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Iglesia

Mié 14 Nov 2018

Iglesia promueve modelo de integración de actores sociales en Caquetá

El proyecto que integra excombatientes, comunidad local, policías y soldados, permite la puesta en marcha de un sistema generador de energía eléctrica único en el país (hidrotornillo) y segundo en el mundo, el cual ha empezado a funcionar en el río Pato, en la vereda de Miravalle, Caquetá, a dos horas de San Vicente del Caguán. La iniciativa permitió la capacitación y formación a los miembros del Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (ETCR) de Miravalle y jóvenes de la comunidad local, con el fin de incentivar el uso de energías limpias y sistemas de producción favorables para el medio ambiente. Esta es una propuesta liderada por la Conferencia Episcopal de Colombia, a través del Secretariado Nacional de Pastoral Social, Caritas Noruega, el Gobierno de Noruega y el Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (ETCR) de esa zona. También se hace entrega de un sistema que combina la producción de peces y la producción de hortalizas sin suelo (acuaponía), proyectos que tuvieron ocho meses de construcción, instalación y capacitación a excombatientes. Por su parte, monseñor Héctor Fabio Henao Gaviria, director del Secretariado Nacional de Pastoral Social, expresó que “esta apuesta innovadora, con tecnología de punta y respetuosa con la naturaleza, es un modelo de paz que demuestra que la reincorporación de excombatientes a la vida social y económica hoy es una realidad”. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar boletín de prensa[/icon] [icon class='fa fa-download fa-2x'] Galería fotos[/icon]

Mié 14 Nov 2018

Iglesia en Magangué prepara jubileo diocesano

Desde el pasado 13 de noviembre la Iglesia en Magangué se encuentra celebrando su Asamblea Diocesana para la Misión Evangelizadora 2018, un espacio donde está siendo presentando el itinerario del jubileo diocesano del año 2019. Esta Asamblea ha sido la ocasión para conocer, estudiar y preparar el itinerario bíblico, y así fortalecer la vida de las pequeñas comunidades. Igualmente, evaluar el año pastoral 2018 y programar el año 2019, con el fin de celebrar con gozo el jubileo de los cincuenta años de la Diócesis. Preside este espacio pastoral el obispo de esta ciudad, Monseñor Ariel Lascarro Tapia, participan los sacerdotes y laicos pertenecientes a las siete comunidades vicariales como pastoralmente está organizada la Diócesis de Magangué. El cierre se hará con una eucaristía el próximo 15 de noviembre en la Catedral Nuestra Señora de La Candelaria, donde se dará inicio al año jubilar de esta Iglesia particular.

Mié 14 Nov 2018

Lo que nada nos cuesta, hagámoslo fiesta

Por: Mons. Froilán Tiberio Casas Ortiz - Vivimos la cultura del despilfarro. Veamos algunas muestras de esta cultura. Usted va a la casa de una familia de estrato uno y encuentra la llave abierta y dos fugas de agua: como su recibo de cobro está subsidiado por los estratos cuatro, cinco y seis, entonces, a malbaratar el agua. Muchos de nuestros coterráneos van a los Estados Unidos de América, allí sí que se vive la cultura del consumismo; como es un país tan extenso y tan rico, se abusa de esa misma riqueza. Vaya usted a Europa y allí es otro cuento. Ellos han sufrido dos guerras seguidas y, además, su territorio es pequeño; entonces, tienen un cuidado enorme con sus recursos naturales y optimizan todos los espacios. Vaya usted a Israel, país pequeño y, además con una enorme escasez de agua. Hay que ver cómo cuidan ese sagrado líquido. Siendo la mayor parte de su territorio desértico, producen comida: cítricos, verduras y trigo de exportación; el manejo hídrico por goteo, ofrece parques y zonas verdes llenas espléndidos jardines. Observe usted a una familia que se ha enriquecido de la noche a la mañana: ¡cómo despilfarran! Esos ricos emergentes son unos consumidores de miedo. Los chicos de estas familias suelen ser exigentes, malcriados y creen que todo lo pueden hacer pues tienen dinero. ¡Ah! El que no ha visto a Dios al verlo se asusta. Esos chicos no tienen el sentido del valor de las cosas: como han sido “criados a toda leche”, gastan y gastan y cuando pueden humillar, lo hacen olímpicamente. ¡Ay, si esos tales especímenes llegan al poder! Son tan arrogantes como pavos reales en su conquista “amorosa”; son atrevidos con los mayores y quienes no son de su artificial rango son tratados con altivez y desprecio. Observemos otros aspectos: ¡cuánto se pierde en las obras públicas! Muchas son obras inconclusas, maquinaria en procesos de herrumbre y descomposición, edificios a mitad de camino. Son bienes mostrencos que no tienen ningún doliente, -sí, pero cuánto dinero se gastó allí proveniente de nuestros impuestos-. ¡Ah, si todos nuestros impuestos se invirtieran! Sencillamente tendríamos excelentes vías, excelentes servicios hospitalarios, excelentes parques y zonas de recreación, excelentes centros educativos. Entonces, ¿cuándo será realidad lo que soñamos los colombianos honestos? Cuando cambie la cultura del robo, del dinero fácil, del amiguismo y de la ley de la ventaja. Por favor, no busquemos atajos, cumplamos la ley y los resultados se verán pronto. Por favor, no más vivienda gratis. Esto es un sofisma de distracción; lo que usted no paga, otro lo ha pagado. Son nuestros impuestos los que financian las mal llamadas “viviendas gratis”. Sacamos a los campesinos, que son productivos de alguna manera y los metemos a unas cajas de bocadillo a hacerlos improductivos y exigentes. Por favor, cambiemos la centenaria política del subsidio a la mendicidad y volvámoslo subsidio a la productividad: no premiemos la pereza, el despilfarro y falta de orden en el vivir; estimulemos al productor, al que hace algo por el país. Con una política de estas acabaremos en el corto tiempo la pobreza y todos saborearemos la paz. + Froilán Tiberio Casas Ortiz Obispo de Neiva

Mié 7 Nov 2018

Las “Fake news” o Noticias “falseadas”

Por: Mons. Ismael Rueda Sierra - Es ya un tema de mucha preocupación en los diferentes círculos sociales y culturales, como también en las redes sociales, protagonistas de primer orden, el creciente fenómeno de las “fake news” o noticias falsas o falseadas, como le llaman otros, definidas como “un producto pseudo periodístico difundido a través de portales de noticias, prensa escrita, radio, televisión y redes sociales cuyo objetivo es la desinformación deliberada o el engaño” (cfr. Enc. Wikipedia). El Papa Francisco, que ha criticado en muchas de sus intervenciones y comentarios, la mentalidad del chisme, por el daño que hace a personas y comunidades, se refirió de manera muy concreta a este fenómeno en la Jornada Mundial de las Comunicaciones del presente año, haciendo ver entre otras cosas, lo que es falso en las noticias falsas, por la desinformación que emiten y su naturaleza mimética, o sea la capacidad de aparecer como plausibles; además por ser capciosas y capturar la atención de los destinatarios, poniendo su acento en prejuicios extendidos y suscitando emociones como el ansia, el desprecio, la rabia y la frustración. Contienen un alto efecto manipulador, con dificultad para desenmascararlas y que al desinformar, llevan a desacreditar al otro o a presentarlo como enemigo. Pero éstas no son nuevas en la historia. El mismo Francisco, dice que la “astuta serpiente” fue quien difundió la primera fake news, con las funestas consecuencias del pecado. Los primeros cristianos fueron perseguidos debido, entre otras razones, a rumores falsos que circulaban en la población. No olvidemos tampoco las acusaciones de Nerón sobre el incendio de Roma, (aún no totalmente esclarecido) del que atribuye su causa a los cristianos. También se podría atribuir a noticias falseadas, la leyenda de El Dorado, en el Nuevo Mundo. Y esto es posible porque detrás de esta “cultura”, aparece generalmente la codicia y el ansia de poder. La respuesta estará siempre en la búsqueda honesta y sincera de la verdad, la justicia y la caridad. “La verdad os hará libres” (Jn 8.32) recuerda el evangelio de Juan. El octavo mandamiento de la ley de Dios se enuncia como “no levantar falso testimonio contra el prójimo ni mentir”. En este sentido podríamos decir, que desde la ética y moral cristiana, es éste el mandamiento más afectado por las “fake news”. La nueva etapa evangelizadora propuesta por la Iglesia, en el coincidente momento de una nueva época de la historia, ha de llevar consigo, y en la práctica cotidiana de los caminos pastorales que la procuran, especialmente en sus animadores y misioneros, la ascética y cuidadosa revisión en el uso pertinente de las redes sociales y tantos medios actuales de difusión e intercambio comunicacional, para que ellos sean un instrumento oportuno para llevar la Buena Nueva, la noticia verdadera, la buena noticia que alegra el corazón, construye la paz como fruto del respeto al otro en su dignidad y en el derecho que tiene, de conocer la verdad para ser libre. Fraternalmente. + Ismael Rueda Sierra Arzobispo de Bucaramanga

