SISTEMA INFORMATIVO
Eucaristía de Clausura del Congreso Nacional Misionero
Tags: eucaristía clausura congreso misionero Monseñor Castro Bucaramanga
“La misión ad gentes debe empezar en nosotros mismos”, aseguró monseñor Luis Augusto Castro Quiroga, durante la Eucaristía que cerró el XII Congreso Nacional Misionero que se celebró por estos días en Bucaramanga.
El presidente del episcopado y también arzobispo de Tunja, explicó que la misión ad gentes “debe ser una tarea de todos para dar testimonio y ser conscientes de que muchas personas en el mundo no conocen a Jesucristo”. En este marco recordó que la Iglesia no es algo individual, sino un conjunto que está llamada a multiplicarse y debe estar llena de amor. “Acoger como lo dice San Agustín “dar un beso en la mejilla a quien nos encontramos” para recibirlo con esa cercanía, porque Jesús es amor y está en todos nosotros”.
Mons. Castro citando al Papa Benedicto XVII, contó una historia en la que los creyentes “no debemos ser como payasos” de un circo que se quemó, porque la gente no creyó que era una calamidad debido a sus rostros, creyeron que se trataba de un acto más. “Entonces, no debemos ser como ellos, que nuestra cara demuestre algo y nuestros actos sean contrarios a ella. Debemos ser cristianos testigos de la verdad, que Jesucristo sea verdaderamente conocido, amado y seguido para cumplir con el mandato de hacer discípulos a todo el mundo y llevar el Evangelio”.
Finalmente invitó a los misioneros para que regresen a los sitios de misión con la luz de Cristo y la presencia amorosa de la Virgen María, consagrando a todos los participantes del Congreso a Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, Patrona de Colombia.
“El divorcio exprés”: una píldora que no sana
Lun 2 Dic 2024
Una sociedad que odia a los niños
Jue 28 Nov 2024
Vie 29 Nov 2024
Adviento 2024 en Colombia: obispos piden a los fieles fortalecer la oración y reavivar la esperanza en las comunidades
Los obispos colombianos invitan a todos los fieles católicos para que durante el tiempo de Adviento, que este año se vivirá desde el domingo 1 hasta el martes 24 de diciembre, incentiven la oración, fortalezcan los vínculos de unidad y fraternidad, propaguen gestos de bondad y cultiven anhelos de paz y de justicia en el país.Además de ser un tiempo de especial preparación para la Navidad, los prelados resaltan que, en esta ocasión, al ser el preámbulo del Jubileo Ordinario del 2025 convocado el papa Francisco bajo el lema “Peregrinos de esperanza”, todos están llamados a transmitir esperanza, entendida en sí misma como una virtud cristiana.“En la Bula de Convocación al Jubileo, el Santo Padre nos ha insistido en “no caer en la tentación de considerarnos superados por el mal y la violencia” y nos invita a redescubrir aquellas señales de esperanza que contienen el anhelo del corazón humano tan necesitado de la presencia salvífica de Dios. Precisamente, el Adviento nos pone en estrecha relación con la virtud cristiana de la esperanza, que debemos reavivar, de modo que sobreabunde en medio de nuestras comunidades y pueblos y, con ella, la vida”, expresan los pastores en el mensaje.Finalmente, los obispos se manifiestan confiados a la intercesión de la Virgen María y animan a “seguir caminando juntos como Iglesia colombiana que peregrina en la esperanza”.Vea a continuación la lectura del mensaje por parte del Secretario General de la Conferencia Episcopal de Colombia:
Mié 27 Nov 2024
Reflexiones sobre los hijos, el matrimonio y la familia a la luz de la doctrina de la Iglesia Católica: Mons. Miguel Fernando González Mariño
En estos tiempos, en los que abunda la información y las narrativas polarizadas o ideologizadas, que, a menudo, desorientan, asustan o generan incertidumbre entre los católicos colombianos, en un espacio digital denominado “Verdad con Caridad”, monseñor Miguel Fernando González Mariño, obispo de la Diócesis de El Espinal y presidente de la Comisión Episcopal de Matrimonio y Familia, comparte importantes reflexiones sobre temas de interés personal, familiar o asociados a coyunturas sociales del país, desde la doctrina de la Iglesia Católica.Con el Catecismo en la mano, de manera concreta y usando un lenguaje muy sencillo, a través del canal de