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diócesis de Cúcuta

Vie 19 Mar 2021

Diócesis de Cúcuta se prepara para la gran Marcha Virtual del Perdón

Por primera vez la tradicional Marcha del Perdón, expresión de fe del pueblo de Dios que peregrina en Cúcuta, se llevará a cabo de manera virtual, debido a la pandemia de la COVID-19. Sin embargo, atendiendo a las normas del gobierno nacional y cumpliendo con el aforo permitido en templos, se va a desarrollar desde la Catedral San José como sitio central y allí se enlaza en directo con otros cinco lugares, correspondientes a las Vicarías de la Diócesis de Cúcuta, que, desde una de sus parroquias van a representar su territorio. De esta manera, el este viernes 19 de marzo a partir de las 7:00 p.m., se va a dar inicio a la Marcha Virtual del Perdón y la Esperanza 2021, con el objetivo de proclamar que “Jesucristo es nuestra esperanza” (lema que vive la Diócesis de Cúcuta este año) y que, en el espíritu de la Cuaresma y la crisis suscitada por el COVID-19, la invitación es a caminar tras las huellas del Maestro en estos tiempos difíciles. La Marcha del Perdón busca sensibilizar a los fieles y personas de buena voluntad, en el perdón y la reconciliación, y así mismo, realizar un gesto de caridad con las personas y familias más vulnerables. Por esto, desde cada una de las parroquias se va a permitir la participación de los fieles (hasta que se cumpla el límite permitido), quienes llevarán una donación de mercado para contribuir con la Campaña de Comunicación Cristiana de Bienes, que busca ayudar a familias vulnerables de una periferia de la ciudad y así mismo, vivir el Evangelio como parte de una Iglesia evangelizada y evangelizadora. En cada uno de los templos parroquiales se va a decorar con el lema del mes (trabajado a nivel diocesano), la Cruz, la imagen de la Virgen de los Dolores y se dispondrá de sonido y un proyector para ver la transmisión de la gran Marcha, donde habrá momentos específicos de oración, alabanza y adoración, donde todos los espectadores se unirán de manera dinámica. La Diócesis de Cúcuta a través de su Centro de Comunicaciones prepara un gran despliegue técnico, para permitir a esta Iglesia Particular expresar su identidad y rescatar los valores del perdón, la reconciliación, la esperanza y la paz, en esta sociedad. En www.diocesisdecucuta.com está disponible el documento con las indicaciones para el desarrollo de la Marcha, subsidios digitales para redes sociales y materiales para imprimir y preparar los escenarios. Fuente: Centro de comunicaciones Diócesis de Cúcuta

