentan en los territorios que acompañan los obispos.Fieles, ¡A orar por las elecciones en la Conferencia Episcopal de Colombia!Entendiendo que este acontecimiento es tan importante para el episcopado, como para los demás miembros de la Iglesia que peregrina en Colombia, la actual Comunidad de Presidencia, integrada por el cardenal Luis José Rueda Aparicio (presidente), por monseñor Omar Alberto Sánchez Cubillos (vicepresidente) y por el padre Jorge Enrique Bustamante Mora (secretario general encargado), proponen al Pueblo de Dios intensificar durante los próximos días su oración, teniendo presente esta intención.“La oración nos introduce en una intimidad particular con Dios, en una sociedad con Él, la oración tiene poder, por eso quiero extenderles esta invitación para una campaña de oración por la próxima asamblea de la Conferencia Episcopal de Colombia (…) La Conferencia Episcopal dinamiza todas las tareas y nos unifica en propósito al servicio del país, los invitamos para que oren intensamente, de modo que cada elección, esté dentro del marco de los propósitos de Dios; las personas que resulten elegidas, deben servir a partir del querer de Dios, contamos con su oración”, expresó monseñor Omar Alberto, arzobispo de Popayán, en representación de sus hermanos en el episcopado.El cierre de esta asamblea plenaria coincidirá con el XIII Congreso Nacional Misionero, a través del cual la Iglesia colombiana conmemorará 100 años de haberse celebrado el primero de estos encuentros. El congreso significó un despertar misionero histórico en el país y sirvió de inspiración para otras Iglesias del continente. Ahora, al celebrar su centenario, servirá para renovar las fuerzas de la tarea evangelizadora. Los obispos participarán en este congreso centenario que se estará desarrollando desde el viernes 5 hasta el domingo 7 de julio en la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá.Vea a continuación la primera emisión de Así Va La Asamblea, el informativo del Episcopado Colombiano, en el contexto del encuentro 117:
Mar 25 Jun 2024
Falleció monseñor William de Jesús Ruiz Velásquez, Prefecto Apostólico Emérito de Leticia
A sus 82 años de edad, falleció monseñor William de Jesús Ruiz Velásquez, quien, entre el 8 de julio de 1997 y el 23 de octubre del 2000, se desempeñó como Prefecto Apostólico de Leticia (Amazonas). El pastor antioqueño fue el segundo en desempeñar este oficio, antes que dicha circunscripción eclesiástica fuera elevada a Vicariato Apostólico por el papa Juan Pablo II.La muerte de monseñor Ruiz Velásquez se produjo en la madrugada de este martes 25 de junio en la ciudad de Medellín, donde vivía desde el año 2016 en una casa familiar.Monseñor William de Jesús nació el 2 de octubre de 1941 en el municipio de Entrerríos (Antioquia). Realizó sus estudios de Filosofía y Teología en el Seminario Conciliar Santo Tomás de Aquino de la Diócesis de Santa Rosa de Osos. Cursó una maestría en Catequesis en la Universidad Católica de París (Francia).Fue ordenado sacerdote para el clero esa misma jurisdicción el 11 de septiembre de 1966, por monseñor Miguel Ángel Builes. Allí desempeñó múltiples oficios pastorales, entre ellos: Vicecanciller de la Curia y Notario del Tribunal Eclesiástico (1969), Promotor Diocesano de la Pastoral Vocacional (1973), Vicario de Pastoral de la Diócesis (1995) y Coordinador de la Pastoral Familiar (1996). En julio de 1997 fue nombrado Prefecto Apostólico de Leticia, misión que desempeñó por tres años.Al regresar a su región natal, entre los años 2001 y 2016 fue párroco en los municipios de Amalfi, Yarumal y Donmatías. Allí apoyó también diferentes procesos de desarrollo municipal e impulsó iniciativas asociadas a la educación, la defensa de la vida y la institucionalidad.Fue colaborador permanente del Consejo de Administración de la Cooperativa Fraternidad Sacerdotal.El padre Luis Alfonso Urrego Monsalve, administrador diocesano de Santa Rosa de Osos, expresó sus condolencias a familiares y amigos del presbítero, e informó que las exequias se celebrarán este miércoles 26 de junio, a las 3:00 p.m., en la Catedral Metropolitana de Medellín.