YouTube de la Diócesis de El Espinal, monseñor Miguel Fernando se ha referido allí, entre otros, a aspectos asociados a la vocación y la familia, la formación de los hijos, la educación en la fe, la dignidad de los niños, los deberes de los padres en cuanto a la fecundidad, la Eucaristía y, a propósito de temas de interés general como la recién desarrollada COP16, habló de las diferencias entre ecologismo ideológico y ecología humana a partir del magisterio de San Juan Pablo II, Benedicto XVI y del papa Francisco.El interés especial de monseñor Miguel Fernando por ofrecer esta catequesis está asociado a la importancia de los temas que trabajan los obispos de la Comisión Episcopal que preside, pero también a su formación. El prelado, quien, también es Administrador Apostólico de la Diócesis de Garzón, estudió Teología Dogmática de la Pontificia Universitá della Santa Croce, por lo que, su pedagogía se basa en la exposición específica de la doctrina y se centra en la importancia de la verdad propuesta, por encima de las experiencias o percepciones.Aunque muchos creyentes creen que el Catecismo solo es una herramienta usada en la preparación de niños y jóvenes para recibir los sacramentos o para su educación religiosa, espacios como este que tiene monseñor Miguel Fernando, dejan claro que también es absolutamente necesario para fortalecer la vida espiritual de los adultos y para proporcionar mayor claridad sobre la forma en que se deben asumir o vivir ciertas situaciones a nivel familiar y social desde los principios de la fe cristiana y la doctrina de la Iglesia Católica.Vea algunos de esos episodios a continuación:
Mié 13 Nov 2024
Obispos colombianos convocan la solidaridad de todos los fieles y entidades para ayudar a los damnificados por la ola invernal
Ante la emergencia que vive actualmente Colombia por cuenta de las fuertes lluvias, la Iglesia Católica, desde la Conferencia Episcopal, convoca la solidaridad de todos los fieles, empresas e instituciones para ayudar a las más de 40.000 familias que han resultado damnificadas en medio de las inundaciones y desbordamientos. A través de un mensaje, los obispos piden a todas las parroquias y pastorales sociales del país, que, de manera urgente, pongan en marcha acciones concretas para vincular al mayor número posible de entidades y personas en esta movilización nacional por quienes tanto lo necesitan en este momento.El episcopado colombiano también invita a los fieles a sumarse tanto a las iniciativas que están liderando los 25 bancos de alimentos presentes en las regiones y administrados por la Iglesia, como al Secretariado Nacional de Pastoral Social - Cáritas Colombia a través del Fondo de Emergencias (https://caritascolombiana.org/donar/), “instituciones que trabajan en red con diversos sectores de la sociedad civil para responder, con apoyo material y espiritual, a las necesidades más urgentes de los afectados por esta emergencia”.En este contexto, el Banco de Alimentos de la Arquidiócesis de Bogotá informó que este 12 de noviembre hizo un primer envío de más de 70 toneladas de alimentos a varias de las regiones del país que han resultado más afectadas por esta emergencia, entre ellas, Chocó, La Guajira, Santa Marta, Cartagena y Tumaco. Para asegurar que la ayuda llegue a quienes más lo necesitan, el Banco de Alimentos de Bogotá está coordinando esfuerzos con los otros 24 bancos del país. Gracias al trabajo conjunto con los párrocos, líderes comunitarios y organizaciones sociales, es posible garantizar que los aportes lleguen de manera efectiva. Quienes deseen apoyar a los afectados mediante este canal, pueden hacerlo desde cualquier lugar accediendo al sitio web www.bancodealimentos.org.co, allí podrán conocer los medios de recaudo disponibles.En su mensaje, los obispos piden a las personas afectadas y a quienes están en riesgo, no perder la esperanza en Jesucristo:“Para enfrentar la tristeza y el dolor, tenemos la fe puesta en Jesucristo, nuestra esperanza, quien pasó por el mundo haciendo el bien y ayudando al necesitado en el tiempo oportuno. Como seguidores de sus enseñanzas sabemos que la unión de esfuerzos y voluntades ayudarán a vencer la indiferencia y a llevar, en su nombre, consuelo a quienes más lo necesitan”.