Vie 5 Mar 2021

Conviértete y cree en el Evangelio

Por: Monseñor José Libardo Garcés Monsalve - Durante el tiempo de gracia ini­ciado el Miércoles de Ceniza, que conocemos como la Cua­resma, es muy oportuno, sobre todo para reafirmar la fe en Nuestro Señor Jesucristo, fortalecer la gracia de Dios y reafirmar nuestra vocación cristiana a la santidad. Con los medios espiritua­les y las prácticas cuaresmales, apo­yados por la Palabra de Dios, la Euca­ristía, la oración y la caridad, podemos profundizar en la respuesta al llamado que Dios nos hace a ser santos como Él, tal como lo meditamos en la Pala­bra de Dios: “Ustedes sean perfectos, como su Padre celestial es perfecto” (Mt 5, 48; Cfr. 1Pe 1, 16), el primer paso es volver a Dios mediante una auténtica y sincera conversión. Al recibir la Ceniza hemos escuchado las palabras: “Conviértete y cree en el Evangelio” (Mc 1, 15), somos invita­dos a reorientar la vida hacia Dios y renovar la fe en la Buena Noticia del Reino de Dios. Se nos recuerda la ne­cesidad de conversión y penitencia que en el Tiempo de Cuaresma tenemos que reforzar para purificar nuestra con­ciencia del mal y el pecado, así puri­ficados, podamos recibir la gracia de Dios, que nos sostiene y alienta en el combate espiritual de cada día. La conversión es ir hacia adelante en el seguimiento de Jesús, sabiendo que, en un primer momento, estamos llamados a dejar un pecado, un vicio dominan­te que va arruinando nuestra vida, pero en un nivel superior es transfor­mar la vida en Cristo, para decir con san Pablo: “Ya no vivo yo, sino que es Cristo quien vive en mí” (Gál 2, 20). De tal manera, que todo nuestro actuar, sentir y vivir es en Cristo, como lo ex­presaba San Pablo en su experiencia espiritual: “Para mí la vida es Cristo” (Fil 1, 21). El momento actual está marcado por la CO­VID-19, pandemia que ha golpeado a toda la hu­manidad y ha dejado por tierra muchos proyectos políticos, económicos, sociales y también per­sonales. Sin embargo, en Jesucristo Nuestro Señor, tenemos la espe­ranza puesta y estamos seguros que es esperanza que no defrauda porque: “sabemos, además, que todo contribuye al bien de los que aman a Dios, de los que Él ha llamado según sus planes” (Rom 8, 28). Este momento también es un tiempo de purificación. Así como después del diluvio universal, Dios comenzó algo nuevo con la humanidad, así comenza­rá en este presente histórico, algo reno­vado, cuando decidamos renovar nues­tro corazón con la gracia de Dios, que se ofrece gratuitamente en este tiempo de salvación y de gracia que estamos viviendo con la Cuaresma, en camino de auténtica y sincera conversión. Conversión y fe en el Evangelio de Jesucristo, significa arrodillarnos frente al Santísimo Sacramento y con humildad pedir perdón a Dios por nuestros pecados y Él, con su amor misericordioso desde la Cruz nos per­dona, para que volvamos a Dios. Pero también, es tiempo para perdonar a nuestros hermanos por las ofensas que nos han hecho, “perdónanos nuestras ofensas, como también nosotros per­donamos a los que nos ofenden”, re­petimos con frecuencia en la oración del Padre Nuestro, sabiendo que el perdón es un beneficio para quien lo recibe, pero es sobre todo una gracia para quien lo ofrece. El perdón nos pu­rifica de odios, resentimientos, renco­res y venganzas, que son veneno para nuestra alma, siendo el perdón, la me­jor medicina, gracia de Dios y paz para nosotros. De esta manera, podemos aspirar a vivir en este tiempo de reflexión y de gracia en familias perdo­nadas, reconciliadas y en paz, porque la gracia de Dios llega a cada cora­zón que se deja renovar por el regalo del perdón. Ofreciéndolo también al prójimo, empezando por el núcleo familiar, como una oportu­nidad para volver a Dios en esta hora de incertidumbre y de cruz por la que pasamos todos, pero que nos ayudará a sanar y purificar nuestro corazón y vivir renovados por la fuerza que viene de lo alto. Conviértete y cree en el Evangelio, es también hacer presente la caridad de Cristo en los hermanos, que es un mandamiento para todos nosotros, sa­biendo que la puerta de entrada al cielo es la caridad, tuve hambre y me dieron de comer, tuve sed y me dieron de be­ber, estuve necesitado y me auxiliaron, vengan benditos de mi padre a poseer el Reino eterno, la gloria del cielo, (Cfr. Mt 25, 31 - 46). Como cristianos, como Iglesia Católica actuamos en el nombre del Señor y lo hacemos con la misma fuerza de su amor para con nosotros, que hace que todos nos sintamos her­manos, hijos de un mismo Padre. En la Diócesis de Cúcuta, este año queremos hacer presente la caridad de Cristo para con los más pobres, mediante la Campaña de Comu­nicación Cristiana de Bienes, que promueve darle de comer a más de cinco mil familias, como lo hizo Jesús cuando sintió compasión de la multi­tud. Los cristianos católicos de Cúcuta queremos a través de la Diócesis y del Banco de Alimentos, dar de comer a familias necesitadas. Por eso, la meta son cinco mil mercados para compar­tir con los más pobres de un sector de la ciudad. Ponemos en las manos de Dios esta misión y animo a todos los fieles de las parroquias a compartir desde lo poco o mucho que tengan, con otros más pobres, haciendo reali­dad en la vida personal y familiar esas palabras del tiempo cuaresmal: Con­viértete y cree en el Evangelio. Que esta Cuaresma que hemos iniciado sea un tiempo de gracia para reafir­mar nuestra respuesta de fe, espe­ranza y caridad a la llamada que Dios nos hace a la conversión y a la santi­dad, escuchando y leyendo el mensaje del Señor, meditándolo y creyendo en su Palabra y con ello convertir nuestra vida, siguiendo las palabras del Evan­gelio y comunicando esa buena noticia a los hermanos, transmitiendo su men­saje con nuestras palabras y obras de caridad. En este proceso contamos con la pro­tección maternal de la Santísima Vir­gen María y del Glorioso Patriarca San José, nuestro patrono, quienes escucharon la Palabra de Dios y entre­garon su vida para hacer su voluntad. Con María y San José queremos reno­var nuestro deseo de conversión para transformar nuestra vida en Cristo. Para todos, mi oración y bendición. + José Libardo Garcés Monsalve Administrador Apostólico de la diócesis de Cúcuta