Mié 7 Nov 2018

“La buena política está al servicio de la paz”, tema del Mensaje de la Paz 2019

El anuncio para la próxima 52 Jornada Mundial de la Paz que se celebrará el 1 de enero de 2019, lo dio a conocer la Oficina de Prensa de la Santa Sede. Según lo señalaron en un comunicado, este mensaje remarcará que “la responsabilidad política pertenece a cada ciudadano y, en particular, a quien ha recibido el cargo de proteger y gobernar”. El texto completo de este mensaje, que será firmado por el Papa Francisco, se elaborará con las sugerencias del Dicasterio para el servicio del Desarrollo Humano Integral, cuyos responsables subrayan la importancia de esta misión política para proteger el derecho y animar el “diálogo entre los actores de la sociedad, entre las generaciones y entre las culturas”. “No hay paz sin confianza recíproca. Y la confianza tiene como primera condición el respeto de la palabra”, añade el comunicado. De este modo, “el compromiso político –que es una de las más altas expresiones de la caridad– toma en cuenta la preocupación por el futuro de la vida y del planeta, de los más jóvenes y de los más pequeños”. Además, este próximo mensaje recuerda las palabras de San Juan XXIII en la Encíclica Pacem in terris (1963) en donde escribió que “cuando el hombre es respetado en todos sus derechos brota en él, el sentido del deber respetar los derechos de los otros. Los derechos y los deberes del hombre aumentan la conciencia de pertenecer a una misma comunidad, con los otros y con Dios”. En este sentido, la celebración de la próxima Jornada Mundial de la Paz subrayará también que todos están “llamados a llevar y a anunciar la paz como buena noticia” de un futuro en donde cada persona sea respetada en su dignidad y en sus derechos.

Sáb 3 Nov 2018

Fallece el padre de Monseñor Abril González

La Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) expresa sus más sentidas condolencias a Monseñor Jaime Cristóbal Abril González, Administrador Diocesano de Nueva Pamplona, por el sensible fallecimiento de su padre el señor Cristóbal de Jesús Abril García. Las exequias se realizarán mañana domingo 4 de noviembre a las 3:30 p.m., en la Capilla San Jorge, del Parque Memorial Jardines de Santa Isabel, Tunja. El episcopado colombiano al elevar sus plegarias por el eterno descanso del señor Cristóbal de Jesús, manifiesta su compañía y solidaridad con la familia de Monseñor Abril.

