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papa francisco

Jue 28 Sep 2023

“Uno sigue siendo el ser humano pequeño, frágil, que sufre, que se equivoca”: Mons. Rueda Aparicio

Antes de viajar a Roma para ser creado cardenal de la Iglesia Católica Universal por el papa Francisco el próximo sábado 30 de septiembre, en una conversación tan sencilla como su esencia misma, monseñor Luis José Rueda Aparicio, compartió detalles de su historia de vida con el equipo de comunicaciones de la Conferencia Episcopal de Colombia, organismo que preside desde el año 2021.“La cuestión es que cuando lo eligen a uno cardenal, generalmente la figura es muy superficial. Miran desde afuera, se les olvida que los miembros de la Iglesia somos seres humanos de carne y hueso, que nacimos en una familia”, inicia afirmando el prelado.Durante la conversación, el arzobispo santandereano narró detalles que hasta hoy han sido poco conocidos públicamente. Algunos muy íntimos, otros, familiares y los demás, asociados a su camino pastoral. Todos dan cuenta de cómo ha influido su origen humilde, el ejemplo y amor de su familia, lo que ha aprendido de sus hermanos en la fe, las realidades de las tres jurisdicciones eclesiásticas que ha pastoreado y sus convicciones éticas y sociales, en quien es hoy.“A la Iglesia le debo todo”Con convicción y gratitud profunda monseñor Luis José, bautizado a los 15 días de nacido, como sus otros 11 hermanos, afirma que a la Iglesia le debe todo. Sin embargo, hace una precisión: “A la Iglesia pueblo de Dios, no a la Iglesia solamente “jerarquía”. Porque cuando se habla de la Iglesia unos piensan en los obispos, en el Papa, en los sacerdotes, y se les olvida que papá y mamá, que los hermanos laicos, que los casados, que los sobrinos, las sobrinas, son Iglesia”.El primado de Colombia cuenta, por ejemplo, que gracias a Dios, a través de uno de los sacerdotes de su tierra natal, para quien su padre trabajó en la construcción de un templo, él y su familia, lograron tener casa propia.“¿Cuál es la historia? En San Gil, hasta 1950, solamente había una parroquia. Pero en esa década ya empezó San Gil a crecer un poquito más, entonces el obispo de ese tiempo dice: “Nos toca crear otra parroquia” y un donante dice “yo”, y donó un terreno y otro donante donó otro terreno. Entonces el párroco de ese tiempo se ve en el dilema de no rechazar a los dos donantes y los dos lotes buenos para ser parroquia”, cuenta el pastor.“Optó por uno y se la jugó por otra medida”-continúa explicando-, “dijo entonces al otro donante: “Allá en el lote que nos donó, no vamos a construir el templo, pero vamos a construir siete casas. En el templo duraron más de cinco años construyendo el templo y mi papá, que trabajaba en construcción, Luis Emilio, trabajó todos los años””.Cuenta después que sorpresivamente y con una especie de “responsabilidad social eclesial”, el sacerdote terminó asignándoles con escritura cada una de esas casas a siete de los trabajadores que permanecieron siempre en la obra. “Por eso tenemos casa propia”, puntualiza monseñor. Casa que aún conservan como patrimonio familiar, que visita y en la que comparte con los suyos cada vez que su ministerio se lo permite.Sobre su infancia, hay detalles muy especiales en el relato. “Los vecinos del barrio, los que me conocen en San Gil saben que no era un ángel, que era normal, tampoco era un vago porque trabajábamos mucho, pero pero éramos normales, sin pretender santidades que no existen. Pero algo sí era muy importante: todo los domingos, misa y comunión”, comenta monseñor.Uno de los 21 nuevos cardenales que tendrá próximamente la Iglesia, el hijo de Luis Emilio y Socorro, junto a sus hermanos y como seguramente muchos otros de su época, llegaba a acuerdos con su padre para participar de la Eucaristía dominical: “Llegó la adolescencia y nosotros le negociábamos a mi papá: no vamos a la misa de diez porque nos corta la mañana, no vamos en la noche porque en la noche es mejor ir con las amigas. Entonces más bien, madrugamos a Misa y salimos de eso. Era la forma de decirle a mi papá y él decía “listo entonces, pero van a misa y comulgan. Y esa era nuestra tarea”.Ese adolescente también experimentó su vida afectiva. Vivió desde el inicio del bachillerato y durante seis años, una relación muy especial con Nancy, una joven a la que quiso mucho y con quien compartía, entre otros, su gusto por jugar ping pong durante largas horas. Además, es seguidor del fútbol (hincha del Atlético Bucaramanga, por cierto), aprendió de construcción gracias a su padre y de metalistería gracias a su colegio, derramó lágrimas durante su servicio militar obligatorio del que fue “rescatado” por su madre en La Guajira y más adelante, se vinculó al laboratorio de una cementera.“Yo pasaba de la empresa la casa por un templo donde está el cementerio de San Gil y yo entraba a rezar un ratico con mi uniforme, con mi overol y yo veía al Cristo, era un Cristo crucificado, pero con los ojos abiertos. Hasta ahora entiendo que era un Cristo agonizante, no estaba muerto, no es un Cristo con los ojos abiertos. Yo decía: pero, ¿Él está muerto o está vivo? Porque tiene los ojos abiertos. Y me impresionaba mucho y eso se me fue metiendo, hasta que un día le dije a ella: yo quiero ser sacerdote”.A monseñor Rueda le costó entender su vocación por esa “extraña” manera en que sintió el llamado a los 19 años de edad. En aquella época hasta llegó a pensar que ingresar al seminario podía ser una especie de traición a Nancy, con quien seguía compartiendo; también a su familia, pues él aportaba para el sostenimiento de su casa, ya su padre estaba enfermo, irse limitaba por completo sus posibilidades de seguirlo haciendo.Tomar la decisión de iniciar su vida sacerdotal fue una reto, pero lograr que le creyeran y poder ingresar al Seminario Conciliar San Carlos de San Gil, significó uno mayor. Aunque su padre lo había animado a dar el primer paso para empezar ese camino, advirtiéndole que debía hacerlo bien, varias pruebas se le cruzaron en él, entre ellas, lograr que algún sacerdote le diera una especie de “carta de recomendación”.“Yo quiero ser sacerdote. ¿Pero eso cómo es, señor obispo?”