Lun 1 Feb 2021

Cúcuta ya tiene administrador apostólico

Mediante decreto de la Congregación para los Obispos y por voluntad del Papa Francisco, fue nombrado como administrador apostólico de la diócesis de Cúcuta a monseñor José Libardo Garcés Monsalve, actual obispo de la Diócesis de Málaga-Soatá. La sede episcopal de Cúcuta estaba vacante, una vez que, quien actuaba como obispo titular, monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, fuera nombrado como obispo castrense de Colombia. Tras conocer su nombramiento, el nuevo administrador apostólico envió un video mensaje dirigido a los sacerdotes, seminaristas, religiosas, autoridades civiles, militares y de policía y a los feligreses, expresándoles su deseo de acompañarlos con la oración y “con la intención de ayudar en el crecimiento en la fe, la esperanza y la caridad, para seguir construyendo entre todos una comunidad viva de fe al servicio de Dios y de los más pobres y necesitados”.

Mar 12 Ene 2021

Diócesis de Cúcuta lamentó incendio ocurrido en el barrio La Castellana

Tras el lamentable incendio ocurrido en el barrio La Castellana de la ciudad de Cúcuta, que deja el fatídico resultado de siete personas fallecidas y otras cuatro heridas, la diócesis a través de un mensaje publicado en sus redes sociales, lamenttó los hechos y expresó su cercanía a los familiares de las víctimas y de quienes se encuentran hospitalizados. “Hace llegar a las familias afectadas el sentido pésame por la pérdida de sus seres queridos; a la vez ofrece oraciones y plegarias al Señor Dios Todopoderoso para que descansen en la Paz Eterna”, señala la misiva. Igualmente, la diócesis aseguró sus oraciones por la pronta recuperación de las personas que están en delicado estado de salud por causa de estos mismos hechos. Foto: Tomada de Internet

Mar 29 Dic 2020

Diócesis de Cúcuta cumple cuarta fase de entregas de ayudas a migrantes caminantes

La Diócesis de Cúcuta ha asistido a miles de migrantes venezolanos que cruzan a pie por esta zona de frontera, con rumbo a otras ciudades de Colombia o países de Latinoamérica. En su camino, la Iglesia les acompaña y mitiga algunas de sus necesidades básicas. Con ayudas alimentarias, de higiene personal y elementos de bioseguridad, los migrantes caminantes han sido beneficiados en las fases que ha desarrollado la Iglesia Particular de Cúcuta para atenderlos. En las primeras tres fases, la asistencia se dio gracias a la Fundación Populorum Progressio. Durante el mes de noviembre, se unió a esta obra de caridad de la Iglesia Particular de Cúcuta, la Conferencia Episcopal Alemana a través de la Acción Episcopal Adveniat, que apoya a las Iglesias en América Latina y el Caribe en los proyectos pastorales. De esta manera, se ejecuta la cuarta fase de ayudas a migrantes caminantes, con la entrega de 9.000 kits de seguridad, higiene y alimentación. En la recta de Los Vados (municipio de Los Patios, Norte de Santander), se encuentra la sede de la Casa de Paso ‘Divina Providencia’, desde donde se acompaña en el camino a los migrantes. Allí se han estado entregando estos paquetes de ayudas entre las 7:00 a.m. y 1:00 p.m. cada día. La Diócesis de Cúcuta y Adveniat obran juntos, siguiendo la invitación del Papa Francisco de ir a las “periferias existenciales” (donde predominan el dolor y la injusticia), de llegar, como Iglesia, con mayor intensidad hacia los pobres. Fuente: Centro de comunicaciones de la diócesis de Cúcuta

Mié 16 Dic 2020

Diócesis de Cúcuta, más de dos décadas llevando fe y esperanza a través de la novena de Navidad

La diócesis de Cúcuta invita a toda la comunidad a acercarse a las parroquias y adquirir la novena de Navidad, para vivir este tiempo difícil en compañía de la familia, en torno al pesebre, acatando todas las recomendaciones de bioseguridad, para que, en el calor de hogar, crezca la fe en Dios y preparen el corazón para el nacimiento del Salvador. Esta Iglesia particular de Cúcuta, como guía espiritual de esta porción del pueblo de Dios, ha realizado por más de 25 años la novena de Navidad, asumiendo el reto de entrar en cada uno de los hogares para fortalecer la fe y llevar un mensaje de esperanza y paz, suscitado por la encarnación del Hijo de Dios. Esta iniciativa se ha materializado cada año, gracias al apoyo de empresas generosas de la región nortesantandereana, instituciones públicas y privadas, y personas de buena voluntad, se imprimen 110.000 novenas, las cuales son distribuidas a los fieles del área metropolitana de Cúcuta y municipios que pertenecen a este territorio eclesial. Este material es cuidadosamente elaborado por la diócesis de esta ciudad, tanto en su contenido, como en diseño y presentación, ya que hace parte importantísima de la tradición cristiana. En la novena de Navidad se plasman las oraciones tradicionales de esta celebración, pero además se incluyen cada año: lemas, signos, símbolos y consideraciones concretas para cada día, correspondientes a las realidades actuales, con el fin de promover valores cristianos, éticos y humanos, que fomenten la sana convivencia con el prójimo. En esta Iglesia diocesana se ha querido rescatar el sentido verdadero en la celebración del nacimiento del Niño Dios y animar a los creyentes a través de la oración y la reflexión a vivir el amor y la caridad de Jesús. Por medio de la novena de Navidad, se promueve la construcción de paz y reconciliación que esta zona de frontera necesita. Fuente: Centro de Comunicaciones de la diócesis de Cúcuta

Vie 20 Nov 2020

La diócesis de Cúcuta acompaña a los damnificados del invierno

La diócesis de Cúcuta, atendiendo el compromiso cristiano de encontrarse con el necesitado, a través de diversas iniciativas ha ejercido la caridad de Cristo, acompañando espiritual y materialmente a los más vulnerables, ya sea en situación de pobreza; a las personas que sufren las consecuencias del fenómeno migratorio; el innvierno, víctimas del conflicto; y quienes soportan carencias por la pandemia; entre otros. Durante esta semana ha estado ayudando a cientos de personas damnificadas por la ola invernal. Los días 18 y 19 de noviembre, la Iglesia católica ha acudido a los conjuntos residenciales Los Arrayanes y Rincón del Rodeo, y al barrio 23 de enero, lugares en donde el invierno ha ocasionado múltiples desastres. La Iglesia Particular de Cúcuta, a través del Banco Diocesano de Alimentos (BDA) y la Casa de Paso ‘Divina Providencia’, ha brindado hasta el momento unos 1.600 almuerzos; 1.000 refrigerios; 30 colchonetas; cobijas; y pañales. Beneficiando aproximadamente a 180 familias. El BDA está adelantando un censo para continuar llegando a estas comunidades en los próximos días y apoyar a los afectados. En Norte de Santander, las autoridades civiles junto a organizaciones públicas, privadas, y la Iglesia católica, se han unido para ejecutar acciones que mitiguen las necesidades por las que están pasando las personas que perdieron sus pertenencias. Por lo que, están invitando a la ciudadanía a donar alimentos no perecederos, útiles de aseo, colchonetas y ropa en buen estado. Fuente: Centro de comunicaciones de la diócesis de Cúcuta

Lun 19 Oct 2020

Diócesis de Cúcuta brinda ayuda en las carreteras a los migrantes caminantes

Tras varios meses represados en la frontera entre Colombia y Venezuela, y muchos otros sin encontrar posibilidades en su país de origen, los migrantes caminantes venezolanos reaparecieron en las carreteras nortesantandereanas, rumbo al interior de Colombia o a otro país, con el objetivo de mejorar sus condiciones de vida. En el contexto de la pandemia, estas personas enfrentan un problema más de salubridad en su travesía, el posible contagio de COVID-19, que podría agravar cualquier situación de salud que presenten o afectar severamente a niños y ancianos. Esta situación de los caminantes fija la atención de la diócesis de Cúcuta, que, acudiendo al llamado del Papa Francisco de acoger, proteger, promover e integrar, une fuerzas para salir a su asistencia y acompañamiento espiritual. De esta manera, gracias a la Fundación Papal, Populorum Progressio, la Iglesia Particular de Cúcuta recibe una tercera fase de donaciones de parte del Papa Francisco, la cual se compone de 3.330 paquetes alimenticios y 3.330 kits de higiene y protección (el cual incluye gel antibacterial y tapabocas). Estos serán distribuidos en un tiempo de 21 días, realizando entre 250 y 300 entregas por jornada. A través del Banco Diocesano de Alimentos (BDA) se organiza todo el despliegue para ejecutar las donaciones; la primera entrega se realizó el martes 13 de octubre, beneficiando a los caminantes que transitaban entre Cúcuta y el municipio de Chinácota. Por su parte, el BDA añadió a los paquetes bebidas hidratantes, frutas y gorras con la imagen de Su Santidad, el Papa Francisco. Centro de Comunicaciones de la Diócesis de Cúcuta