Sáb 3 Nov 2018

El ministerio apostólico del Obispo

Por: Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía - El Espíritu Santo y la Iglesia me conceden la gracia de celebrar 25 años de episcopado el 15 de noviembre de 2018, memoria libre de San Alberto Magno, obispo y doctor de la Iglesia. Al dar gracias al “Pastor y Obispo de nuestras almas”, Jesucristo, (1Pe2,25), acompañado con la Iglesia de Cali, a la que fui destinado por el Papa, ahora emérito, Benedicto XVI, desde mediados del año 2010, y bendecido con el inmenso apoyo de mis hermanos Obispos Auxiliares, Luis Fernando y Juan Carlos, confieso sinceramente mi alegría, no obstante la inmensa desproporción existente entre el ministerio confiado y mi capacidad humana, limitada por mi condición de pecador y por el peso de mis defectos. Dirijo, por ello, mi mirada a Dios y su gracia, e invito a todos a reconocer la acción del Señor, de quien “somos siervos inútiles”, en deuda del deber ser y del deber hacer que él nos pide (Lc17,10). Él es y será siempre “El Poderoso que hace obras grandes” por quienes, como María, se dejen conducir a la “humildad de su esclava”. Que me incluya siempre yo mismo, y me incluyan ustedes todos, los creyentes, en la oración por mi conversión a la humildad y gratuidad, al amor incondicional y fiel. “Por la gracia de Dios, soy lo que soy”, testimonia San Pablo (1Cor15,10), al considerarse indigno del nombre de apóstol, de enviado del Señor Jesús. “Como el Padre me envió, también yo los envío”, dice el Señor Resucitado a sus discípulos (Jn20,21). “Esta divina misión confiada por Cristo a los apóstoles ha de durar hasta el fin del mundo (Mt28,20), puesto que el Evangelio que ellos deben propagar es el principio de toda vida para la Iglesia. Esta es la razón por la cual los apóstoles se cuidaron de establecer sucesores en esta sociedad jerárquicamente organizada” (Vaticano II, Lumen Gentium,20). Hay, pues, una continuidad ininterrumpida de los apóstoles a los obispos, o mejor, del colegio de los apóstoles y su misión apostólica al colegio episcopal. Es lo que se denomina sucesión apostólica, que lo es, también y siempre, colegial, pues la sucesión es colectiva: cada obispo es sucesor de los apóstoles, pero no lo es de un apóstol determinado, salvo el Obispo de Roma que sí sucede al apóstol Pedro. La sucesión como continuación y herencia sacramental, trasmitida con el sacramento del orden, con el que se recibe la plenitud del sacerdocio, está unida con la “misión y ministerio apostólico” de enseñar, santificar, pastorear, enviar y ser principio y fundamento visible de unidad en su Iglesia local o porción del Pueblo de Dios que le ha sido confiada al Obispo. El Papa Juan Pablo II, hoy santo de la Iglesia, quien me eligió como Obispo y quien había ordenado al arzobispo Paolo Romeo, entonces Nuncio en Colombia y hoy Cardenal emérito de Palermo, Italia, definió al obispo como “servidor del Evangelio para la esperanza del mundo”, y trazó el perfil del obispo ideal con estas palabras: “la figura ideal del obispo es la del pastor que, configurado con Cristo en la santidad de vida, se entrega generosamente por la Iglesia que se le ha encomendado, llevando al mismo tiempo en el corazón la solicitud por todas las Iglesias del mundo” ( “Pastores Gregis”,1). Mirando el recorrido en estos preciosos cinco lustros, debo reconocer que han sido “las gracias de estado”, es decir, la asistencia que Dios da a los hombres para poder cumplir bien su propio deber de estado y santificarse, tanto en lo exterior, creando una situación favorable al cumplimiento del propio deber, como en lo interior, concediéndole las gracias actuales apropiadas, lo que ha enriquecido cada etapa, cada momento y pasaje de este itinerario vivido. Las gracias de estado tienen como efecto ponernos en condiciones de dar a Dios la respuesta que espera de cada uno de nosotros en particular, en su situación concreta. En esta celebración jubilar de “bodas de plata” en la consagración episcopal, no puedo menos que agradecer al Señor y al Padre de la Heredad, ofrendándome con Cristo en el misterio eucarístico y renovando mis compromisos y promesas del día de la ordenación. Con actitud penitente y disponibilidad de corazón, pido perdón al Señor, a la Iglesia y a cada persona a la que le he fallado de palabra, obra y omisión. Confío el resto de mi vida al querer de Dios. Él bendiga y recompense a quienes me concedan su indulgencia y me dé la gracia de poder acompañar, sostener y alentar en la fe, en la misión y en la fidelidad de todos a Cristo, a su Iglesia y a la humanidad y dignidad de cada persona a la que estemos destinados. Mi abrazo y bendición a toda la amada Iglesia arquidiocesana de Cali. Seamos testigos y servidores de la esperanza cristiana, cuando los tiempos y realidades desdicen tanto de la vida, del amor y de la paz. + Darío de Jesús Monsalve Mejía Arzobispo de Cali

Jue 1 Nov 2018

Fronteras invisibles generan terror y desplazamiento en el Cauca: Iglesia

La Iglesia lamentó los hechos violentos que se produjeron este lunes 29 de octubre, en el municipio de López de Micay, en el Cauca, que dejaron 6 muertos, 2 personas desaparecidas y dos heridos. Así lo expresó en un comunicado el obispo de la diócesis de Guapi, monseñor Carlos Alberto Correa Martínez, quien expresó su saludo de condolencia a los familiares de las víctimas. “La Iglesia se une al clamor de todos los hombres y mujeres de buen corazón que gritan NO QUEREMOS QUE EN NUESTRO TERRITORIO SE SIGA DERRAMANDO MAS SANGRE, BASTA YA Y RECHAZAMOS TODOS ESTOS ACTOS VIOLENTOS QUE LLEVAN A LA SOCIEDAD CIVIL A PERDER LA FE Y LA ESPERANZA DE SOÑAR CON UN PAIS EN DONDE REINE LA RECONCILIACION Y LA PAZ”, señaló. Monseñor Correa Martínez, advirtió sobre el panorama sombrío que viven las comunidades en esta zona del país por cuenta de la disputa territorial entre los diferentes grupos armados “los cuales han venido creando fronteras invisibles en los principales ríos de este municipio, como el Micay y el Naya generando miedo, zozobra, desplazamiento y muchas dificultades en la movilidad”. Por lo anterior, hizo un llamado a la autoridad municipal, departamental y nacional para que garanticen el bienestar territorial de la zona, según el mandato de la Constitución: “Proteger la vida, honra, bienes, creencias y demás derechos y libertades; mantener la integridad territorial y asegurar la convivencia pacífica y la vigencia de un orden justo”. Igualmente, pidió a los actores del conflicto para que cese la ola de violencia y paren el derramamiento de sangre en este territorio. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon] Foto: Tomada de Internet