“Yo quiero ser sacerdote. ¿Pero eso cómo es, señor obispo? ¿Entonces él se rió, me atendió, era una persona muy seria, muy respetuoso y me dijo Usted tiene novia? Yo dije Sí, le digo que sí. Me dice váyase, no sé cómo será eso. ¿Y yo le dije no, así como tal, no? Y entonces él me dijo: Es bueno que consiga una amiga, que usted experimente su afectividad, que interactúe con ella. Salí aburrido de ese diálogo, debí haberle dicho la verdad a monseñor Víctor”, cuenta, con cierta emotividad, el hoy presidente del episcopado colombiano, al referirse a su primera conversación con monseñor Victor López Forero, el arzobispo emérito de Bucaramanga, en ese tiempo…,quien precisamente el pasado 23 de septiembre partió a la casa del Señor.Aunque finalmente consiguió esa carta con el capellán del Colegio Nacional San José de Guanentá Integrado de San Gil, uno de los cinco por los que pasó porque, coincidencialmente, los cerraban o se trasladaba. Él mismo cuenta que no fue realmente activo a nivel de vida parroquial. Aunque la Misa de los domingos y el rezo del Santo Rosario en su hogar, eran sagrados, no fue de participar activamente en comunidades ni grupos. De hecho, recuerda que en esa exploración, una de las primeras cosas que hizo fue ir a una convivencia vocacional y no le gustó.“Uno aprende a ser cura con la gente”Finalmente monseñor Luis José ingresó al seminario, disfrutó de su proceso y tras terminarlo, a los 27 años de edad, fue enviado por monseñor Leonardo Gómez Serna, a una parroquia rural en una localidad llamada Albania que en ese tiempo pertenecía a la Diócesis de Socorro y San Gil y estaba ubicada a siete horas de San Gil.“Quiero advertirle que de allí se han retirado cuatro sacerdotes por distintos motivos. Uno por el alcoholismo, otro porque se enredó con una dama, pero yo confío en usted y está listo”, le dijo monseñor Gómez Serna al Luis José Rueda de aquella época, aún inexperto, que jamás llegó si quiera a sospechar la misión que el Santo Padre le encomendaría hoy. “Y me di cuenta de una cosa que uno en el seminario aprende la teoría, pero que uno aprende a ser cura con la gente”, agregó con firmeza el cardenal electo.Hoy, 33 años después de ordenado, recuerda con cariño pero también con cierta sorpresa su camino episcopal. Tres jurisdicciones pastoreadas en regiones muy distintas, un periodo en la presidencia del episcopado que terminará en julio del 2024 junto a sus hermanos monseñor Omar Alberto Sánchez Cubillos y Luis Manuel Alí Herrera, vicepresidente y secretario general de la Conferencia, respectivamente. Ademas, una gran cantidad y diversidad de lugares y personas que ha podido conocer, desde los más humildes y necesitados, hasta las personalidades más destacadas de la vida social y política del país.“Yo pensé que los obispos eran de familias ricas”Aunque significó una alegría muy grande para sus coterráneos, la noticia de que el papa Benedicto XVI lo había nombrado obispo de la Diócesis de Montelíbanofue toda una sorpresa, no solo para él sino también para su familia.“El día que avisaron que iba a ser obispo yo ya sabía, pero toca guardarlo en secreto. Y uno está ahí, como con “el entre pecho y espalda”, con ese secreto. Cuando ya se supo, hubo mucha alegría en la familia y en San Gil. Solo en la tarde pude ir a comer con mi madre y le dije, Y ella dijo: “Yo pensé que los obispos eran de familias ricas”. Fue la expresión que nunca se me olvida”, narró monseñor.El prelado partió hacia esta Iglesia particular en Córdoba, región que no conocía, en la que tuvo que acompañar durante seis años a las comunidades en medio de complejos retos del contexto social por cuenta de situaciones asociadas al conflicto armado, pero a la que quiso mucho.“Yo aprendí a ser obispo con los sacerdotes”“Estando allá, cambia la ruta porque renuncia Benedicto y nombran a Francisco, y Francisco me pasó a Popayán y yo llegué a ser Arzobispo de Popayán. Eso es una cosa muy grande, pero uno sigue siendo el ser humano pequeño, el ser humano frágil, el ser humano que sufre, que se equivoca”, afirma monseñor.Al conocer y celebrar la Eucaristía en todas sus parroquias, monseñor Luis José se enamoró del Cauca, de su gente, su cultura y su geografía. Sin embargo, no había cumplido los dos años aún y es notificado en mayo de 2018, a través de monseñor Luis Mariano Montemayor, nuncio apostólico en Colombia durante esta época, que el Santo Padre lo había nombrado arzobispo de Bogotá.“¡No puede ser! ¿Suceder a monseñor Rubén Salazar Gómez? ¡Esas son palabras con mayúscula sostenida!”La capital, tan grande y diversa, recibió en junio de 2020 a monseñor Luis José, en plena época de confinamiento obligatorio por la pandemia del COVID-19. Los retos de esa época y la responsabilidad tan enorme que sentía en ese nuevo encargo eran inmensos.Su misión en Bogotá y, al tiempo, la tarea de presidir el episcopado colombiano, le han permitido al arzobispo hacer llegar un mensaje más directo a diferentes actores y sectores frente a sus preocupaciones por las realidades que vive hoy el país. Su insistencia en la defensa de la vida y en la necesidad de construir la reconciliación y la paz, desde la justicia, el amor y el respeto por los derechos humanos, han sido permanentes.“Y aprendí a conocer Bogotá y a amarla, y a darme cuenta de que Bogotá no es lo que otros piensan desde fuera. Algunos dicen Bogotá tiene dos partes el sur y el norte, falso, Bogotá tiene una multiplicidad. En el norte hay periferias existenciales, en el sur hay belleza, riquezas, hay de todo”, afirma monseñor Rueda, al tiempo que recuerda su gusto por haberse podido acercar e involucrar con la realidad de los habitantes de calle.“Como dice el Papa, yo he cometido muchos pecados, pero yo he sido misericordiado por el Señor”.Enterarse de la noticia de su designación como Cardenal el pasado 9 de julio, fue más inesperada aún. La semana previa había finalizado la asamblea plenaria del episcopado y justamente, un día antes, la Iglesia colombiana iniciaba su luto por la partida de monseñor Elkin Fernando Álvarez Botero, obispo de Santa Rosa de Osos.Esa noticia, que llegó para el país como un bálsamo de esperanza, pareciera aún increíble para monseñor Rueda Aparicio. “El Papa me mandó una carta muy bonita, una carta privada personal donde me anima, donde me dice: “Ahora entra al Colegio Cardenalicio” y lo que eso significa en clave de servicio, en clave de unidad con el Papa, con el sucesor de Pedro y de martirio. Y por eso debe estar dispuesto”, expresa con actitud de obediencia el arzobispo de Bogotá.Luis José Rueda Aparicio, no solo el del nuevo título que recibirá en la Santa Sede, sino el ser humano, el hijo, el hermano, el tío, el primo, el amigo, narra que mirar hacia atrás, le da la oportunidad de darse cuenta cómo su vida se la ha ido transformando el Señor. Termina su relato afirmando que más allá de las pruebas, ama a Dios, a la Iglesia y al país y está dispuesto a entregar su vida.Vea la entrevista completa aquí:

Mar 26 Sep 2023

Durante audiencia, el papa Francisco animó a campesinos y a la REPAM a seguir promoviendo la protección de la Amazonía colombiana

Este lunes 28 de septiembre, Juan Felipe Martínez, secretario ejecutivo de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) Colombia, junto a tres líderes campesinos del sur del país, fueron recibidos en audiencia privada por el papa Francisco. Durante el encuentro en la Santa Sede, los representantes comunitarios presentaron al pontífice la realidad que vive hoy la Amazonía colombiana y la importancia del campesinado para la protección de este territorio.De acuerdo con la REPAM, durante este encuentro, el Santo Padre agradeció por su misión y los animó a continuar con ella, diciéndoles que “la Amazonía y toda la Casa Común necesita un alto para que sea protegida y valorada”. El papa Francisco les dijo también que la sabiduría sobre este tema no la tiene él, sino que es él quien aprende de la sabiduría de los pueblos para poder entregársela en sus escritos y cartas a la comunidad.En cuanto a los tres líderes que participaron en la audiencia, se trata de Marleny Yucuma Vásquez, Gerardina Cardozo Aragón y Francisco Rodríguez Tovar. Estos, hacen parte de la Arquidiócesis de Florencia, la Diócesis de San Vicente del Caguán y el Vicariato Apostólico de Puerto Leguízamo-Solano, respectivamente.Gerardina Cardozo Aragón hace parte de la ComisiónCoordinadora y el Comité Asesor de la REPAM Colombia, además lidera y coordina el proyecto“Amazonia” en San Vicente del Caguán. Siempre está en el constante trabajo de conservar, cuidar y defender la Amazonía Colombiana.Marleny Yucuma Vásquez es unalideresa campesina de la Vicaria del Sur en la Arquidiócesis de Florencia (Caquetá) y miembro de REPAM Colombia. Defensora de la tierra, trabaja día a día para conservar las semillas criollas y contribuir al cuidado de la Casa Común.Francisco Rodríguez Tovar es un campesino que hace parte de un proyecto del Secretariado Nacional de Pastoral Social denominado Transición Ecológica Justa (Ecología integral) para el fortalecimiento de los actores en Solano - Caquetá, representando al Vicariato Apostólico de Puerto Leguízamo - Solano.Entre los temas abordados durante el encuentro con el pontífice, estuvieron: gobernanza compartida, cómo frenar el extractivismo minero energético, regular los dineros de cooperación en la Amazonia,fortalecer las culturas y valorar el aporte del conocimiento ancestral y campesino para el cuidado de la Amazonia, así como promover una ecología integral.Este encuentro con el Santo Padre se produjo en el marco de una gira que realizarán los representantes de la REPAM por Roma, París y Bruselas entre el 25 de septiembre y el 7 de octubre. Periodo que coincide, en gran parte, con el “Tiempo de la Creación” convocado por el pontífice. Se trata de un tiempo de oración y acción ecuménica por el cuidado de la casa común, que inició a celebrarse este 1 de septiembre a nivel universal y que se clausurará el próximo 4 de octubre en Roma, actividad en la que también estará presente esta comitiva.Además de la audiencia con el Papa, “en Roma vamos a reunirnos con el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, con representantes del cuerpo diplomático acreditado en la Santa Sede, de la Cáritas Internacionalis; en París, con la Cáritas Francesa; y en Bruselas, con la Unión Europea”, dio a conocer en días pasados el Secretario de la REPAM.Así registró el encuentro Vatican News:Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida por Vatican News (@vaticannews)

Lun 4 Sep 2023

Directivos de la REPAM y campesinos de la Amazonía colombiana estarán en audiencia con el papa Francisco

El 25 de septiembre, en horas de la mañana, miembros de la Secretaría de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) en Colombia, junto a tres campesinos caqueteños, concretamente de los municipios de Morelia, San Vicente del Caguán y Solano, serán recibidos por el Papa Francisco en el Vaticano. Durante el encuentro con el pontífice, se podrán en evidencia realidades asociadas a la situación actual de la Amazonía colombiana. De acuerdo con Juan Felipe Martínez, secretario de la REPAM Colombia y líder de la delegación, este encuentro con el Santo Padre se dará en el marco de una gira que realizarán por Roma, París y Bruselas entre el 25 de septiembre y el 7 de octubre. Periodo que coincide, en gran parte, con el “Tiempo de la Creación” convocado por el pontífice. Se trata de un tiempo de oración y acción ecuménica por el cuidado de la casa común, que inició a celebrarse este 1 de septiembre a nivel universal y que se clausurará el próximo 4 de octubre en Roma, actividad en la que también estará presente esta comitiva.“Para nosotros como REPAM Colombia y como Amazonía colombiana es muy importante tener este encuentro y este diálogo con el Sucesor de Pedro, que nos permite visibilizar la realidad que vivimos, pero también pensar y soñar junto al Papa, lo que queremos para el buen desarrollo de nuestro territorio”, expresó Martínez.Temas como la destrucción de Amazonía por cuenta de actividades de extracción y proyectos minero energéticos, la necesidad de proteger el territorio y a las comunidades, las experiencias que la Iglesia Católica acompaña allí y otros aspectos asociados a la ecología integral, serán protagonistas durante estos espacios.Además de la audiencia con el Papa, “en Roma vamos a reunirnos con el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, con representantes del cuerpo diplomático acreditado en la Santa Sede, de la Cáritas Internacionalis; en París, con la Cáritas Francesa; y en Bruselas, con la Unión Europea” puntualizó el Secretario de la REPAM.

Jue 31 Ago 2023

Para septiembre: el papa Francisco pide acoger y orar por las personas que "viven al margen"

“¿Cómo hemos podido llegar a este nivel de indiferencia?”. Esta es la pregunta que plantea el papa Francisco en el Video del Papa del mes de septiembre, en el que, a través de la Red Mundial de Oración del Papa, pide rezar “por las personas que viven al margen” de la sociedad, es decir, por quienes padecen a causa de situaciones de pobreza, dependencias, enfermedades psíquicas o minusvalías.“Una persona sin techo, que muere en la calle, nunca va a aparecer en la primera página de los buscadores de internet o de los noticieros”, constata en Santo Padre.Ante la “cultura del descarte”, “cultura de la acogida”“¿Cómo dejamos que la ‘cultura del descarte’, en la que millones de hombres y mujeres no valen nada frente a los beneficios económicos, domine nuestras vidas, nuestras ciudades, nuestro modo de vivir?”, sigue preguntándose el pontífice. Además, con tristeza reconoce: “Se nos va a endurecer el cuello de tanto mirar al otro lado para no ver esta situación".“Centrémonos en la acogida (...) En acoger a todas las personas que lo necesitan. La ‘cultura de la acogida’, de recibir, de dar techo, de dar hogar, de dar amor, de dar calidez humana”, exhorta el Santo Padre. Así mismo, pide a todos los creyentes que se movilicen con la oración “para que las personas que viven al margen de la sociedad, en condiciones de vida infrahumanas, no sean olvidadas por las instituciones y nunca sean descartadas”.Acoger es más que ayudarA propósito de este video del Santo Padre para el mes de septiembre, el Cardenal Michael Czerny, Prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, quien visitó Colombia en abril del presente año, afirma: “El papa Francisco conoce el poder educativo de la oración y a través de él nos invita a desarrollar una cultura de la acogida". Agrega también que "la oración saca a la luz lo que está oculto en el corazón. Por eso, los que viven en los márgenes, como invisibles, deben encontrar espacio en nuestra oración, están en el corazón de la Iglesia: un corazón de carne y no de piedra. Un corazón de piedra descarta, un corazón de carne acoge”."La piedra descartada por los constructores se ha convertido en piedra angular; este mensaje sigue siendo fuerte y creíble si aún hoy damos la palabra a los descartados, si reconocemos la dignidad indeleble de quienes han sido crucificados por una economía despiadada, el acoso o la indiferencia. Acoger es más que ayudar: es poner al otro a nuestro nivel, redescubrir a una hermana o a un hermano que habíamos perdido. En la oración nos convertimos en miembros de un solo Cuerpo”, explica el cardenal Czerny.

Lun 14 Ago 2023

Universidades católicas de Colombia profundizarán en el pensamiento social del papa Francisco

Del 11 al 21 de septiembre, la Red de Universidades Católicas de Colombia (RUCC), llevará a cabo, en cinco regiones del país, la gira titulada “Francisco y las universidades católicas”. Una iniciativa académica que busca difundir el papel desempeñado por estas instituciones de educación superior colombianas en temas relacionados con ecología integral y economía solidaria. Esto, a partir de las enseñanzas del papa Francisco.En esta ocasión, la gira tendrá como invitado especial al padre Augusto Zampini-Davie, exsecretario adjunto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral del Vaticano. El sacerdote argentino estará compartiendo enseñanzas sobre el pensamiento social del Santo Padre para facilitar el discernimiento de las comunidades universitarias y organizaciones aliadas al respecto.Además, se realizarán paneles con expertos de los diferentes nodos y espacios de socialización de experiencias universitarias por mesas temáticas que permitirán a los participantes profundizar en estas reflexiones.Toda la información sobre la agenda y el proceso de inscripción, se puede consultar AQUÍ.

Mié 9 Ago 2023

El Pontífice se solidarizó con la comunidad musulmana por la quema del Corán en Suecia y Dinamarca

En los últimos meses, varios ataques discriminatorios a la comunidad musulmana se han verificado en Europa, especialmente en Suecia y Dinamarca, donde fueron quemados ejemplares del Corán, su libro sagrado. Expresando su solidaridad, el pasado 27 de julio, el papa Francisco escribió al doctor Abdul Karim Paz, representante de Diálogos Interreligiosos en la Fundación Islámica de Argentina (FIAS), de quien es amigo personal.“Querido hermano: El episodio de la quema del Sagrado Corán es, sencillamente, una salvajada. Estas cosas dañan e impiden el diálogo humano y maduro entre las personas. Que Dios lo bendiga, fraternalmente, Francisco”, es lo que se lee en el breve mensaje del pontífice.Francisco es, quizá, el Papa que más ha insistido en la necesidad de promover la fraternidad humana. Un ejemplo de esto se dio durante la reciente Jornada Mundial de la Juventud en Portugal, donde se realizó una ceremonia de plantación de árboles asociados a las seis grandes familias religiosas: taoísmo, hinduismo, budismo, judaísmo, cristianismo e islam, en el Jardín Botánico Tropical de la Universidad de Lisboa.Además, en 2019, tras el encuentro interreligioso en Abu Dabi, en el que dialogó con el Jeque Mohammed bin Rashid Al Maktum, el Gran Imán Ahmad Al-Tayyib, y con el Consejo de los de la Mezquita Sheikh Zayed, se instituyó la Jornada Internacional de la Fraternidad Humana que se celebra el 4 de febrero de cada año.En su carta encíclica titulada Hermanos todos (Fratelli Tutti), 199, sobre la fraternidad y la amistad social expresó: “Algunos tratan de huir de la realidad refugiándose en mundos privados, y otros la enfrentan con violencia destructiva, pero entre la indiferencia egoísta y la protesta violenta, siempre hay una opción posible: el diálogo”.Precisamente, Francisco ha dado ejemplo de diálogo con las culturas y las religiones. El sheij Abdul Karim Paz, compartió en una entrevista al periódico argentino Cultus algunos pormenores de sus encuentros: «Desde que era Arzobispo de Buenos Aires cultivamos una relación el marco del diálogo religioso y hemos tenido varios encuentros. El Papa Francisco, cuando estaba en Buenos Aires nos regaló un árbol de olivo pequeño que plantamos en la Mezquita y que empezó a dar aceitunas cuando asumió el papado».De acuerdo con el padre Raúl Ortiz Toro, director del Departamento de Doctrina y Promoción de la Unidad y el Diálogo del Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano, en Colombia el diálogo interreligioso sigue siendo un desafío.“La realidad de diversidad religiosa existe y ante ella la opción de la Iglesia no puede ser ni la estigmatización ni la discriminación, sino la cultura del encuentro y la espiritualidad de la acogida. Ya lo ha expresado también el Papa: la historia tiene dinamismos que se han fundamentado en la diversidad de etnias, sociedades y culturas; por ello, es evidente que hay dentro de nosotros una vocación natural a formar comunidad de hermanos que deben acogerse con respeto, mutuamente, y preocuparse los unos por los otros, venciendo la indiferencia”, afirma en sacerdote.

Mar 1 Ago 2023

“La Iglesia necesita a los jóvenes para no envejecer”: papa Francisco

Para este mes de agosto, el Video del Papa centra su reflexión en la Jornada Mundial de la Juventud 2023 que inicia hoy martes 1 y que se extenderá hasta el próximo domingo 6. En él, se pone el acento en el llamado que hace el pontífice para que los jóvenes se pongan en camino, a toda prisa, con alegría, a dar testimonio del Evangelio.En esta oportunidad, el video con la intención de oración del Santo Padre –que se confía a toda la Iglesia Católica a través de la Red Mundial de Oración del Papa-, trae una serie de preguntas que le envían jóvenes de diferentes partes del mundo: “Cuando voy a la Iglesia de mi barrio, solo veo personas mayores. ¿La Iglesia es ahora cosa de viejos?”. Ante este interrogante, por ejemplo, la respuesta de Francisco es contundente: “Si se convierte en algo de viejos, va a morir. (…) La Iglesia necesita a los jóvenes para no envejecer”.Además, en su mensaje, el Papa comparte su sueño de “ver en Lisboa una semilla del mundo del futuro”. Se refiere a mundo en el que estén en el centro el amor (ante la guerra que vivimos) y la alegría, “porque los cristianos, si no tenemos alegría, no somos creíbles”, afirma el Santo Padre.Vea el Video del Papa:

Jue 29 Jun 2023

Serán impuestos en las Iglesias Metropolitanas

Tres arzobispos colombianos, Mons. Luis Fernando Velásquez, arzobispo de Cali, Mons. Misael Vacca Ramírez, arzobispo de Villavicencio, y Mons. Hugo Alberto Torres Marín, arzobispo de Santa Fe de Antioquia, nombrados en el último año, recibieron este 29 de junio, el Palio arzobispal. Como cada año, en esta solemnidad de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, el papa bendice losPaliosal inicio de la misa en la Basílica Vaticana. Antiguamente, tras la bendición, el papa enviaba el Palio a cada uno de los arzobispos metropolitanos nombrados en el año inmediato anterior, a quienes se les imponía en sus arquidiócesis. Sin embargo, en 1984, san Juan Pablo II inició una nueva modalidad, al invitar a los nuevos metropolitanos a concelebrar con él en la Basílica vaticana, para luego imponerles el Palio durante la Misa. Esta costumbre permaneció durante todo el pontificado del papa polaco, en el pontificado de Benedicto XVI y los dos primeros años del papa Francisco. Pero desde el año 2015 el Papa Francisco, a través de una carta enviada a las nunciaturas del mundo, fechada el 12 de enero de aquel año, dispuso que, en adelante, los Palios seguirían siendo bendecidos por el Papa el 29 de junio de cada año, con motivo de la Solemnidad de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, incluyendo la participación de los nuevos arzobispos, pero que la imposición se debería dar en cada Iglesia Metropolitana. Para ello, el Papa de manera privada, entrega el Palio a cada arzobispo y este lo lleva a su Iglesia particular donde, en una celebración con participación de la comunidad eclesial, el Nuncio Apostólico de cada país lo impone. Mons. Guido Marini, entonces maestro de ceremonias del Papa, motivó esta decisión afirmando que tiene el propósito de “evidenciar con más fuerza la relación de los arzobispos metropolitanoscon su Iglesia local y, por tanto, dar también a más fieles la posibilidad de estar presentes en este rito tan significativo para ellos, y particularmente a los obispos de las diócesis sufragáneas, que de esta forma podrán participar en el momento de la imposición. Asimismo, Mons. Marini precisó que “se mantiene todo el significado de la celebración del 29 de junio, que subraya la relación de comunión y también de comunión jerárquica entre el Santo Padre y los nuevos arzobispos, y al mismo tiempo, a esto se añade -con un gesto significativo- esta unión con la Iglesia local.” De esto último hacen eco las palabras del Papa en su homilía para esta ocasión: “Hoy, en el momento en que algunos de nuestros hermanos arzobispos reciben el Palio, signo de comunión con la Iglesia de Roma, quisiera decirles: sean apóstoles como Pedro y Pablo. Sean discípulos en el seguimiento y apóstoles en el anuncio, lleven la belleza del Evangelio a todas partes, junto con todo el Pueblo de Dios". ¿Qué es el Palio? Si quiere conocer más detalles sobre ¿qué es el palio arzobispal? ¿Cómo se elabora? ¿Cómo se entregan? ¿Qué significa el Palio? ¿Qué dice la disciplina eclesiástica sobre el palio?, abra el siguiente enlace y entérese del desarrollo de estas preguntas. Foto: Transmisión Vatican News