Mar 12 Nov 2024
Emergencia invernal y paro armado en el Chocó: Obispos de Istmina-Tadó y de Quibdó piden ayuda urgente para las comunidades
La agudización de la crisis humanitaria en el Chocó preocupa profundamente a la Iglesia Católica. A la fuerte ola invernal que enfrenta por estos días el departamento y que estaría afectando a cerca de 200.000 habitantes en 27 de los 31 municipios, se suma el nuevo paro armado anunciado por el ELN el pasado 9 de noviembre, que ya tendría confinadas a más de 45.000 personas.Ante esta crítica situación, monseñor Mario de Jesús Álvarez Gómez, obispo de la Diócesis de Istmina-Tadó, lanzó un SOS para alertar a las autoridades municipales, departamentales y nacionales, sobre la urgencia de que estas comunidades del pacífico colombiano reciban atención y ayuda inmediata, pues muchas de ellas, enfrentan, además, graves condiciones de vulnerabilidad. “Quiero, en nombre de la Iglesia, hacer un llamado para que todas las autoridades, desde el Gobierno nacional, el gobierno departamental, los entes territoriales, tomen en consideración de lo que están viviendo muchos hermanos y hermanas nuestros en este momento. Nosotros como Iglesia estamos solícitos, tanto la Diócesis de Quibdó como la Diócesis de Istmina-Tadó, a través de Secretario Nacional de Pastoral Social-Cáritas Colombia, a llegar con una mano tendida, pero esto tiene que ser concurso de todas las instituciones y, específicamente del Gobierno, a quien nuestros ciudadanos confían la responsabilidad de dirigirlos”.Así mismo, el obispo de la Diócesis de Quibdó, monseñor Wiston Mosquera Moreno, informó que los habitantes de la mayoría de veredas y corregimientos que están en la riberas de los rios Atrato y Baudó, así como quienes habitan en cuencas del Atrato, están sufriendo por esta emergencia. Pidió ayudar a quienes han perdido sus enseres, cultivos y animales, y enfatizó en que muchos necesitan ser reubicados, “porque esto no puede continuar de esta manera, cuando estos ríos se crecen, salen de sus cauces y terminan haciendo estragos”, agregó el prelado.Por otra parte, a través de un comunicado publicado este 10 de noviembre, monseñor Wiston rechazó el confinamiento al que nuevamente el ELN está sometiendo a las comunidades y pidió auxilio urgente para ellas.“Desde la Diócesis de Quibdó seguimos con atención y rechazamos con toda claridad este nuevo confinamiento al que se ha sometido a toda la comunidad en los municipios de la cuenca del San Juan en el departamento del Chocó. Situación que afecta a todas las personas residentes del territorio y a quienes por distintos motivos deben movilizarse por la región”.En contexto:Esta ola invernal en el Chocó ha producido el desbordamientos de ríos, deslizamientos de tierra y ha dejado incomunicadas, sin servicios básicos y acceso a atención médica, a miles de personas. Sin embargo, no es la primera vez que estos territorios se ven seriamente afectados, por lo que los obispos también ha insistido en la necesidad de que se fortalezcan los sistemas de prevención y se den soluciones sostenibles y definitivas.Vea a continuación el pronunciamiento de los obispos sobre la ola invernal: